La Hija Del Presidente [editando]

Capítulo 33: ¿Ashton?

AMBER CLAYTON

¿Cómo pasar el tiempo libre? No hay nada mejor que Netflix, palomitas de maíz y una hermosa cama. Ethan hace unos minutos se fue, mi abuela no tardó en subir a la recámara y preguntar quién era ese chico. Debo decir que no estaba muy feliz ya que estaba en mi recámara sola con Ethan.

Miro mi laptop con impaciencia, no entiendo cómo se me fue a olvidar mi contraseña de Netflix ¿ahora qué coños hago? Era mi única herramienta para pasar la tarde entretenida. Mi celular comienza a sonar como loco en la mesita de noche, ruedo los ojos y lo agarro. Sin mirar quién llama, contesto la llamada.

—¿Hola? — contesto mientras apago la laptop, pasan unos segundos y nadie dice nada en la otra línea— Me habla y le corto la llamada— digo con fastidio, espero que no sea Ethan porque no estoy para sus bromas telefónicas.

—Amber— se oye mi nombre al otro lado de la línea, mi cuerpo se tensa de inmediato. Esa voz, yo la conozco, oh claro que la conozco pero ¿porqué se oye diferente?

—¿Ashton? — inquiero— ¿Qué tienes, porqué te oyes diferente? — pregunto curiosa, y aquí viene otra vez mi curiosidad.

—Quizás sea porque estoy borracho— dice para después soltar una risita, bueno eso lo dice todo.

—¿Dónde estás? — pregunto, él deja espacar otra risita.

—A fuera de la casa de tu abuela— me responde, mis ojos se abren como platos ¿A fuera? ¿Qué diablos hace aquí? Rápidamente me acerco a la puerta corrediza que dá al balcón y salgo, miro hacia abajo. Ashton se encuentra en el césped, sentado, su mirada se posa en mí y me saluda con una de sus manos. Ruedo los ojos y cuelgo la llamada.

¿Cómo que está borracho y cómo coños hizo para conducir en ese estado de ebriedad? Definitivamente está loco. Rápidamente bajo al primer piso y con mucho cuidado de no hacer ruido salgo de la casa.

—¿Qué haces aquí? No debiste venir y menos en ese estado— lo regaño, él se levanta del césped a como puede.

—Yo solo... — comienza a hablar pero rápidamente se calla y tapa su boca con una mano. —Creo que voy a vomitar— murmura, hago una mueca de asco. ¿Ahora qué coños hago con él? ¿Porqué solo a mí me pasa estas cosas?

—Ni se te ocurra, Green— lo amenazo, él se ríe. —¿Dónde queda el hotel donde te estás hospedando? — pregunto, nesecito llevarlo a un lugar seguro. No puede estar aquí en ese condición y menos si mi abuela se encuentra ahí adentro.

—¿Para qué quieres saber? ¿Me quieres violar? Aunque para mi sería un honor, que lo hicieras tú— dice mientras sonríe de medio lado, mis mejillas se comienzan a calentar debido a su comentario. Oh vamos, tengo que llevarlo a algún lugar antes de que siga diciendo cosas sin sentido.

—Dime de una jodida vez— gruño un poco estresada, él ríe de nuevo. ¿Porqué todas las personas cuando se emborrachan, solo reír es lo que hacen?

—Bién— dice mientras deja espacar un suspiro— Queda alrededor de un kilómetro de distancia— me dice, hago mente mientras intento pensar cual hotel se encuentra a un kilómetro de distancia. No pasa ni cinco segundos cuando mi celebro recuerda el hotel.