En Busca del Quinto Elemento Pt.2

Capítulo 33.

-William -le llamó Carter.

El castaño se giro en su dirección. Ese día Víctor vestía ropa casual y no podía verse más como un profesor en ese momento. Incluso traía consigo una carpeta beige.

-Profesor -se acercó a él y estrechó su mano -Es un gusto volver a verlo.

-Lo mismo digo, ah ¿Tomamos asiento? Hay algo que debes saber -dijo esta vez, con un tono más serio. William volvió su expresión una más profunda y aceptó.

Se encontraban en la cafetería del hospital, William esperando por noticias de Sara, ya que no había mostrado mejoras en esos días y los doctores tampoco le decían qué era lo que tenía.

-¿Y bien? ¿Qué es eso que debía decirme? -le preguntó, tenía miedo de lo que fuera a decir el hombre pero debía ser un miedo menor, las cosas estaban mejorando en esos días.

-Es sobre Sara -respondió, pasó saliva en seco.

-... Dígame.

-Verás... ¿Recuerdas cuando Alba comenzó a sentirse mal? Fuiste hacia mí por eso-empezó despacio, el joven asintió -Bueno, ten eso en mente, por favor.

Sacó las carpetas y las abrió. Dentro se encontraban varios archivos con información personal de la castaña, todos con diferentes fechas. Carter tomó una y se lo mostró.

-Este de aquí muestra que Sara había despertado antes... de que Alba comenzara con los problemas.

William levantó la vista de la hoja, confundido. Por el color del papel y su olor a viejo podía decir que no lo habían falsificado, que era verdadero.

-Y este otro -tomó uno diferente, con una fecha antigua -Muestra otra ocasión en que ella estaba despierta, poco después del incidente de Angelina.

-¿Profesor? ¿Qué significa todo esto?

Víctor tuvo cuidado al responder su pregunta, pues no quería que el joven le pasara algo al recibir tal información. Él mismo entró en shook durante unos minutos al intentar procesar todo.

-Al parecer Sara estuvo despierta todo este tiempo.

-No, no, expliqueme bien por favor.

-Ah... No ha pasado nada que no supieras ya -le respondió -Es algo que sabías... No puede haber dos portadores de los cuatro elementos al mismo tiempo y eso ha sido lo que hizo que Alba empeorara.

Era verdad. Había hablado de eso con la misma Sara hace un tiempo, incluso estuvo presente cuando se mostraron los primeros temblores.

Pero Alba había mostrado molestias hasta hace poco, ¿cómo es posible? Claro... Si revisaba las fechas se daría cuenta de ue coincidían con el tiempo en que Sara despertó.

Y recordó lo que ella le había dicho, que se había esforzado en mandarle esa representación suya para ayudarle. Tomó su cabeza con una mano temblorosa. Era demasiado para procesar.

-¿William? ¿Estás bien?

-Ella... Estuvo viva, todo este tiempo y yo... -las lágrimas comenzaron a salir, desesperadas -Yo... Yo no me di cuenta. Maldita sea, era tan obvio ¡Todo!

-William, espera, tranquilizate -el hombre utilizó un tono de voz bajo y claro, para evitar que él entrara en pánico.

-Escucha por favor, no me has dejado terminar.

-¿Hay más? -preguntó con incredulidad, el miedo se notaba en sus ojos.

-Es difícil pero debes comprender todo o no podrás seguir... La has encontrado ahora, es lo que importa.