Se hallaba en Tokio. En un bar gay en Tokio.
¿Por qué estaba él ahí? Ah claro, porque su tonto y vanidoso amigo de infancia lo había arrastrado porque al parecer ahora era gay y quería tener una aventura con alguien de una noche, algo así como aparece en las películas de occidente. Imbécil.
Y más imbécil era él por haberlo acompañado, pensado en sí mismo casi como una especie de guardaespaldas para su amigo castaño, y el muy imbécil lo había abandonado cuando el primer sujeto agradable y guapo le había invitado a bailar y luego a un lugar más cómodo. Lo que significaba que Oikawa tendría sexo esa noche y él no. Perfecto.
Gruñó para sí mismo y se bebió el contenido del vaso de un solo sorbo, para luego hacerle señas al barman y que le diera otro igual.
—¿Por qué el ceño fruncido? —una voz suave, aterciopelada y medida se escuchó a su lado derecho y miró a quién la había emitido. Un chico unos cuantos centímetros más alto que él, con la piel blanca como la leche, los párpados caídos y un cabello hermosamente negro quien además le sonreía.
Iwaizumi bufó ante la pregunta y aceptó el vaso ofrecido por el trabajador del lugar para seguir bebiendo e ignoró al otro chico que se acaba de sentar a su lado y pedía un coctel. Al parecer el bufido no había dado frutos y tampoco lo había desanimado, Iwaizumi levantó un hombro como si no le diera importancia finalmente a eso y siguió en lo suyo.
—No pareces ser alguien que venga a este tipo de lugares muy a menudo, ¿acaso es tu primera vez? —volvió a sonar la voz que al parecer se estaba convirtiendo en algo molesto.
—¿Y qué si lo fuera? —sin saber porqué se encontró respondiéndole.
—Que sería algo muy interesante. —Otro bufido por parte del más bajo y una sonrisa apareció en el gesto de Akaashi. —Y por lo que veo, también eres heterosexual.
Luego de escuchar eso, se sintió algo curioso, ¿acaso ellos tenían una especie de radar o algo así? Antes de eso, de ese día, Hajime nunca se había planteado sobre su sexualidad, simplemente se consideraba como alguien heterosexual, le gustaban las mujeres, había tenido relaciones con mujeres y listo. Nada para replantearse su vida.
—Así que acerté —volvió a hablar el chico de ojos grises, que por cierto eran muy bonitos. —¿Viniste por curiosidad, morbo o acompañando a alguien? —No había malicia en su tono de voz, sino que solo simpatía y curiosidad.
—El idiota de mi amigo de infancia me arrastró acá y me dejó para irse con otro sujeto —pudo por fin quejarse Iwaizumi.
—Ya veo, déjame adivinar, él hace poco que descubrió su sexualidad, y tu estabas preocupado por él, ¿no?
—¿Acaso has estado observándome o te mandó el idiota de Oikawa? —le contestó con el ceño fruncido.
—Nada de eso —Akaashi se rio un poco y bebió del vaso frente a él—. No conozco a ningún Oikawa y acabo de llegar.
—Entonces, ¿por qué sabes eso? —Esas excusas no se las creía.
—Oh, porque es muy común ver esas cosas por aquí —Keiji se giró un poco para quedar casi frente a él—. Cuando un hombre descubre que es gay, empieza a frecuentar este tipo de lugares, busca a alguien de confianza para que le acompañe y le de valor. No sabe que existe una alta posibilidad de irse acompañado; los que ya sabemos cómo funciona todo esto, sabemos que es mejor venir solo.
El moreno pensó que aquella era una buena corriente de pensamientos y que su argumento le convencía hasta cierto punto. Claro, todos los veteranos iban ahí solos y no se tenían que preocupar de despedirse de sus amigos en caso de que fueran a un lugar privado con otra persona.
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One Shots y Drabbles de Haikyuu
FanfictionCompilación de One Shots y Drabbles de Haikyuu como regalo de cumpleaños para ciertas personas... será con amor ❤ Las parejas se mencionaran al inicio de cada capítulo. Algunas historias pueden contenido R+18 o la muerte de algún personaje Los...