Virgin.[HS]

"Esto es una catástrofe"

Creo que nada se ha sentido tan bien como esto en mucho tiempo.

Definitivamente no había olvidado la sensación de tenerla entre mis brazos, de sus labios enlazados a los míos, pero.. Bueno. Tenerlo todo de nuevo y con ese matiz de sexy desesperación era tan bueno.. Tan genial. Había echado demasiado de menos esto.

Pero estaba tan asustado de que ella decidiese que fue un error y patease mi culo fuera de la cama, y de la casa, que estaba estático mientras la bruma postcoital pasaba.

—Ni siquiera te atrevas a levantar el culo de la cama.— gruñó, justo cuando me incorporé en la cama, mareado y jadeante. Sentí mis hombros tensarse un poco, pero me obligué a coger valor y levantarme de la cama, apartando las sábanas revueltas. Ella gruñó por lo bajo, amenazante. — Harry..— su tono era una completa amenaza. Y a mí me ponía. Sin embargo, debía de coger mis cosas e irme, o al menos poner un poco de espacio entre nosotros aunque yo no quisiera más que lo contrario. Ella volvió a gruñir.— No me hagas repetirlo.— con un suspiro, cogí mi ropa interior del suelo y me la puse antes de agarrar los pantalones. — ¡Harry!— di un respingo ante su rugido, pero no la miré. Qué cobarde.

—Me iré antes de que tengas que echarme.— murmuré, poniéndome los pantalones.

—Harry..— su tono se había suavizado un poco.

—No quiero oírte pedirme que me largue otra vez.— balbuceé, abrumado por sentirme débil por el orgasmo y por querer echarme a llorar para suplicar. Ella soltó un suave suspiro.

—Harry.. Vuelve aquí, venga.— me atreví a mirarla por sobre el hombro. Ella estaba todavía acostada, despeinada, apenas cubierta por la sábana. Sus labios hinchados se veían tan tentadores.. — No me obligues a levantarme, Harry.— gruñó, frunciendo el ceño. Suspiré y me senté en el borde de la cama, aún lejos. Suspiró.

—No me hagas esto, por favor.— supliqué, sintiendo mi garganta apretarse. Su mirada se dulcificó.— No voy a soportarlo, soy débil cuando se trata de ti.— parpadeé furiosamente, resistiendo las lágrimas todo lo que pude. Suspiró.

—Harry, por favor, entiéndeme..— murmuró.— Estoy intentando muy duro perdonar e intentar que todo sea como antes. — instantáneamente mi labio inferior sobresalió un poco hacia afuera, la tristeza abrumándome. Ella cerró los ojos unos segundos antes de mirarme intensamente. — Te amo y extraño.— un gemido lastimero salió de mis labios.

—Estoy sufriendo mucho.— balbuceé, luego me mordí los labios, negando.— Apenas puedo tolerar estar lejos de ti. Muero por saber si estás bien.— gimoteé. Ella se lanzó sobre mí, abrazándome. Sus labios besaron mi esternón. La abracé con fuerza.

Ella pegó sus labios a los míos y me mordió, logrando que me pierda un poco. Sin embargo, intenté mantenerme firme todo lo que pude.
Su beso era suave aunque insistente, y yo estaba todo jadeante mientras intentaba –contra mi maldita voluntad– no besarla con la desesperación que sentía.

Ella mordisqueó mi lengua y bufó, comenzando a repartir besos por mi barbilla hacia el cuello.

—No me obligues a patearte, Harry..— murmuró, su voz siendo un gruñido bajo. Suspiré, dándole mi cuello con total libertad.— Supongo que todo esto del desorden hormonal y el extrañarte, hace que quiera saltar sobre ti.— sonreí un poco, pasando saliva y suspirando.