(Luna)
Hay días en los que es mejor no levantarse, si ayer no hubiera ido no habría terminado besándome con Matteo.
Dibujé una mueca de desagrado al recordar eso, como si hubiese chupado un limón.
Apenas fue un roce de labios (si llegó a eso) pero me hizo sentir extraña. Me pasó lo mismo cuando me abrazó en mitad de la calle (por culpa de Nina) y en la biblioteca.
Todo mi cuerpo expiraba odio y rabia por estar junto a él, pero en un lado recóndito de éste, podía notar una sensación extraña, agradable.
En esos casos, aquel sentimiento se fue al instante sin embargo, esta vez lo noto ahí, como si fuese una espina clavada. Una espina indolora.
No duele, pero es molesto, no puedo quitármelo.
Resté importancia al hecho agitando la cabeza y me centré en un problema mayor. Estaba sentada frente a la mesa y en ella estaba el cheque de Matteo.
Parece mentira que de un simple papel pueda venir tanto dinero. Me pagó el doble por ir a la cena así que me ayudará a librarme de muchas deudas. No de todas, pero me basta.
Ya me han llegado las nuevas facturas, como siga sin pagar me acabarán embargando. Aunque le pedí a Tamara que no hiciese nada, ha movido los hilos para darme tiempo hasta que encuentre un trabajo, tiene muchos contactos.
El problema radicaba en el propio cheque, ¿Cómo se cobra esto? ¿Voy al banco directamente y me dan el dinero en mano?
Lo cogí delicadamente y lo guardé en el bolso, espero que nadie quiera robármelo porque entonces se quedará sin cabeza.
(Matteo)
-¡Matteo! ¿¡Quieres despertarte de una vez!?
-Nina déjame dormir.-me tapé la cabeza con la almohada para ver si así no escuchaba sus gritos.
-¡Levántate de una vez!
-Ñeee... No quiero, tengo sueño y ya cállate.
-Matteo ya es la hora de comer, ¿¡Cuánto tiempo piensas seguir durmiendo!?
-¡Déjame en paz! ¡Cállate!
-¿Aun no se levantado?-gritó mi madre desde la cocina para que la escuchásemos bien.
Eso es lo que más me molesta, mamá siempre grita cuando está en la otra punta pero cuando lo haces tú tienes que ir hasta ella ya que no te oye.
En esta casa nos pasamos el día gritando.
-¡No tía Samantha! ¿Qué hago? ¿Le golpeo con un mazo?
-¡Creo que tengo una idea!
-¡Mamá! ¡No te va a funcionar nada de lo que hagas!
La casa se mantuvo en silencio (algo imposible de creer) hasta que mi madre llegó con el teléfono.
-Ya estoy aquí. ¿Preparada?
-¿Quién es?-preguntó mi prima.
-Es para Matteo.-mamá sonrió y no me gustó nada.- Ponte, es importante.
Aun tumbado deslicé la mano a ciegas hasta agarrar el objeto que mi madre tendía y respondí perezosamente.
-¿Si?
-¡LEVÁNTATE DE UNA VEZ VAGO ASQUEROSO!
El grito de Luna consiguió espantar las aves que pasaban cerca de la ventana, creo que las ardillas del árbol también escaparon.
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"Amor Fingido" (Lutteo)
Fanfiction- "¿Fingir? Hace mucho tiempo deje de fingir mis sentimientos. Hace mucho tiempo me di cuenta que me enamore de ti". Él una persona que sale con chicas sin querer comprometerse sentimentalmente...