Destinos cruzados

Nuevas intenciones

Hola, los y las invito a votar y comentar, me encantaria saber sus opiniones sobre la historia.. Aclaro de nuevo, no es un libro como tal, sino una historia totalmente de fantacia y aun no se ha editado, cuando posea el tiempo me gustaria dedicarme a pulirla.

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Alan

Me quede mirando el rostro maltratado de Mauren, ella se mantenia en silencio, con su cara abajo y lagrimas atravezando sus mejillas.

- Tienes que aprender a respetar a tus superiores y obedecer sus ordenes.

Hable con voz concisa y segura, ella tenia que comprender como funcionaba el mundo y no podria hacer lo que quisiera, aunque tambien me dolia ver lo que habia hecho con su rostro.

- ¿Te he hablado, me has escuchado?

Mauren tomo una larga inalacion y also su mirada a la mia.

- Si mi señor, me ha quedado claro.

Me contesto con el mismo tono de voz con el que yo le habia hablado.

- Eso espero, no quiero tener mas problemas como estos.

Mauren segia mirandome y
Ahora su mirada estaba cargada de rencor. Entonces señalando los restos del Jarron partido le indique seguir su trabajo

- Ahora encargate de limpiar lo que has hecho.

Rodeandome, inmediatamente se agacho al suelo para iniciar su tarea, al hacerlo, pude ver que de su mano derecha caian gotas de sangre.

Me agache junto a ella tomandole la mano, sin embargo se alejo de mi como si mi toque le asqueara.

- ¡NO TE ACERQUES!

Se rencogio hacia si misma, y pude ver que lo que ella sentia no era asco, sino miedo.

- Mauren estas sangrando...

- ¡No importa, alejate de mi!.

Su terquedad me exaspero

- ¡DEJAME AYUDARTE MUJER NO SEAS TERCA!- Le grite molesto y desesperado a la vez.

Sin embargo solo sirvio para aumentar su miedo. A pezar de que senti un raro sentimiento, me gusto que ella fuera conciente por fin de dominio sobre ella, pero esa herida era grave, asi que tenia que convencerla.

-TE HE DADO UNA ORDEN Y LO QUE YO DIGO SE HACE, AHORA VAMOS - dijo con su duro tono de voz .

Aun cuando seguia alejandose de él, Alan la tomo a la fuerza de su antebrazo y salio con ella de la habitacion.

A medida que caminaban Mauren empezo a calmarce, sin embargo al ver hacia donde iban hiendo paro de repente.

- ¿A donde me lleva?- lo cuestiono

Alan parecio no importarle su pregunta y aligero su marcha.

- Ah no! Yo no voy a entrar allí - dijo señalando la puerta.

- Mauren no empieces de nuevo.

- No lo hare ¡ sueltame!- si de algo estaba segura, era que ese hombre no la iba a dominar.

Mauren sentia su mano arder cada vez y sentia que el peso de los dias anteriores caian sobre ella, sobre todo el dia anterior, donde Kayren la habia hecho trabajar casi toda la noche con la excusa de que todo debia estar limpio, ahora, con semejante ajetreo su cuerpo ya no daba más.

- Alan por favor no mas- dijo con suplica.

Entrando en el cuarto, Alan solto a Mauren sobre un mueble cerca de la ventana, y salio en busca de una de las criadas para que se encargara de buscar a la tejedora quien era la que se encargaba de ayudar a cerrar las heridas de sus guerreros, la sanadora vivia en una cabaña adentro en el bosque y tardaria mas tiempo en llegar.