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El par de jóvenes se encontraba haciendo fila en un restaurante. Habían llegado hace 15 minutos y no se habían movido. Eso era lo que ocurría todos los días a la hora del almuerzo.

El rizado colocó sus manos en las caderas del menor para atraerlo a sí. Puso su cabeza en su hombro y comenzó a besar el cuello del menor.

-Joel, qué haces?- preguntó alejándose, mirándolo con curiosidad.

-Lo que hacemos todos los días-susurró Joel. -Con excepción que estamos en público.

Volvió a lo que hacía, sintiendo como Erick sonreía. Besaba cuidadosamente su cuello, paraba de vez en cuando para lamer. Empezó a succionar el cuello de su amado, dejando un rastro de saliva acompañado por marcas rojas.

En su oído escuchaba como la respiración de Erick se entrecortaba. Joel sonrió, y dejó uno que otro mordisco. Sintió como Erick respiró hondo al sentir el primer mordisco. Sabía que lo estaba disfrutando al igual que el.

-J-Joel, estamos en... en... estamos en p-público.

-No me importa. Estoy... perdidamente... enamorado de ti.-dijo mientras mordía el lóbulo de la oreja. -Quiero que todos sepan que eres mío.

Erick se volteó para verle la cara a Joel. Sonrió y unió sus labios en un corto beso.

-Te quiero, Joel.

-Yo te quiero muchísimo más, Erick.

Ambos se miraban fijamente sonrientes. Si estuviesen solos, ninguno de los dos tendría ropa, y estarían gritando el nombre del otro.

-Me da lástima interrumpir este hermoso momento, pero, somos los próximos- dijo Johann después de carraspear. -Y por favor, la próxima vez que estén apunto de tener sexo público, me avisan. Fue un momento incómodo verlo todo.

Joel y Erick se miraron sonrojados y bajaron la mirada. Que momento tan vergonzoso.

Los tres chicos esperaron a que la cajera terminara de tomar al orden de la familia que se encontraba al frente para pasar.

Johann y Joel pusieron sus órdenes y dejaron a Erick a solas para que ordenara.

-Buenas, me gustaría tener una hamburguesa, dos órdenes de papas fritas, y una malteada.

-Eso sería todo?- preguntó la cajera con una gran sonrisa. Joel miraba desde lejos la escena con lejos. No podía creer que la chica le coqueteaba a Erick.

-Sí- asintió Erick.-Me gusta tu collar.

-Gracias- la chica respondió sonrojada.

-Mi amor, si quieres te compro uno así. Te quedará di-vi-no.

-Joel? Que haces?- preguntó Erick confundido.

-Sólo quiero que el amor de mi vida tenga todo lo que quiera.

El par pagó y se fueron con su comida. El menor aún seguía confundido por el comportamiento del rizado pero no le prestó mucha atención.

[...]

Estaban en la playa tomando el sol. Arena entre sus dedos, sal en su piel. Erick, su ex-novio y ahora esposo, a su lado. Tenía una vida perfecta.

-Mmm, Joey, te amo- dijo el menor mientras se lanzaba sobre el rizado.

-Te amo muchísimo mas, Erick.- con esto dejó un largo beso en sus labios.

Joel mordía el labio inferior de Erick, causándole dolor pero a la misma vez placer.

El ojiverde entre abrió su boca, dándole paso a la lengua del rizado. Éste exploraba cada rincón de su boca como si nunca antes lo hubiese hecho.

Debido a que ambos se encontraban sin camisa, Joel puso sus manos tirando del elástico del traje de baño de Erick.

Dejaba tiernos besos en su mandíbula, en su cuello, bajaba por su abdomen hasta llegar a su pelvis. Allí paró y vaciló por unos segundos. Quitó toda la ropa que obstruía su camino, dejándolo completamente desnudo.

Bajó hasta la punta de su miembro y lo lamió, obteniendo un gemido de Erick como respuesta.

-Quieres eso, chiquito?

Erick solo asintió, haciendo que Joel sonriera con lujuria.

Joel metió el miembro de Erick en su boca succionando con lentitud, consiguiendo más gemidos provenientes de Erick.

-Jo-Joel, m-me ve-vengo...

Joel sintió como el líquido pre-seminal caía sobre su lengua. Justo cuando el semen empezaba a salir, una llamada lo interrumpió.

Joel abrió los ojos y se sentó sobre su cama. Todo había sido un sueño.

Su teléfono volvió a sonar. Esta vez lo miró y vio que era su madre.

-Hola, ma.-dijo aun con sueño.

-Hola, Joey. Estabas despierto?

-Sí, sí. Bueno, realmente no. Interrumpiste un buen sueño.

-Ah si? Con quién soñabas?-preguntó su madre. No sabía si decirle que soñaba que tenía sexo con Erick.

-Nadie importante, realmente.

-Cariño, para no ser "nadie importante" parece que te importaba lo suficiente para protestar.

-Pues, soñaba con Erick.-la haz cagado, Pimentel.

Erick? Tu novio? Tienes novio, Joel?

-No mamá, todavía. Pero es el amor de mi vida.

-Y ya han...

-Mamá!-la interrumpió Joel. -No te debería contar nada acerca de mi vida!

-Perdón, cariño. Es que me emocioné.

-Te perdono, pero no vuelvas a hacer eso. Lo único que te digo es que deberías estar orgullosa, sigo siendo el activo.

-Oh por Dios, Joel! Cómo puedes dejar que el pobre muchacho sea el pasivo?

Joel sólo rió al otro lado de la línea. Amaba molestar a su madre con quién era el pasivo.

-Sólo te digo una cosa, Joel.-dijo su madre con un tono serio.-No me hagas abuela tan pronto.

-No te preocupes, ma. No embarazaré a Erick. Te lo prometo.

[...]

-Oye Joel, te tengo una pregunta.- dijo el menor. Sentía que su corazón se le iba a salir del pecho.

-Dime, mi amor.

-Tu crees que- las manos de Erick empezaban a sudar por los nervios. -algún día a ti te guste formar una familia conmigo?

-Claro, Erick, pero creo que ahora mismo no sería un buen momento para tí y para mí. Míranos, yo sufriendo económicamente y tu no has ni terminado la escuela.

-Pero, sí te gustaría que tengamos hijos algún día, cierto?- Erick sentía el miedo apoderándose. Temía que Joel le pidiera que abortara.

-Si, mi amor. Pero ahora creo que no sería apropiado.- respondió Joel dándole un beso en la frente.-A qué se debe semejante pregunta?

-Pues... Joel, tenemos que hablar.


爱 | photographie ;; joerickDonde viven las historias. Descúbrelo ahora