Capítulo 22

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Tardaron cuatro horas en llegar al hospital más cercano, Jimin fue dejado atrás mientras veía como su amado ingresaba a emergencias, luego de minutos parado a mitad del pasillo se desplomó en el suelo llorando. Se negó a hacerse cualquier examen de chequeo mientras no recibiera noticias de Jungkook, luego tanto insistir un médico le confirmó que estaba estable, entonces Jimin se sometió al examen principal que abarcaba el estado de sus pulmones, el especialista le exigió reposo, pues su tráquea y sus pulmones estaban severamente dañados.

Espero durante doce horas exactas por nuevas noticias, preguntaba a cada doctor y cada enfermera que veía en el pasillo lo que estaba pasando con Jungkook pero nadie le daba respuestas, sus ojos estaban irritados y su cabeza latía de dolor pero no se permitió dormir y valió la pena cuando un doctor le avisó que por fin podía acceder a ver a Jungkook.

Se asomó nervioso a la puerta y con cuidado empujó primero encontrándose con un par de ojos negros que lo observaban alegremente.

-Hola bonito—Habló Jungkook, por su tono de voz era evidente el esfuerzo que estaba haciendo por aparentar normalidad mientras Jimin corría a su lado.

-H-Hola—Susurró Jimin tratando de limpiar las lágrimas que escapan de sus ojos y contener sus sollozos.

-Ven aquí amor.

Apenas abrió los brazos el pequeño se refugió con sumo cuidado de no lastimar su torso vendado, le habían explicado que las quemaduras no eran graves y la piel estaría en proceso de regeneración rápidamente lo que alivio tanto a Jeon como a Jimin, quien escondió su cabeza en el hueco entre el hombro y el cuello del azabache depositando pequeños besos.

-Tenía tanto miedo de no volver a verte—Dijo Jimin levantando el rostro para delinear el perfil de Jungkook con su nariz. Sentirlo parecía un sueño y no quería volver a separase de él nunca más.

-Luchaste como todo un hombre valiente, casi parecías varonil—Jungkook sonrió al escuchar la suave risa de Jimin, ver sus ojos brillar de alegría y no debido a las lágrimas era lo que se propuso lograr desde que se enamoró del pequeño—No vuelvas a sacrificar tu vida por mí.

-Lo haría mil veces más y no me regañes por ello...Tú también lo harías por mí—Afirmó Jimin antes de unir sus labios en un desesperado beso.

Jungkook tomó a Jimin por su nuca y lo sostuvo firme contra su boca mientras su lengua cepillaba en los gruesos belfos del pequeño en una caricia atrevida que ordenaba a sus labios recibirlo. Jimin jadeó de excitación tragando el oxígeno que le ofrecía Jungkook desde su boca, ambas lenguas se encontraron compartiendo fluidos húmedo y cálidos, Jungkook cerró su boca sobre el labio inferior de Jimin y succionó con avidez, tirando sensualmente para volver a unirse en un nuevo beso.

Un repentino ataque de tos por parte de Jimin hizo que rompieran el beso, Jungkook acarició su espalda y su pecho en un intento de aliviarlo, podía escuchar el pitido que emergía de la garganta cansada de Jimin.

Cuando se recuperó, el pequeño intentó juntar sus labios nuevamente pero Jungkook sostuvo su rostro y frenó el apasionado beso en una ligera caricia entre sus labios, un simple contacto pero no menos significativo.

-No cariño, estás mal, hablaré con el doctor. Cuando me recupere y nos vayamos de aquí en los próximas días de esta semana, verás al mejor doctor de Francia.

-Kook, la policía ha estado esperando para que te recuperes y estés capacitado para hablar. Dicen que quieren interrogarte, Mike te pudo haber culpado del asesinato.

-Para esta altura tendría que haber aparecido el abogado de mi familia—Habló Jungkook con una expresión de duda en el rostro, no estaba seguro de si sus padres estaban enterados o si les importaba.

Sinful (Kookmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora