Tú
Esa tarde volví al basurero. Tenía algo de dinero así que compré un poco de comida y agua. No era la suficiente para saciar el hambre de todos, pero al menos unos cuantos niños y un par de cachorros se habían llevado algo al estómago. Más tarde volví. No lo hice porque disfrutará de vivir en ese lugar, sino porque me alimentaban y me daban un lugar seguro en donde dormir, sin mencionar que la anciana me pagaba un poco y podía comprar comida para los chicos del barrio. Cuando la noche amenazaba con caer volví corriendo a la casa Rayment. Si estar aquí era peligroso para mí, de noche era mucho peor.
Cuando llegué la única persona despierta era la señora Rayment, quien me dijo, esperaba a Shawn. Yo sólo subí a la habitación y me recosté en la cama esperando a que otro día iniciara.
Shawn
Fui hasta la casa de Mindy y ella jamás apareció. Seguramente estaría observándome desde su habitación, obligando a su hermano pequeño a que me mintiera diciendo que ella no estaba en casa.
Sin nada mejor que hacer llamé a Cameron y terminamos en un bar cerca de la zona sur. Cuando los trago lograron reanimarme le conté de la aburrida fiesta de mi abuela, y este más ebrio que antes aceptó asistir.
Cuando el uber me llevó a casa, mi abuela estaba lista para reñirme. Yo estaba lo suficientemente sobrio como para escuchar todo lo que decía, pero también para ignorarlo.
Tú
Desperté temprano para continuar con los deberes del jardín, pasé el día entero ahí, Jane se acercaba a mí con agua fresca de vez en cuando, además comió conmigo afuera. Era una mujer divertida y llena de vida. Es dura, pero sin duda una buena persona.
Antes de dormir me di un baño y caí dormida antes de que me diera cuenta. Esperaba que dormir en una cama no se hiciera una costumbre para mí, pronto regresaría al contenedor que no era tan cómodo como este lugar.
Shawn
No había podido hablar con Mindy desde los pastelillos, seguramente ella no quería verme hasta que hiciera lo de la nota, llamarla, y tal vez lo haría, pero llamarla significaría tener que invitarla a la fiesta de mañana y yo no estoy seguro de si quiero pasar esa aburrida noche con una chica igual de aburrida. Aunque no quiera admitirlo, ir con _______ sería mucho más divertido que con la chica que trató de envenenarme con amor.
Tú
Mientras desayunaba, tarde como de costumbre, la señora Rayment apareció acompañada por una chica, era joven pero claramente mayor que yo. Creí que la anciana estaría trabajando a esta hora, pero estaba de pie mirando como me llevaba el cereal a la boca.
-_______, te presento a Madison Beer, Madison, ella es _______.
La chica se acercó a mí sonriendo y me ofreció su mano.
-...¿Quieres mi cereal?
-No. Lo siento. -Continuó sonriendo.
-Irás de compras con, Madison.-Me dijo la señora Rayment.
-¿De compras?
-Madison te ayudará a encontrar algo lindo para la fiesta.
-Pero yo no...
-Te pagaré por asistir.
-...no veo ningún problema en hacerlo.
-Bien. Las veré más tarde, entonces. Suerte chicas.
La señora Rayment dio media vuelta y nos dejó a la chica y a mí en a cocina. Ella permaneció de pie observando como terminaba mi cereal.
-Será divertido.-Dijo después de dos largos minutos en los que sólo el crujir del cereal se escuchaba.
-No lo creo.
-¿A alguna ves has ido de compras?
-He ido al supermercado.
Rió, pero no de una manera descarada.-Entonces descubriremos si esto es lo tuyo.
Shawn
Estaba decido, no invitaría a Mindy. Tenía como excusa el que me abuela la odiara. Por primera vez, agradecía el mal temperamento de mi abuela.
Había venido a Nueva York con todo excepto un traje de gala. No tenía idea de que terminaría asistiendo a una de las monótonas fiestas de mi abuela. Tal vez la tenía, pero estaba seguro de que si eso pasaba, fingiría estar enfermo. Pero, no lo sé, creo que esta vez realmente quiero estar ahí.
Llamé a Aaron para preguntarle si tenía algún traje que pudiera usar y aproveché para invitarlo. "Además del que usaré, no, no lo creo, hermano." Fue así como me encontré en la aburrida tarea de comprar uno. Si seguía así, me terminaría mi dinero en estupideces.
Tú
La chica...Madison tenía un auto. No quería ir con ella, pero la señora Rayment parecía conocerla, así que lo hice. De cualquier forma no era la primera vez que subía al auto de un extraño.
-¿Has visitado el centro comercial?
-Sólo estuve ahí un rato.
-Bien. ¿Alguna idea de lo quieres usar mañana?
-No.
-No te preocupes. Conmigo como ayudante, estoy segura de que serás la chica más linda de la fiesta.
-...¿Trabajas para la señora Rayment?
-Soy estudiante. Estoy haciendo mi servicio con ella.
-¿Te habló de mí?
-Lo hizo.
-Entonces supongo que te dijo que yo vivo en la calle y es por eso que me tratas como una idiota.
-Ah...
-Es broma, Madison.
-...
Shawn
Jane me dijo que ,_______ también había salido de compras, que mejor dicho, la habían obligado a hacerlo. No la conocía muy bien, pero podía segurar que ir de compras no sería algo que disfrutara.
Buscando que mi tiempo con lo de los trajes fuera reducido al mínimo, entré a una tienda, tomé tres de los trajes que me parecieran más normales y me los probé, elegí el que mejor se amoldara conmigo para evitar tener que pasar por el largo proceso de arreglarlo a mi medida y veinticinco minutos después ya conducía devuelta a casa.
Tú
Madison y yo entramos a una tienda de ropa, había solo chicas y todas veían uno a uno los trozos de tela que valían más de lo que deberían.
-La señora Rayment me dio indicaciones de que deberías pero será mejor que la ignoremos.
Eso sí que me agradó escuchar.
-Te despedirán.-Dije bromeando.
-Sería una crimen si te dejará usar lo que ella quería.
-Debieron ser malas indicaciones.
-La anciana no tiene estilo.
Luego de decir eso, me miró asustada y cubrió su boca con ambas manos.
-Tampoco me agrada.-Le dije.
-¿De verdad?
-Me paga, es la única razón por la que estoy en su casa.
-Yo necesito los créditos del servicio. De lo contrario no trabajaría para esa bruja.
-Hace dos minutos creí que estabas loca, pero creo que comienzas a agradarme.
-Tú igual a mí.
