Atrapada en mi mundo

❀Principes y Princesas, Guerreros e Idiotas❀

¿Sera realmente que estoy loca? Desde que tengo memoria todos me tratan mal... Excepto ellos.

Suelo pasear por las calles acompañada de un hombre de blanco y buen porte, él es muy amable conmigo, aunque creo que Judit me odia un poquito, Gerald es un modista fenomenal y le encantan las cosas coloridas, también esta el ratón Aeol, me da un poco de miedo. Sé que cuando me distraigo los visito, pero jamás recuerdo mucho de lo que ocurre. Boris es mi favorito en aquel hermoso mundo de colores y criaturas extrañas, el me cuida, me lleva a visitar y me trata como una princesa, es genial estar a su lado.

Cuando conocí a Rumina; mi mejor amiga, supe al instante que ella era una princesa, pero que su corazón traía una gran carga. Su cabello rubio, sus ojos verdes brillantes, su linda sonrisa y sus facciones delicadas, una mujer que merece toda la palabra de femenino en ella, pero no solo era agraciada también era gentil, una bondad que quien sabe de dónde nace, cuando yo no llevaba comida, ella siempre me daba la mitad de su almuerzo, también solía darle de comer a los indigentes o a los perros callejeros, siempre era una mano ayuda a todo aquel que lo necesitaba, aunque ella tuviera problemas en su reino.

Terry es otro camino por dónde ir, mi mejor amigo y... Según nuestro juego; mi príncipe. Rubio al igual que Rumina solo que de cabello rizado, ojos miel y piel no tan blanca y por lo que yo puedo decir, alguien que no extiende su mano sino te has ganado su confianza, alguien que da todo por lo que quiere, que siempre lucha hasta el final y que también, siempre te brinda una bonita sonrisa. Cuando lo vi por primera vez pude admirar a un príncipe de oro.

Mi hermano siempre fue un caballero al protegerme. Perteneciente al número blanco, al horóscopo de la bondad, tanta crueldad se apodero de aquel muñeco y simplemente los demonios lo escondieron dejándolo caer en la pesada fase negra, así que sí, ahora era un caballero negro, no liderado y sin rumbo, no se rige tras nada, pero su valentía se conecta de vez en cuando.

Y por último, nuestra protagonista. La chica que se supone debía tener un reino, pero fue tomada por una bastarda que no es digna de ser reconocida. Se levantó y decidió ser una guerrera, defender y quemar reinos, arrasar con todo a su paso y aunque no suele darse cuenta... En realidad lo hace. Aquellas bestias que la quiebran a diario son los demonios que por derecho debería matar y claro que lo haría, pero eso sólo sería la condena a la perdida de cordura total, eso solo sería sucumbir ante los demonios siendo arrastrada lentamente hacia el infierno, bueno, eso es en lo que creen los humanos, en un Dios y un profeta que resulta ser alguien realmente cuestionable.

"El hueco en mi corazón sólo debería llenarlo de agua y adornarlo con unas bellas flores marchitas, para poder al menos, representar el como me siento."
Quiero gritar, quiero correr, quiero huir de mi misma, pero es solamente algo imposible.
Mi mente me juega muy mal todo el rato, y yo sólo espero que a aquella loca que tiene amarrada la mate y la entierre para siempre, porque sé que me odiaría si me consume.
No quiero siquiera entrar a la ducha porque sé que me romperé, que intentare liberar un poco el sufrimiento y me quebrare otro poquito.
Mi habitación cada vez es más fría, es obscura y me cala los huesos al entrar en aquella cama que debería ser reconfortante, pero sólo es como acostarse sobre un trozo de metal, el frío me azota, ya estoy harta de que sea lo único que siento. Las personas son frías conmigo, siempre me dedican una mirada fría. Yo siempre estoy fría cual muerto y al entrar a la ducha abro el agua hirviendo en un intento desesperado de buscar un poco de calor, pero esta se enfría rápidamente haciéndome entrar de nuevo en la realidad de que yo no merezco el calor. Cuando rara vez siento los brazos de Sasha alrededor de mi estúpido y pequeño cuerpo me remuevo incomoda al no saber como reaccionar ante aquel tacto tan... Lindo, me duele que aquella persona que me brindaba algo de calor se haya marchado, quedándome sola de nuevo en el dolor y ahogándome en mi sufrimiento.
Intento ser fuerte, intento fingir que nada duele, que estoy bien, que siempre seré y podre más contra cada tormenta que se me venga encima, pero la verdad es que me tortura por dentro, quiero llorar sola, abrazándome a mí misma en un falso intento de auto consolarme, es demasiado triste, pero es verdad.
Sólo sé que quiero dejar de sentirme hueca, quiero dejar de ahogarme en un vaso de agua, quiero salir a flote y sonreír sin más pesares.

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 Este capítulo... Sí que me gusto💜 

¿Y a ustedes?