Los cursos Online no sirven de nada

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Estoy a punto de golpearlo y quitármelo de encima cuando veo que un hombre se acerca a nuestra mesa.

Es mayor, quizás 50 o más, con una mirada demasiado familiar, con una nariz que reconozco enseguida, y una media sonrisa que odio por recordarme la de alguien más.

Se detiene frente a nuestra mesa, mesa y nos mira y estudia de la misma forma en que Nathan lo acaba de hacer

- Nathan – dice de pronto su padre – y me imagino que usted es la novia de mi hijo.

Intento disimular mi sorpresa lo mejor que puedo, miro a Nathan quien sonríe alegremente y después miro a su padre quien espera una respuesta

Maldito curso online que no sirve para nada.

Maldita mejor amiga por tenderme una trampa.

Maldita Nathan por aprovecharse de la situación.

Y maldita yo por no aprender a decir que no.

Si – digo completamente confusa - Soy Violet    

- Un gusto señorita. Mi nombre es Edward, un placer – dice con un muy marcado acento inglés.

- El placer es mío – digo estrechando su mano de forma torpe

Se sienta frente a nosotros mientras nos sonríe divertido

- Pareces incomoda Violet

- ¿Yo? – pienso algo que decir pero por suerte Nathan es mas rápido

- Esta nerviosa porque es la primera vez que le presento a mi padre

- Claro – aunque claramente no le cree ni una palabra.

Se sostienen la mirada por un largo, muy largo momento.

No sé que está pasando y si soy sincera no estoy segura de querer averiguarlo.

- ¿Listos para ordenar? – el mesero llega justo a tiempo

- ¿deberíamos esperar? – pregunta de pronto el padre de Nathan mirando hacia la puerta

- No, ellos no vendrán

La mirada dolida de Edward me sorprende. Unacosa de lo que estoy segura es que estos dos no se llevan nada bien    


500 dias diciendo: Te amo TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora