La Hija Del Presidente [editando]

Capítulo 24: Unión vengadora

AMBER CLAYTON

El día de ayer fue muy emocionante, muchas emociones para mi gusto. Ashton y yo últimamente nos hemos tenido mucha confianza, hasta el punto de llegar a contarnos cosas o situaciones muy íntimas. Han pasado dos miserables meses y una pequeña parte de mí, siente que lo conozco de toda la vida ¡y eso me pone histérica! Solo llevamos dos meses conociéndonos personalmente, ya que él me conoce por ser la hija de su presidente y yo lo conozco a él por ser uno de los mejores jugadores de mi equipo favorito de la NFL.

Eso algo irónico.

—¡Amber! — oigo a mis espaldas mi nombre, con pesadez me doy media vuelta para encontrarme a Grace frente a mí— Al fin te encuentro, necesito hablar contigo— habla cuando tiene mi atención en ella, mi ceño se frunce.

—¿Es bueno o malo? — inquiero, ella rueda los ojos.

—Un poco de los dos— confiesa para después jalar de mi brazo derecho y guiarme a quién sabe donde.

—Comienza por lo bueno— hablo una vez que nos sentamos en el césped del gran jardín de la Universidad. Creo que es un agradable lugar para platicar con calma.

—Bien— dice, acto seguido se le comienza a formar una gran sonrisa en su rostro, la miro raro— ¡Chase y yo somos novios! — chilla de repente, mis cejas se alzan con asombro. Al fin, lo único que quería escuchar el día de hoy. Al fin estos dos tórtolos son novios.

—¡Que bien! — digo con una gran sonrisa en mis labios— Felicidades— termino de decir, pasan unos segundos y Grace se encuentra encima de mí dándome un gran abrazo, inmediatamente se lo devuelvo. Suelto una carcajada. Chase el mejor amigo de mi hermano y Grace desde la secundaria se gustan, no entiendo como nunca llegaron hacer nada. Los dos se hablaban y eran muy amigos pero la timidez es lo que los mataba.

Grace mucha veces me llegó a decir el miedo que tenía al llegarle a contar lo que siente a Chase, igualmente nunca la obligué a hacerlo. Le dí los consejos que creí que eran necesarios pero no veía ningún avance. Y pues, ya han pasado alrededor de cinco años y hasta ahora veo el resultado de mi paciencia.

—¿Y cuál se supone que es la parte mala? — inquiero con curiosidad, ella hace una mueca de disgusto.

—Esa parte mala tiene un nombre y apellido... April Wells— termina de decir, rápidamente mi cuerpo se tensa. ¿Porqué siempre tiene que ser un dolor en el trasero esa chica?

—¿Qué pasa con esa chica? Dime que no es nada grave porque te juro que ahora mismo la voy a dejar sin dientes— hablo un poco más alterada, Grace me mira algo sorprendida. Sé que no se esperaba esa reacción de mi parte.

—Me quiere quitar a Chase, por ahí oí que la chica está obsesionada con él— me dice mientras juguetea con sus manos. ¿Obsesionada? Oh vamos, lo que quiere es separar a Chase y a Grace, sé como son las amiguitas de Brittney. Pero primero con Ethan y ahora con Chase ¿Qué es lo que realmente quiere esta chica de mí?

Paso la mano por mi cabello con frustración, esta chica está acabando con mi paciencia.

—¿Qué piensas tú al respecto? — pregunto un poco más tranquila, nesecito saber su opinión de la situación.

—Pues, aún nosé. No quiero perder a Chase pero sé que ella se le meterá hasta por los ojos— habla con impaciencia, veo preocupación en su rostro. —Sé que no voy a estar encima de Chase todo el tiempo para alejarla, pero tampoco puedo dejarlo solo— termina de decir, miro a mi alrededor mientras pienso en una solución.

Varías ideas pasan por mi cabeza, matar no sería una buena idea. Pasaríamos años en la cárcel y eso es lo que menos quiero en este momento.

¿Y si hacemos una unión vengadora? Pienso. Y en realidad no es tan mala la idea, Grace se ocuparía de separarla de Chase y yo al fín podré vengarme por lo que le hizo a Ethan.

—Unión vengadora, esa es la solución— agrego con autoridad, Grace me mira confundida. Ruedo los ojos— Hay que vengarnos entre las dos, haremos hasta lo imposible para que te deje en paz con Chase— le explico, ella me mira con atención mientras procesa mis palabras en su cabeza.

—¿Y tú para qué te quieres vengar? — inquiere con curiosidad, la miro sin decir nada. No le diré lo que le hizo a Ethan, no creo que a Ethan le guste la idea de que le cuente lo ocurrido en su relación con April.

—Eres mi amiga ¿eso no es lo que quieres, que te ayude con esa situación? — pregunto, intentaré que no sospeche nada. Ella no puede saber que me voy a vengar por mi mejor amigo, aunque él no sepa nada. Igualmente sé que no estará de acuerdo.

—Bueno, en eso tienes razón pero antes de comenzar con la "unión vengadora"— dice mientras hace comillas con los dedos— te quiero aclarar que no estas obligada a echarte a April de enemiga. No quiero que te metas en problema por mi culpa y... — rápidamente la interrumpo, no quiero que siga diciendo esas cosas.

—No, tu eres mi amiga y tendrás mi ayuda. Así tenga que echarme a April de enemiga— hablo, ella me mira con melancolía. — Igualmente me cae mal— termino de decir, mientras me encojo de hombros restándole importancia.

Bién, April prepárate para lo que viene.

ASHTON GREEN

La piscina del coach es totalmente relajante, no entiendo como antes no hemos venido a su casa. Más de una vez hemos jugado aquí en California y siempre nos hospedamos en un hotel pero el coach esta vez nos hospedó en su casa. La casa es sumamente grande, tiene dos habitaciones para visitas y eso es más que suficiente para once chicos.

—¡Bomba atómica! — grita Gabe, y antes de que todos nos diéramos cuenta, ya él se había tirado a la piscina haciendo así que mucha agua nos cayera en la cara.

—Te he dicho que dejes de hacer eso muchacho, me vas a llenar los pulmones de agua— gruñe el coach con furia, veo como Gabe se sumerje lentamente en el agua para que el coach no lo mate.

Con mucha lentitud salgo de la piscina y tomo una toalla para secar mi cabeza, pero al los minutos siento una mirada en mí. Miro a todos lados para saber quién me está mirando pero no logro ver a nadie, solo los chicos hablando animadamente, unos fuera de la piscina y otros dentro de ella. De un momento a otro siento como alguien arrebata la toalla de mis manos, mi ceño se frunce al mirar a la hija del coach frente a mí. En su rostro veo una sonrisa coqueta y maliciosa.

—De seguro traes locas a la chicas— opina mientras juega con mi toalla, la examino con la mirada. Lleva puesto tan solo un short blanco y la parte de arriba su traje de baño color rosa pastel. 

No entiendo como el coach no se a puesto a regañarla, habiendo once chicos a su alrededor y siendo ella la única mujer.

—¿Porqué lo dices? — inquiero, no sé que pretenda esta chica pero lo que tengo claro es que me debo de alejar ahora mismo de ella. No quiero problemas con el coach y mucho menos con Noah.

Tengo muy claro la atracción que mi amigo siente hacia ella, muchas veces me ha llegado a contar lo mucho que ha hecho para secarse a ella. Pero en cierta parte quiero ayudar, si él realmente quiere algo con ella ¿porqué yo no lo puedo a ayudar? Talvez algo pueda hacer al respecto.

—Tú sabes, ese físico que tienes es una clave muy fundamental para atraer a las chicas— opina sin quitar la sonrisa de su rostro, la miro raro. Esta chica definitivamente no sabe de lo que está hablando.

—Entonces, eso quiere decir que tú solo te fijas en lo físico y no en los sentimientos— comienzo a seguirle el juego, talvez así pueda sacarle información de ayuda para Noah.

—No necesariamente, si saben como tratar a una dama, no hace falta un buen físico— me responde, bueno quizás esa es un buen punto para Noah pero creo que hay que trabajar en ello.

—Que interesante— opino mientras la miro con picardía, ojalá no me meta en problemas. Pero lo haré por Noah, intentaré ligar con Kate así tendré información extra.

Lo que hace uno por los amigos ¿no?