16. Orpheus

69 11 4
                                    

—¿Secuestrada? —Violet le miraba con verdadero asombro —.  Eso sí que no me lo esperaba. Leonard me dijo que estaba muerta. Incluso estuvo en su entierro...
—Sí, todos lo creímos. Gracias a Dios no fue así. Aún tengo una oportunidad de rescatarla con vida, pero deben dejarme hacerlo a mi modo, sin interferencias. Ellos no deben saber en ningún momento que se lo he dicho...
—Puedo ayudarle, Frank. Leonard estuvo haciendo algunas averiguaciones. Se trata de un grupo de mercenarios muy bien entrenados. Se hacen llamar "Orpheus"
—¿Orpheus? Sí, creo haber oído hablar de ellos. Pero hace cinco años no eran más que un grupo de científicos, no
—Pues alguien se ha encargado de invertir en ellos muchísimo dinero para convertirlos en terroristas. Hoy por hoy son un quebradero de cabeza para nosotros. Actúan principalmente en Europa y en Estados Unidos, pero también han realizado algún trabajo en Asia y en Oriente Medio. Al principio surgieron como una empresa dedicada a realizar investigaciones sobre el ADN, incluso estaban financiados por el propio gobierno; pero a raíz de un extraño accidente en el que murieron varios miembros de la organización y la investigación que se llevó a cabo posteriormente, se descubrió una trama de corrupción y asesinatos en los que había implicados altos cargos de esta organización. Experimentaban incluso con niños a los que previamente secuestraban, unos experimentos muy dudosos en cuanto a legalidad. Fue un escándalo sin precedentes, pero no todos los culpables fueron detenidos. Tiempo después surgió un grupo terrorista que usaba ese mismo nombre: Orpheus. Su líder había sido uno de los miembros de esta organización. Se hace llamar...
—Dexter —dijo Frank.
—Sí, ese es su nombre. Lo que no entiendo es qué pueden sacar con el secuestro de su hija...¿Es algún tipo de venganza contra usted?
Si había llegado tan lejos, tampoco importaba que les contase toda la verdad. De todas formas acabarían  averiguándolo.
—Quieren obligarme a realizar un trabajo para ellos.
—¿Un trabajo? —Preguntó Violet —¿Qué tipo de trabajo?
—Uno a la altura de un asesor como yo.
—¿Un asesinato?
—Cuatro —contestó Frank.
—¡Cuatro! —Exclamó Violet.
—Dos periodistas, el director de una cadena de televisión y un senador. Tengo un plazo de tres semanas para terminar mi trabajo, sino ellos matarán a mi hija. ¿Todavía cree usted que puede ayudarme, señorita Norton? Porque si es así, me gustaría saber cómo.
—Esto cambia completamente las cosas —dijo la joven —. Tengo que avisar a Leonard. Él sabrá que hacer.
—Debería hacerlo.
Violet sacó un móvil del bolso que tenía junto a ella sobre la mesa y marcó con rapidez un número. Esperó durante unos segundos y dijo en voz baja una palabra: Fearwoods. Sin duda algún tipo de contraseña, pensó Frank. Después ella escuchó atentamente para de inmediato contar toda la información que él le había relatado. A continuación volvió a esperar en silencio y luego le pasó el teléfono a Frank.
—Quiere hablar con usted.
Frank tomó el teléfono y se lo llevó al oído. Era Leonard quien estaba al otro lado de la línea.
—¿Frank?...¿Es eso cierto?
—Sí, Leo. Tienes que dejar que me encargue yo de esto.
—¡Ni hablar, Frank! —Gritó Leonard por el auricular —. No puedo dejar que asesines a cuatro personas inocentes...
—Nadie va a morir. Tengo un plan —Frank trataba de calmar los ánimos de su amigo.
—¿Un plan? ¡Al diablo tú y tus planes! He recibido ordenes de personas muy poderosas. Frank, no te inmiscuyas en esto. Esa persona de la que te hablé no quiere dar publicidad a este asunto. Tienes que dejarnos a nosotros...¡Por el amor de Dios, Frank. Tu estás retirado!
—No puedo hacerlo, amigo mio. Está en juego la vida de mi hija. Esa persona de la que me hablaste, ¿es Boorman, el congresista?
—No puedo decirte nada más. Quítate del medio. Nosotros rescataremos a tu hija, Frank. Si interfieres irán a por ti.
—La organización de Dexter, Orpheus, recibe dinero de alguien importante, ¿no?
—¿Estas insinuando que Boorman...?
—Y le interesa tapar este asunto. ¿Quién más podría ser?
—Te aviso por última vez. Deja tus cabezonerías, no traen nada bueno. Acabarán matándote, Frank.
—No voy a ser yo quién muera. Gracias por la información Leo. Era la pieza que me faltaba para terminar el puzzle. Me has sido de mucha ayuda.
—¡Maldito hijo de perra! —Oyó que gritaba, pero Frank ya había colgado. Le devolvió el teléfono a la joven y la miró pensativo.
Leonard tenía razón en una cosa. Él ya no era nadie y si interfería en los planes de un político corrupto, acabaría recibiendo un balazo. Aquella gente no solía bromear, eso lo sabía muy bien. Pero él no podía hacer otra cosa. Estaba atado de pies y manos. Si no cumplía las exigencias de los terroristas, estos matarían a su hija. Hasta que Kelsey no estuviera a salvo, él tendría que seguir adelante con el plan.
—¿Qué piensa hacer, Frank? —Preguntó Violet.
—De momento tomar un café, luego subiré a mi habitación a acostarme. Mañana... mañana necesitaré su ayuda.


Orpheus, es una malvada organización que aparece en otra de mis novelas: Kryptos. Los ocultos. Allí encontrareis más información sobre ella. 

 

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Sombras del pasado (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora