AMBER CLAYTON
La limosina se detiene frente a la mansión, espero a que mi hermano se baje para después bajarme yo. La cena estuvo algo aburrida como todas las demás, la irritante de Britney a la hora de cenar no paraba de hablar con su madre, por desgracia mi madre nos juntó con su familia y lo peor de todo es que me tocó sentarme a la par de ella. En serio, no se como hace su familia para aguantársela, su voz es muy chillona, ya me estaba volviendo loca a su lado. Ni comer en paz podía.
-Oye Amber, te tengo noticias- me habla el chofer de la limosina antes de salir, lo miré confundida. ¿Noticias?
-¿Qué noticias? - le pregunté mientras me giraba para poder mirarlo mejor.
Ethan Hamilton, el chofer favorito de mi padre, es un gran chico que se ha llegado a convertir en uno de mis mejores amigos. Tenemos algo en común y es el fanatismo al Fútbol Americano, somos unos auténticos fans de ese deporte. Aunque nuestros equipos son diferentes.
Pero mi amistad con él la tengo en secreto, ya que mi madre no le gusta esas cosas, según ella "los empleados son empleados y no quiero que se relacionen con ellos" aunque la verdad es algo patético, para mí, son personas como cualquiera de nosotros. Si ella o mi padre se llegan a dar cuenta, lo más seguro es el fin de mi mundo para mi exclusivamente.
-Hoy comienza las finales de la NFL y lo mejor de todo es que comienzan los Chicago Bears- me informa, elevo una de mi cejas. ¿Tiene que ser hoy? Me están jodiendo, es obvio que mis padres no me va dejar ir, siempre se retienen a dejarme ir a esos partidos y lo mejor de todo es que no sé el porqué.
-¿Tú irás? -le pregunto, él me mira por el espejo retrovisor. Sé que irá, nunca se pierde ningún partido de las finales.
-Aún no lo sé- me responde, hago una mueca. Me muero por ir e iré, pero aún no sé cómo.
-Bien, iré a hablar con mi padre o con mi madre. Talvez me dejan ir aunque sería un milagro, igualmente no me rendiré- le digo preparándome para salir de la limosina.
-Suerte- me dice, le sonrío antes de salir y comienzo a caminar hacia la entrada principal de la mansión. Ethan sabe muy bien que mis padres no me van a dejar, aunque haré lo que pueda. Porque a ese partido voy porque voy, a las buenas o a las... malas. Estoy cansada de que todos los años sea lo mismo, cuando quiero ser libre y hacer lo que realmente quiero ahí están mis padres para impedirlo. Valla desgracia.
[]
Camino a paso decidido hacía la gran sala de estar de la mansión, mi madre se encuentra leyendo uno de sus típicos libros antiguos. Nosé que le vé de interesante a esos libros, hablan más de historias de supuestos reyes y nosé que antiguos.
Después de la pequeña charla con Ethan, me encerré en mi cuarto (como siempre). Tenía que saber en qué lugar del país será el juego y es nada más y nada menos que en New Jersey, sé que queda algo lejos y con más razón mi madre no me vá a dejar ir. Aveces pienso que son muy sobreprotectores conmigo, mi hermano sale donde él quiera y yo no. Injusticia, solo por tener 18 años.
-Mamá- la llamo mientras me acerco, ella levanta su mirada del libro y la posa en mí. Sus típicos anteojos redondos y grandes descansan en el puente de su naríz, lo cual la hace ver más mayor. En sierta parte se perece a mi abuela Sarah.
-Dime- me habla ya con su atención en mí. Tomo asiento en uno de los sofás individuales frente a ella.
-¿Me dejas ir a New Jersey? - le pregunto directamente mientras la miro con atención, lista para mirar su reacción. Ella lentamente toma sus lentes y los aparta de ella mientras me mira con asombro y confusión mezclados.
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La Hija Del Presidente [editando]
RomanceAmber Clayton es una jóven que no le gusta la política y mucho menos ser una chica fresa. Por desgracia su padre es el Presidente de los Estados Unidos, Amber se ve obligada a asistir a fiestas elegantes y a cenas. Llega un día en el que se cansa d...