Cuando la amabilidad y la sensualidad no van de la mano

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- ¿Cuánto tiempo tengo que seguir pidiéndote perdón?

Es miércoles.

Han pasado unos días y yo aún no perdono a Anna.

- El que yo crea necesario – respondo mientras reviso los expedientes de mis pacientes

- Lo siento, olvide por completo el favor que él me había pedido

- Claro y me enviaste a mi con ese... ese...

- Vamos Violet, seguramente no fue tan malo

- Lo fue – respiro profundo – su padre fue amable pero él fue el mismo idiota de siempre

- ¿Por lo menos te llevo a casa?

- No iba a irme con el después de lo que me dijo

- Que dijo

No quiero decirlo. "quería una chica sexy y candente y obtuve a una chica común y corriente, un maldito ratón de biblioteca"

Miro un momento a Anna. Es alta, rubia con el cabello perfectamente arreglando en una coleta alta y está perfectamente maquillada.

De pronto miro mi reflejo en una de las puertas de cristal. Soy baja, mi largo cabello negro esta enrollado en un provisional chongo, unos lentes negros están sobre mi cara lavada y solo tengo un poco de brillo labial, además de eso las ojeras bajo mis ojos no ayudan demasiado.

No lo quiero admitir pero él tiene razón.

Soy común y corriente. Soy un maldito ratón de biblioteca

- ¿Al menos pago la cuenta?

- Dejo unos billetes sobre la mesa antes de irse – pienso un momento en eso – por alguna extraña razón eso me hizo sentirme usada

- Al menos tendrás un trato especial

- Por supuesto – digo mientras dejo caer todos los expedientes que tengo – más trabajo, el muy tonto me ha asignado más casos

- Es un...

Antes de que Anna pueda decir algo más el sonido de una ambulancia acercándose nos pone en alerta.

- !!Anna¡¡, ¡¡ Violet¡¡. Pónganse unos guantes que tenemos pacientes – grita de pronto Nathan mientras camina hacia la entrada de urgencias - Que esperan ¿una invitación?

Lo veo caminar por el pasillo con su uniforme quirúrgico.

- Alguien tan sexy debería ser más amable – dice Anna mientras me extiende un par de guantes que saca de su bata

- Pues no lo es – digo tomando los guantes


500 dias diciendo: Te amo TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora