Yuuri Katsuki un omega, docente de la guardería y preescolar de Hasetsu acaba de terminar una relación tóxica con un extranjero. Destrozado por todo el tiempo qué pasó, su jefe y amiga Yuuko decide mandarlo a laborar a San Petersburgo donde después...
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Las luces que adornaban el árbol de navidad iluminaban la sala tenuemente, los adornos colgados por toda la casa le daban un aspecto bastante hogareño, nunca había visto su departamento tan acogedor y lleno de personas. La persona más especial para él se encontraba al otro lado de la habitación sonriendo como solo él lo sabía, todos tenían una copa de champagne en sus manos esperando a que dieran las 12 para desearse un buen año y darse el respectivo abrazo. Wonderful World de Sam Cooke sonaba de fondo, todo se veía como un sueño para él, la pequeña barriga de 4 meses de su pareja ya se notaba, los hijos de uno de sus amigos cercanos y su pequeño primogénito de tres años jugando por toda la casa con Makkachin.
Se quedó observando los pequeños aros dorados a juego que se encontraban en su dedo anular y el de su pareja, no sabía cómo ya habían pasado tantos años juntos, aún recordaba la primera vez que se conocieron, el primer beso que le robó, la primera cita, su primera vez juntos, su primera pelea estúpida, todas sus primeras veces como pareja eran asombrosas.
Faltaban 15 minutos para que dieran las doce, cuando vio que su pareja termino de platicar con su mejor amigo, se acercó sutilmente a él, abrazándolo por la espalda posando sus manos en el vientre del contrario, recargando su barbilla en su hombro después de susurrarle un te amo en la oreja y besar su mejilla
—ah me espantaste– dijo algo sorprendido
—¿cómo te sientes? ¿No tienes ascos o algo así?
—hace un rato si sentía un poco pero ya se me pasó
—oye, ¿por qué tienes una copa de champagne? que ejemplo le estás dando al cachorrito
—es solo para aparentar no te preocupes
—más le vale señor Nikiforov
—por supuesto que sí, por cierto, dónde está...
—tranquilo está con Yurio y con los gemelos Lee
— oh bien... Víctor, te amo, gracias por este grandioso año juntos.
— yo debería agradecerte bebé, por estos fantásticos años juntos por los dos hijos que me has dado y el que viene en camino, Yuuri eres lo mejor que me ha pasado sin ti esta casa seguiría vacía y fría.
—jajaja amor solo te he dado un hijo
— Tal vez solo me has dado un hijo que salió de ti, pero también me diste a Yurio
— creí que a él no lo contabas
— como no lo voy a contar!!
Después de algunas lágrimas derramadas y besos compartidos continuaron platicando otro rato, el conteo empezó y cuando todos llegaron al 1 gritaron "¡Feliz Año Nuevo!" Y comenzaron a abrazarse, Yurio se acercó a la pareja Nikiforov
—puedo hablar con ustedes— dijo mientras jalaba a su pareja del brazo
— ¿qué sucede gatito? — pregunto el japonés
— nosotros nos vamos a casar... y queríamos... quiero que estén en el puesto de los padres en mi boda y.... que me entregues como mi padre Viktor —dijo algo nervioso el rubio
— por supuesto que, si Yuri nada nos haría más felices que estar como tus padres en esa fecha, porque nosotros no seríamos como ellos, nosotros somos tus padres, te vemos como nuestro hijo. Ni si quiera había necesidad de preguntarnos tal cosa
— muchas gracias
Después de más lágrimas y abrazos continuó la fiesta y bebieron y cantaron celebrando el final de otro año juntos y el inicio de otro...
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