Sweet Creature (Camren G!P) [EDITANDO]

Capítulo 31

¡Esa es mi chica!, escuché mi propia voz por enésima vez al entrar en la habitación con Lizzie entre mis brazos quien jugaba distraída con un oso de peluche.

-¿Otra vez mirando el video?.- Camila levantó la mirada de su teléfono y frunció el ceño.

-¡No puedo creer que me lo perdí!.- Se quejó poniéndose en pie junto a la cama y poniendo sus manos en forma de jarras.

-Lo siento cariño, fue algo inesperado.- Dije antes de poner a la bebé de pie en el piso- Pero ella lo hará otra vez para mami ¿Verdad?

Camila me miró emocionada y se acercó un par de pasos en nuestra dirección poniéndose de rodillas sobre la moqueta. Mi hija levantó su mirada hacia mí y yo asentí antes de soltar cuidadosamente sus manos viendo cómo ella mantenía su equilibrio. Sus pasos fueron apresurados y soltó un chillido en cuanto se abalanzó hasta los brazos de Camila quien no dudó en llenarla de besos.

-Pronto estará yendo a la escuela y montando en bicicleta.

Mi novia me miró haciendo un puchero y yo reí ante sus ocurrencias.

-Creo que falta algo de tiempo para eso nena.

-¿Qué tal un baño antes de dormir?.- Preguntó Camz mirando a la niña entre sus brazos.

Lizzie movía sus pies y brazos salpicando agua desde la bañara hacia todos lados en el cuarto de baño. Camila tomó un poco de champú y con cuidado lo esparció por el castaño cabello de la bebé con unos cuantos rizos, tomé la ducha y después de asegurarme de que el agua estuviese tibia enjuague su cabello viendo como ella disfrutaba de las gotas resbalando por su rostro llevando ambas manos a éste. Un chillido escapó de sus labios cuando notó aquel pato de hule que mi novia tenía entre sus manos.

-En serio ama ese pato.- Reí observándola jugar con el objeto amarillo.

-Ella ama todo lo que produzca irritantes ruidos que nosotras odiamos.- La morena soltó un par de carcajadas llamando la atención de Lizzie quien le sonrió.

-Es momento de salir cariño.

Seguido de mis palabras un llanto se desató en cuanto Camila la sacó de la bañera. Esa era la parte que ella odiaba.

...

Los días pasaban y nuestra rutina regresaba a la normalidad, Camila con sus prácticas en el hospital, yo afinando los últimos detalles de mi álbum y Lizzie mejorando sus habilidades para caminar desplazándose con libertad por todo el apartamento. Su curiosidad había aumentado después de haber perdido toda dificultad para movilizarse y tomaba todo lo que estuviese a su alcance para llevarlo directo a su boca.

-Hey, eso no es para ti.- Tomé a la bebé entre mis brazos alejándola del control remoto y abriéndome paso con ella hasta la cocina.

-Tiene que comer Lauren.- Recordó Camila en cuanto notó que la ojiverde alzaba a la pequeña en aire dejando sonoros besos contra su tripa provocándole la risa inmediata.

-Pero a ella le gusta reír con mamá, ¿Verdad?.- Repitió la acción una vez más y la morena la vio desde su posición alzando una ceja- Esta bien, ya entendimos.

Caminé hasta dejar a Lizzie en su sillita de comer justo frente a mi novia quien la esperaba con lo que parecía ser una especie de guiso de zanahoria. Luego de que yo le pusiese el babero a la pequeña ella estuvo lista para recibir su dosis de comida.

-Normani llamó esta mañana.- Comentó la castaña llevando otra cucharada a los labios de la bebé.

-¿Qué quería?.- Pregunté frunciendo el ceño.