Viviendo Con Los Balsano.

Oh... sorpresa.

"They call us Larry Stylinson"

Bajé de mi último avión agotada y sin señal alguna de mamá.

Me senté en una silla con toda la pereza del mundo a esperar y tomé mi celular.

Quité el modo avión y comenzaron a llegar mensajes y notificaciones de todos lados, incluidas las llamadas sin contestar de mamá desde hace como tres o cuatro días que fue cuando partí de Argentina.

Porque sí, hace cuatro días he estado viviendo en aviones y de todo eso aprendí que siempre debes elegir el puesto del pasillo, no creerán cuantas veces aguanté ir al baño en treinta y tantas horas

Llamé a mamá y le pedí que viniera por mí al aeropuerto porque para ser sincera siento que cruzaré una esquina y ni sabré cómo me llamo.

De la misma forma observé otros mensajes y hubo uno te resaltó entre los demás, con tan solo leer el remitente me sorprendí.

Matteo🐍.
Hey, donde te has metido?

aHORA SI LE IMPORTO, EH, justo cuando me encuentro al otro lado del mundo.

Según esto fue enviado a mí hace veintisiete horas atrás, así que puede esperar algunas horas más.

Un toque en el hombro hace que me exalte y guarde mi celular pero suelto un suspiro de alivio al ver a mamá.

La abrace fuertemente y tomé mis maletas para marcharnos de allí.

(...)

Abrió la puerta del apartamento en el que aparentemente se quedaba y lo primero que veo es a una Waybye muy feliz saltando sobre mí.

Juego con ella por algún rato mientras converso con mamá.

-... y así fue como Gastón tropezó rodó en un supermercado por la cantidad de ropa que llevaba -terminé de contarle y ella no paraba de reír.

Fui por algo de jugo a la cocina y sólo había de fresa y maracuya.

Maracuya... mamá es alérgica a la maracuya.

Da igual quizá estaba aquí cuando ella vino o lo compró por accidente, volví a la sala y ella observaba con atención su celular.

—Cuentame como te va con eso de las redes sociales, veo que Matteo y tú están cerca de los cien mil seguidores —habló con curiosidad.

—Pues no lo sé, es raro y grandioso a la vez, a las personas les encanta como algunas veces peleamos otras veces bromeamos y hasta en casos actuamos de forma cariñosa frente a las cámaras... nos llaman Lutteo -digo con una chispa de ilusión.

—Sabes que no me gusta saber que han discutido Luna, si en algún momento se sentaran a solas en una habitación, con algún dulce que les guste y aclararan todo lo que sienten sería mucho mejor ¿no lo crees? Quiero que cuando regresemos lo pienses —aconsejó mientras acariciaba a Waybye.

—Está bien... iré a tomar una siesta, te veo luego —entré a la que sería mi habitación y me recosté en la cama, miré a mi lado y reí, había una mino nevera, vaya que me conoce.

Miré una vez más el mensaje de Matteo y decidí responder.

Hola Matteo, creo que tu
pregunta fue algo... tonta ¿no?
luego de tratarme de aquella manera
vienes con falsas preocupaciones
preguntando a dónde me he ido.