Yuuri Katsuki un omega, docente de la guardería y preescolar de Hasetsu acaba de terminar una relación tóxica con un extranjero. Destrozado por todo el tiempo qué pasó, su jefe y amiga Yuuko decide mandarlo a laborar a San Petersburgo donde después...
El segundo hijo del matrimonio Nikiforov, un omega tranquilo, muchos dirían que era el favorito de Mamá, pero incluso era el favorito de Yura.
Siempre había sido sobreprotegido, era inevitable, era el menor. Su llegada fue ansiosamente esperada cada mes, semana, día y hora. Era consentido por toda la familia, cada que podían le compraban algo, sobre todo su hermano mayor. El rubio simplemente no podía regresar a casa sin haber comprado algún dulce o algo para el menor. A pesar de ser el consentido, era bastante humilde, el ser más obediente y dulce que podrían haber deseado.
El joven de cabellos azabaches y ojos azules se encontraba en la explanada fuera de la escuela platicando con algunos de sus amigos mientras esperaba a que llegaran por él.
Volteaba constantemente a ambos lados de la calle para ver si el auto de su padre aparecía, cada tanto tiempo sacaba el celular para checar la hora o si le habían mandado algún mensaje. En uno de sus momentos de distracción, uno de los alfas más deseados de todo el instituto se le acercó para hablar con él.
Siempre le enseñaron a ser buen niño, siguió la conversación con y por educación y al ser mayor que él, debía mostrar respeto. Claramente el alfa buscaba otras intenciones, estaba un poco incómodo con los repentinos comentarios fuera de lugar de su superior pero no dijo nada, ya se quería ir, no veía la hora para que llegaran por él, su teléfono vibró y supo que era un mensaje, los ojos se le iluminaron al ver que era de su madre, hasta que abrió el mensaje
Amor no podré ir por ti, te amo. Yuuri
Se decepcionó un poco, lo más seguro era de que su padre tuvo trabajo y su mamá se olvidara de él y tuviera que regresar en el colectivo o caminando, de verdad que ya se quería ir. Ya ni siquiera prestaba atención a lo que decía su superior. Estaba a punto de interrumpirlo para poder irse al fin a su casa cuando escuchó como una moto estacionaba en frente del instituto, de ella bajo un alfa azabache y su cara se iluminó, no pudo evitar sonreír grande, escuchó como otro mensaje le acababa de llegar
No estes triste de que mamá no vaya por ti, sabes que es muy distraído. Mande a un esclavo, regresen seguros Yura ❤️
— ¿Estás listo para irnos?— preguntó el alfa
—Beka!!— gritó el omega para aventarse a sus brazos
–Masahiko ¿quien es este?– preguntó su superior interrumpiendo el abrazo del omega con el azabache que acababa de llegar, Otabek observó detenidamente al alfa menor para después ignorarlo completamente
— pequeño Masa, su casco— comentó de manera formal el alfa, entregándole un casco al menor para subir a la motocicleta
— ¿quien eres y por qué te llevas a Masahiro? — pregunto el alfa menor deteniendo el brazo del omega.
Con una mirada seria Otabek logró que aquel alfa soltara al omega. Dirigió una mirada de duda a Masa
— Otabek, él es Dimitri, un alfa dos años mayor que yo.
— Mucho gusto— contestó el mayor por educación — Vámonos, si no llegamos pronto, Viktor comenzará a marcarme hasta que explote mi teléfono.
— Jaja, estoy seguro que no solo eso, papá sería capaz de llamar un auto militar para comprobar si seguimos aquí
— Estoy seguro que no sería por mi. ¿Quieres pasar por un helado antes de llegar a casa?
— Sí! Helado!
El alfa solo vio como se alejaba la motocicleta con el omega
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
