Epílogo.

108 9 46
                                    

Presente
Jamie saca su taza de café de la máquina, la apaga y se la lleva a la mesa del comedor. Dos cucharadas de azúcar y lo remueve bien. De pronto, una carta se cuela por la rendija de la puerta. Jamie, que ya tenía la taza entre sus dedos, la coloca al lado de su croissant y se levanta a recoger el misterioso sobre. Lee su nombre y su dirección y lo abre con misterio.

Querido psicólogo,

¿Cómo te va por mi piso? Aún me debes dinero del alquiler, ¿eh?
Es broma. En realidad venía a hacer el resumen de mi mejoría que te prometí. Pues estoy bien, bastante bien. Sigo echando la vista atrás y veo a todos los que he matado y a todos aquellos que han muerto por mí y mi corazón aún amenaza con partirse en mil pedazos. Pero debo vivir con ello. Al igual que con lo de la isla. Y es que recuperar la memoria tiene un precio. Y vale que ahora ya me acuerdo de todo; pero cuando digo todo es todo. Ahora tengo pesadillas donde vuelvo a ver morir a mis compañeros y en más de una ocasión me ha tocado llamar por teléfono a Jonah o a Sam a las tantas. Pero no te preocupes por mi salud, ya me he buscado a un psicólogo que me ayudará. Pero no te pongas celoso, ¿eh? Tú sigues siendo el mejor psicólogo que se puede tener.

La vuelta a casa ha sido dura, muy dura. Más después de haber muerto y haberme encontrado con mi padre. Una realidad sin él se me antoja eterna. Y es por ello que he decidido que nada va a frenarme. Y que pienso limpiar su nombre hasta que mi corazón deje de latir. Debo demostrar que mi padre no era ningún loco; por lo que, sintiéndolo mucho, lo de la vida normal y corriente tendrá que esperar. Pero no te preocupes, Jonah vendrá conmigo. ¿Que qué es lo que busco? Lo que mi padre dejó a medias. Voy en busca de la inmortalidad. Suena bien, ¿verdad?

Atento a más noticias mías. No desesperes, algún día nuestros ojos volverán a cruzarse. O eso espero...

Te quiere y echa de menos tus sesiones,

Tu paciente Lara Croft

Jamie deja la carta encima de la mesa, junto al desayuno.

– No me lo puedo creer...

Dice mientras mira por la ventana, por la que se filtra el sol a través de las cortinas, y los coches siguen su ajetreado rumbo al compás de los peatones.

Y fin. Emocionadísimo estoy. Cualquier cosa que queráis comentar no dudéis en hacerlo. ¡Quiero saber vuestras impresiones! También acordaos de votar lo del especial que hay dos capítulos más atrás, en el 44. Un besazo y hasta la próxima, que no será dentro de mucho ;)

 Un besazo y hasta la próxima, que no será dentro de mucho ;)

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Tomb Raider. Fantasmas del pasado [editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora