Chapter Thirteen.

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"Traicionados"






Bostezando, Valentina se dirigió a la oficina de su jefe. La secretaria de Marcos no se encontraba en su sitio, pero eso no impidió que ella se dispusiera a entrar en la oficina. No hace mucho, Marcos le había llamado para que asistiera a su oficina. Tocando la puerta un par de veces, recibió la sobria respuesta por parte de él.

-"Adelante,"

No fue sorpresa para ella, el encontrarlo trabajando, pese que a penas eran las siete de la mañana. Parecía que trabajar ocupaba gran parte de su tiempo y no por nada tenía su propio bufete, aunque contaba con casi la misma edad de ella.

Marcos seguramente reunía las cualidades que ella no. Por ejemplo, el levantarse temprano nunca había formado parte en la lista de sus actividades favoritas, pero ahora se le estaba complicando un poco la tarea. Michael no ayudaba demasiado, y aunque ayer habían holgazaneado todo el día, Valentina sentía que no quería separarse de su lado, especialmente no después de todas las heridas que había padecido éste.

Con gran, gran esfuerzo, se había obligado a dejarlo durmiendo; sin advertirle para nada que tenía que trabajar hoy.

-"Buenos días, Marcos. ¿Qué hay de nuevo?" Siendo esquiva, pero no demasiado, Valentina se forzó en mantener distancias con Marcos. Ya Michael había manifestado su aversión a la cercana relación laboral que tenía con él, y cuando las cosas se habían estabilizado un poco más con Michael, sencillamente no quería arriesgarse a perder el poco progreso que habían hecho.

Marcos, que hasta el momento había continuado enfrascado en la lectura de algún documento en su computadora, renunció a la labor el mismo instante de oír la voz de Valentina.

Con ojos perspicaces, no pasó inadvertido para él, las leves ojeras que hacían acto de presencia en la cara de la joven. Levantando una ceja, respondió al saludo, invitándola a tomar asiento con un gesto de su mano.

-"Buenos días, Valentina. ¿Lista para conocer el horario de actividades de la semana?"

Valentina retuvo las ganas de rodar los ojos. ¡Qué excusa tan pobre para una reunión! ¿No podía ser más creativo? Aunque se detuvo de decirle sus pensamientos, solo se limitó a asentir mientras tomaba asiento en una de las sillas dispuestas en frente del escritorio de Marcos.

-"Bien" Marcos se dirigió otra vez a la computadora, rápidamente consultando el archivo que contenía el calendario –"Tenemos una semana algo ajetreada. Por ejemplo, hoy estás hasta el tope. Cosas sencillas, nada complicado todavía. La única prioridad que tienes es atender a ese cliente tuyo... me parece que su nombre es... ¿Agustín Bernasconi?"

Valentina suspiró –"Casi lo olvido. Hoy tengo cita con él, ¿no? Se supone que debo ir a pegarle una pequeña visita a su ex asociada."

Marcos la miró otra vez. –"Te sugiero que reúnas el testimonio de tu cliente sobre los hechos y luego, con ese dato vayas a ver a su ex. Nunca es bueno un enfrentamiento entre ellos. Sólo notifícale que tu cliente está tomando acciones contra ella en una demanda." Con gesto más relajado, expresó –"Intimídala, pero no demasiado. Asústala pero no la espantes. Hazla creer que tu demanda es ridícula, y si puedes, engáñala aparentando que eres estúpida."

Valentina sonrió malévola. –"¿Y eso me asegurará la victoria?"

Marcos asintió –"Está comprobado. No tratará de conseguir un buen abogado, no al menos un experto en la materia. Todo eso, influye aunque no lo creas."

Valentina se levantó –"Bueno, Marcos. ¿Algo más que quieras discutir sobre mis casos?"

Marcos negó –"No, sólo quería darte algunos tips. Aunque claro, tú no los necesitas."

BAJO CONTRATO |MICHAENTINA|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora