Día de música

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Estos días en el colegio fueron muy aburridos, no ocurrió nada relevante, solo que ayer fué él primer día que Tom nos pasó a buscar a Lucy y a mi por mi casa.
Hoy también nos viene a buscar, recién me envió un mensaje preguntando si pasaba por nosotras. A lo que respondí que sí.

Me levanté y ahora estoy terminando de vestirme. Hoy decido ir tranqui, jeans, botas texanas y una remera de algodón color verde intenso. Mi chaqueta la dejo apoyada en el respaldo de una de las sillas y la mochila también.
Tocan a la puerta y escucho -¡Mery, soy yo!
-¡pasá, está abierto!-. digo en voz alta mientras entro al baño para hacer mi rutina de todas las mañanas.

-¡Lu, el café está listo faltan las tostadas!-.
-¡ok, preparo la mesa!, Tranquila.

Al ratito salgo del baño. Y miro el desayuno en la mesa.
-hola Lu-. Me acerco para darle un beso y un abrazo.
-hola amiga, que lindo que desayunemos juntas todos los días.
-si, pienso igual-. Digo para luego beber un sorbito de mi café.
-¿te imaginas el año que viene?.- dice triste.
-¿qué pasa el año que viene?
-y bueno tenemos que estudiar algo, vos querés estudiar relaciones públicas, ¿dónde lo vas a hacer?.
-no sé Lu, pero tranquila no nos vamos a separar.
-ese es mi miedo, no me quiero separar de ustedes dos.
-no pensemos en eso, faltan varios meses aún. Y alguna vuelta le vamos a buscar, no te preocupes-. Le digo mientras le sujeto la mano con intención de contenerla-.

Si hay algo que me enseñaron mis padres es a no preocuparme, pero si a ocuparme de las cosas en el momento indicado, ni antes, ni sobre la hora.

Terminamos de desayunar, juntamos las cosas y yo tiendo mi cama.
Tranquilas, bajamos y vamos caminando hacia la entrada de la finca. No entro a saludar porque deben estar durmiendo los huéspedes.

Cuando llegamos a la entrada, nos quedamos esperando a Tom, mientras hablamos de tonterías por ejemplo del examen de química que tenemos la semana que viene y del trabajo en grupo que nos mandó a hacer el profesor de marketing sobre una película.
Lucy lo hace con Gina y yo con Tomás.

-¿Ya arreglaron con Gina para juntarse?
-si, quedamos para el lunes próximo. Íbamos a reunirnos el domingo pero teniendo en cuenta que el viernes salimos y que el sábado es el cumple de Sofi. El domingo vamos a descansar.
-ahh bien. Yo no lo hablé con Tom.
-y hablando de él-. dice señalando la camioneta de Tom, que se detiene frente a nosotras.

-buenos días senoritas, suban-. Nos saluda haciendo un movimiento con la cabeza.
-gracias Señorito-. Digo imitamdo su tono de realeza.
-bueno, bueno nos podría haber abierto la puerta-. Dice Lucy riéndose.
-¡Lucy!-. Le digo contagiada por su risa.
-tiene razón, ¿qué clase de caballero soy?-. Responde alegre
Cuando llegamos al colegio, Tomás se baja rápidamente y nos abre la puerta a las dos.
-ahora si señoritas pueden bajar.
-ves Mery éste si es un caballero-.

Vamos riéndonos los tres hacia la entrada para encontrarnos con Gigi.
A unos metros de la puerta de entrada cruzo la mirada con Gina. Y ésta pone una mano en su cara como diciendo, no quiero ver lo que vas a hacer.
Sigo mirando para descubrir a que se refiere hasta que veo a Lucio arrinconando a una chica, la misma de la mochila de la otra vez. Y puedo ver claramente que ella quiere zafarse.

Automáticamente cambia mi mirada, creo que si tuviera poderes lo estaría calcinado.
Tom, que había visto toda la situación, me detiene sujetándome del brazo.
Giro para mirarlo y lo fulmino con la mirada-. él intentando tranquilizarme me dice. -Mery vamos juntos.

Voy caminando hacia Lucio y con una fuerza que no me reconozco lo tomo con las dos manos del brazo y con todas mis fuerzas logro girarlo.
-¿qué mierda sucede contigo?, ¡soltala!-. Le grito.

Amor travieso. Lo que esconden las caras inocentes Donde viven las historias. Descúbrelo ahora