Después de mi conversación con Matteo, él me llevó a su casa y ahora estaba con Melissa preparando la comida, y ya había aclarado una de las muchas dudas que tenia,según Melissa ellos podían comer comida de humanos también, no es necesario pero les gusta.
La puerta se abrió y dejo ver a Ambar, Ramiro y Gaston, acababan de llegar de la escuela.
Matteo no los quiso llamar cuando llegamos pero si llamo a su padre, ellos se encontraban en la sala desde que llegamos, estaban hablando respecto al tema, y lo de mantener a salvo a mi madre y a mi.
En realidad me siento muy mal por causar tantas molestias a esta familia y mas a Matteo, he sido como una carga para el, y su familia claro.
Me han salvado la vida tantas veces en tan poco tiempo, sin estar obligados a hacerlo... y me demuestran tanto cariño que ni siquiera se como se los pagare...ahora hasta protegerán lo mejor de mi vida que es mi madre.
-¡¡¡LUNA!!-Grito Ámbar desde la entrada de la cocina para correr a abrazarme, acto que correspondí con una sonrisa, ella se había convertido como en mi mejor amiga, se lo contaba todo... claro todo todo no pero... era en la persona que le podía contar todo sin problema y confiaba en ella, ademas de que era simpatica, loca, atrevida, y le importaba poco lo que pensaran de ella- ¡Que bien que estas aqui!- dijo separándose de mi.
-Ambar, creo que tu y tus hermanos deberían ir a hablar con tu padre y el sádico de tu hermano- dijo divertida, yo reí, me sentia muy comoda con ellos, Ambar frunció el ceño pero asintio y se fue- y tu querida pon esto en la mesa- yo asenti y lo hice.
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-Luna, ¿por qué no llamas a los chicos para que vengan a comer?
-¡Claro!- salí de la cocina y me dirigí a la sala donde estaban todos.
-Esto no se puede quedar asi, ya a empezado a amenazar. Sus amenazas no son en vano Matteo- escuche a Gaston.
-Ya lo se, pero no es opcion alejarme de Luna y mucho menos permitir que la lastimen a ella o a su madre- escuche a Matteo.
Okey se que es malo escuchar conversaciones pero... ¡venga! La conversación es de mi.
-Ya pero Matteo, sus amenazas van en serio, no podemos arriesgarnos y ya vez que la tipa da pelea...- dijo Ramiro.
-¿¡Que parte de no me alejara de ella no entendieron?! ¡¡Maldita sea!!- escuchar a Matteo decir eso, hizo que mi corazon empezará a acelerarse, pero Matteo estaba enojando y eso no era bueno, asi que decidi por fin salir de mi escondite e ir a informales que la comida ya estaba lista.
-Perdonen...- entre a la sala y todos los ojos se posaron en mi- um... ya esta la comida- dije nerviosa.
-¡Genial!- dijo Ramiro parados seguido de Gaston y Ambar.
-Gracias, por avisar Luna- me dijo Franco para despues irse y dejarme con Matteo sola.
Un silencio inundo la sala, Matteo estaba con un vaso de... whisky en la mano, cosa que se me esta haciendo costumbre ver cuando vengo acá.
Estaba frente a mi, pero retirado.
Hora de romper el silencio.
-Gracias...
-¿Por qué?- dijo frunciendo el ceño.
-Por todo...- dije-Por protegerme siempre y por tener que salvarme siempre, y tambien a tu familia que siempre están dispuestos a ayudar sin recibir nada a cambio y por todo el cariño que recibí de ellos y de ti...
-Hey hey, no llores- no me habia percatado que se me habian escapado un par de lagrimas.
<Genial, ahora va a pensar que eres una llorona>
-Lo siento... siento no poder daros nada a cambio, lo que ustedes me dan es mucho, lo hacen sin estar obligados y...
-Hey, tranquila... no es nada- dijo riendo- no tienes que agradecer nada Luna.
-Si tengo que agradecer y mucho- el me sonrio y me tome de la mano y nos fuimos a el comedor donde ya todos estaban sentados, su vista se fijó en nuestras manos entrelazadas, yo me sonroje a mas no poder.
-Creo que ya eres parte de la familia Luna- dijo divertido Franco.
Si estaba sonrojada, ahora soy un tomate.
••••••
Después de tener una semi discusión con mamá respecto a donde estaba, porque llegue tan tarde y decirle que estaba con la familia de Matteo para que no me echara lata, ahora estoy haciendo los deberes sentada en el piso de mi habitación.
No entiendo de qué me sirve la ciencia con lo que quiero ser en la vida no tiene nada que ver...
-Luna, ¿puedes bajar? Hay una amiga tuya abajo- dijo mi madre entrando por la puerta de mi habitación, sonriendo... pero estaba como ida...
Yo deje todo lo que estaba haciendo para bajar, debia ser Yam, Lara o Ambar son mis unicas amigas.
Estaba bajando las escaleras y lo que vi me llenó de pánico.
-¡Hola amiga!- Crystal estaba ahí y mi madre estaba al lado... ¿pero que? ¿como?
-Mami alejate de ella- le dije a mi madre pero ella parecia estar en su mundo.
-Oh, ella no te va a hacer caso, la tengo controlada, pero a lo que venia-Hizo una sera y un hombre alto con cara de pocos amigos, con pelo negro, ojos azules, y piel pálida entró por la puerta y sujeto a mi mama.
-¡¡DEJALA!! NO LE PONGAS TUS MANOS ENCIMA- dije corriendo hacia ellos pero no avance mucho ya que fui aventada por Crystal hacia la pared haciendo que rompiera una mesa que se encontraba allí, gruñí por el dolor que me causó, pareció como si me hubiera roto cada hueso.
No me podía poner de pie y al parecer a Crystal le dolio tambien pero ella se recuperaba muy rapido era una jodida vampira.
-Si te estás quieta no te harias daño, y tu madre no saldria perjudicada- las lagrimas empezaron a caer de mis ojos.
-Te advertí que si te veía cerca de Matteo mataría a tu madre, y mirame aqui, como vi que pasaste un agradable rato con la familia de Matteo y el planeando como frenarme- rie- que ridiculo-Se acerco a mi-Como si fuera posible, pero estoy aqui para cumplir mi promesa. Como prometi, tu te acercabas a Matteo y yo mataba a tu mama-Hizo una pausa-Te adverti, pero tu no hiciste caso...
-¡¡NO, POR FAVOR!! TE LO SUPLICOO- grite con todas mis fuerzas cuando vi que estaba acercándose a mi madre-HARÉ LO QUE QUIERAS, PERO NO LA MATES POR FAVOR TE LO SUPLICO- ella se detuvo en seco.
-¿Lo que sea?- pregunte aun de espaldas.
-Si, lo que sea- dije desesperada.
-Bien- dijo alegre con una gran sonrisa.
Mierda, caí en su juego....
-Te vendras con nosotros- me dijo, hizo una seña y el hombre que estaba con mi madre vino hacia mí, me levantó del suelo y me agarro del brazo para que no intentara nada.
-No recordaras nada de esto- le ordeno a mi madre mirandola.
-No recordare nada de esto- dijo mi madre en estado zombie... ese era el poder de Crystal...
-¡Bien!- mi madre se fue a la cocina como si no estuviera pasando nada. Pero al menos estaba más tranquila que no le pasaría nada-Te vienes conmigo, tengo planeado muchas cosas y no hay porque retrasarse.
-¿Que vas a hacerme?- dije con notorio nerviosismo pero más que nerviosismo era miedo, terror.
-Lo que debi hacer, hace mucho tiempo... matarte-me dijo con una sonrisa sádica...