BAJO CONTRATO |MICHAENTINA|

Chapter Nineteen.

"Trasladados"

*Maratón 2/4  

—"No puedo ir," Sentenció Valentina a través del móvil.

Michael se estremeció mentalmente, de verdad debía agradecer a los cielos que esa frase no estuviese dirigida a él. Porque sino, sin duda alguna, se hubiera desatado el caos.

Sonrió malévolo. Valentina había sido literalmente, muy fácil de convencer.

Valentina estampó un pie por la frustración, y lo distrajo de las imágenes mentales que le traía el recuerdo de haberla convencido. Volvió a sonreír.

—"¡No Lio! ¡Él no tuvo nada que ver!" Valentina se quejó, inmediatamente volteándose en un intento para que él no la oyera.

Michael suspiró. Su familia nunca estaría de acuerdo con su matrimonio, ¿no? Rogaba que no sucediera lo mismo con sus tíos. No es que importara mucho—pensó con acritud—, de todas formas, Valentina y él se separarían tarde o temprano.

—"No. Está bien." La escuchó suspirar, —"Salúdala de mi parte" La conversación parecía finalizar —"Está bien. Adiós"

Valentina volvió con una sonrisa leve pintada en sus labios. Michael no hizo menos que responderle.

—"¿Alguna queja?" Preguntó, aunque de por sí, la duda era bastante necia.

Ella levantó las cejas, sorprendida —"¿Queja? No, más bien yo diría que fueron amenazas" Se encogió de hombros —"¿A quién le importa?"

Él levantó una ceja. Valentina estaba escondiendo algo.

Tal y como le había dicho a Malena, Valentina, sin duda alguna, era mucho más difícil de convencer. Había estado casi seguro al creer que Valentina no cedería esta batalla sin una dura pelea. Por supuesto el factor 'sex' había jugado de su lado, pero, aún así todo había resultado casi, casi demasiado fácil.

La inquietud lo movió a indagar en el asunto.

—"¿Valentina?" Ella se acercó, mientras lo miraba a los ojos —"¿Hay algo que quieras decirme?"

Ella volvió a levantar sus cejas, extrañada —"¿Sobre qué?"

Michael  clavó su mirada sobre ella. No estaba rara. De hecho, no estaba para nada abatida como había creído que estaría, especialmente tras un encuentro con su familia.

—"El hospital. ¿Sucedió algo ahí?" Michael musitó dubitativo.

Ella se mordió el labio, mientras se apoyaba en el marco de la puerta de la habitación.

—"No. Vi a mi hermano y a mi padre." Pareció querer esconder algo —"Karol no recibía visitas, así que no pude verla"

Michael quiso buscar algo más, en aquella misteriosa mirada, en el gesto levemente compungido de ella, en sus cejas que parecían temblar, o en el estremecimiento de su labio inferior...

—"Algo pasó" Determinó. —"Dímelo"

Valentina maldijo por lo bajo. —"Maldita sea,"

La mañana en La ciudad de México seguramente era la parte del día que más le gustaba, pero definitivamente no, cuando Michael comenzaba a analizarla.

Había algo sobre él que le permitía saber las cosas, aún cuando más se esforzaba para ocultarlo. Quizás la noche anterior le había pasado desapercibido, especialmente cuando prácticamente lo había sacado de la cama, pero hoy, en plena claridad de la mañana, con todos sus sentidos bien puestos —y con un nivel de cero excitación— Michael podía ser el hombre más listo y astuto que jamás hubiera conocido.