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En los últimos días Erick había estado teniendo dolores, casi no podía dormir, y sus pezones se encontraban más hinchados de lo normal. Le había contado a Joel sobre sus síntomas y éste había prometido hacerle una cita con la doctora, pero no creía que duraría tanto tiempo. No fue hasta que Erick fue al baño y vio sangre que decidieron ir al hospital.

Lo habían llevado a sala de emergencias y allí le habían asignado un cuarto. Actualmente se encontraba acostado en la camilla, con Joel a su lado tomándole la mano.

—Bebé, todo va a estar bien, te lo aseguro—. repetía Joel tratando de calmarle los nervios.

Se podía decir que su labio inferior era casi inexistente debido a que se la pasaba mordiéndolo a causa del dolor. Los doctores le habían dicho que debía dormir y no estresarse, pero eso era lo más que hacía junto al no dormir.

Finalmente, el doctor que originalmente le había atendido entró a la habitación.

—Dime, joven Colón, ¿cuanto tiempo lleva de embarazo?— preguntó mientras se ajustaba sus lentes.

—Ocho meses, casi nueve—. respondió tratando de moverse lo menos posible. El doctor solamente asintió y salió de la habitación. Minutos más tarde regresó con dos enfermeras. Cada una de las mujeres se paró a su lado, moviendo las barandas de la camilla.

—Joven Colón, tendremos que hacerle una cesárea de emergencia—. dijo el doctor antes de ir a ayudar a las enfermeras.

(nota: hagamos que narré la cesárea. vi varios videos de cesáreas y, uh, no sé cómo narrar eso.)

Una hora más tarde ya habían terminado con el procedimiento. Su preciosa hija, cual habían llamado Ámbar Valentina, se encontraba entre sus brazos. La niña tenía el cabello y color de piel de Joel junto con el color de ojos de Erick. Simplemente era hermosa.

ufas, perdón por capítulo EXTREMADAMENTE CORTO, pero prometí capítulo para hoy y tengo muchas cosas que hacer.

¡feliz año nuevo!

爱 | photographie ;; joerickDonde viven las historias. Descúbrelo ahora