*Continuación de la historia "La Chica de los Cuatro Elementos"
*No leer esta historia si no has leído la primera.
Dos años después de que cayera el laboratorio, los problemas comienzan acechar a Alba.
Los Cuatro Elementos están abandonando a...
Él nunca supo porqué sus padres decidieron dejarlo en un orfanato a la edad de 7 años. No entendió por qué, si sus padres siempre se habían mostrado amorosos con él, lo consentían todos los días, lo amaban ¿Entonces por qué lo abandonaron en un lugar así?
Recordaba que poco después de eso, llegó una pareja, vestida de azul marino, interesándose por el niño. La mujer se mostró feliz, contenta, el hombre un poco menos que ella.
Se lo llevaron.
El niño no estaba interesado en esa nueva familia, en realidad no le podía importar menos. Condujeron por horas, hicieron que él se durmiera.
Cuando él abrió los ojos, ya no estaba en el auto, si no recostado en una camilla, sus manos y piernas estaban atados a la misma camilla. Quiso zafarse pero cada que intentaba mover sus manos, se lastimaba las muñecas.
Alguien lo tomó de sus mejillas y le hizo beber un líquido plateado por la fuerza. Lo sintió escurrirse por las comisuras de su boca.
Cuando lo tragó, la garganta entera le ardió.
Recordaba mucho dolor antes de volver a cerrar los ojos para intentar olvidarlo.
Los volvió a abrir, se dio cuenta de que se encontraba en una celda. No dijo nada para exaltarse o llamar la atención.
Cuando giró al rostro, vio a una niña, menor de él tal vez. La vio aterrada, abrazaba sus piernas y escondía su rostro entre sus brazos, la escuchó llorar.
El niño se acercó a ella y tocó sus brazos, ella respingó asustada e inmediatamente levantó el rostro.
-¿Quién eres? -le había dicho, sus cabellos rubios curbieron parte de su rostro.
-¿Estás bien? -respondió, ignorando su pregunta.
- ...No -la niña se limpió las lágrimas -No se que hago aquí, no sé dónde están mis padres ¿Los has visto? -preguntó con tristeza.
-No, lo siento, yo tampoco sé que hago aquí -y se sentó por un lado de ella -No te haré daño.
La niña lo miró y se pegó a él, sintió frío en esa amplia celda.
-¿Cómo te llamas? -le había preguntado con su douce voz.
-Yo.. -él recordó cuando sus padres lo dejaron en ese orfanato, pensó en ellos y a partir de ese momento, los odió -Ya no tengo nombre -respondió con la mirada baja.
-¿No tienes? Todos tienen ¿Por qué tú no?
-Porque mis padres me odian -respondió de manera inmediata -Así que odiaré todo lo que me dieron, incluyendo ese nombre -respondió.
Aunque recordaba que su madre una vez le dijo "No digas que odias a alguien, odiar es una palabra fuerte, puede lastimar a las personas"
Pero su madre no estaba ahí para decírselo o escuchar a su hijo.
-Mhmm... entonces ¿Puedo darte uno? -preguntó.
Al parecer ella había olvidado que estaba llorando, porque hablaba con emoción, estaba feliz.
-¿Quieres darme un nombre? No soy un animal -se quejó y giró el rostro.
-Será difícl decirte "tú" u "oye" ¿Prefieres que te diga mocoso?
-No, tampoco.
-Entonces yo te diré Daniel -le dijo con una gran sonrisa en su rostro, notó que ella se le habían caído dos dientes de enfrente.
-¿Y cómo te llamas tú? -le preguntó, un poco molesto por la manera en que ella cambiaba de ánimo tan rápido.
-Bueno, yo me llamo Daniela -respondió.
-¿Y por eso me llamas Daniel? ¡Que nombre tan feo me diste! -exclamó.
-¡Oye! ¡Que mi nombre es bonito! -le respondió en defensa.
Él le enseñó la lengua y ella lo imitó.
Daniela ya no sintió tan sola después de hablar con él todos los días. A veces a ella se la llevaban un par de científicos y cuando regresaba, ella estaba llorando o inconsciente. Lo mismo con él, sólo que se aseguraba de regresar con los ojos abiertos, para que su amiga no se preocupara por él.
Daniel pasó los siguientes cuatro años encerrado.
Se dio cuenta de que el objetivo de esos científicos era convertirlo en un Alterado, de esa manera los llamó Daniela, los escuchó decir que ellos dos serían diferentes a todos los demás.
Ambos controlarían cualquier tipo de tierra, incluyendo el cemento y tierra infértiles.
Ese día, se llevaron a su amiga, quién se despidió de él con un abrazo y le dijo "Regresaré, espera por mi" Pero pasaron las horas y ella no volvía, lo cual hizo que Daniel se desesperara más y más a cada minuto. Preguntó a varios científicos por ella, pero ninguno le respondió nada.
Seguido escuchó a su amiga, gritar su nombre.
Ella estaba en problemas y él debía de estar ahí para protegerla. Se lo había prometido.
- karimodelarosa.
¡Feliz año! Para los que lo leen en los primeros días de Enero:v
Llevo una semana esperando para enseñarles esto:
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Hagan de cuenta que así exactamente es el cuarzo que lleva William, así igualito. Ese me lo regaló mi hermana en Navidad, lo compró en una tienda dónde vendían cosas como atrapa-sueños y cosas como esas ¡Es hermoso!
¡Dios bendito es justo lo que quería!
También que les deseo un feliz feliz año a todos, que este supere por mucho al 2017 (en cuento a que pasen cosas buenas) disfrútenlo con sus familia <3
