Capítulo 8: Invisible

1.7K 148 26
                                    


Thor y Banner iban subiendo por el portal hasta que llegaron al Bifrost, en donde vieron a Heimdall que como de costumbre estaba protegiendo.

-Príncipe Thor, es bueno verlo aquí- salido el moreno de ojos brillantes, con su tono de voz seria, fuerte y grave.
-bienvenido también a usted doctor Bruce Banner-

Este último lo miró extrañado -perdón, ehh, hola, ¿Cómo sabes mi nombre?- pregunto
-lo he visto triunfar y caer muchas veces- responde Heimdall sin mirarlo a los ojos

-oh... Bueno, ¿Tú puedes ayudarnos entonces?-

-Bruce, el puede ver a cualquiera que habite los nueve mundos- interrumpe Thor
-amigo, ¿Sabes algo de ____ Stark?-

-la hija de el hombre de titanio y oro- responde Heimdall viendo hacia la nada —aparentemente—
-este hombre no está bien, y los involucrados tampoco, necesitan ayuda emocional-

-¿Sabes algo de ____ Stark?- repite Banner. Heimdall se queda callado un momento hasta que su ceño se frunce y mira por fin directamente a Thor y a Bruce.
-no la veo- dice desatando la desesperación de ambos visitantes.

-Heimdall te suplico que- Thor toma aire -busques otra vez- finaliza triste;
Bruce se volteó para darles la espalda y puso sus manos tras su nuca. Lenguaje corporal de frustración, tristeza, duda.
¿Qué harán ahora? ¿Cómo se lo dirán a el equipo? Si aún se le podía llamar así.

-lo lamento-

Para cuándo Bruce se volteó a verlos otra vez tras escuchar a Heimdall, Thor estaba de rodillas en el suelo, con la cabeza agachada y su martillo junto a él   -ella era una niña muy dulce, alocada, segura e inteligente-

-eso es todo, ¿Verdad?- pregunta Bruce.  -ya no hay dónde buscar-
Heimdall solo bajó la cabeza.
Bruce se empezó a rascar la cabeza, caminaba en círculos hasta que pasó lo inevitable.

-Hulk- dijo Thor advirtiendo lo que pasaría y se levantó.
-llevanos de regreso- pidió al moreno y de inmediato la espada del Bifrost hizo su trabajo.

Iban comiendo hasta que Hulk perdió el control y salió del portal haciendo que Thor grité «No» con miedo y preocupación.

[• • •]

Thor cayó a Midgard y buscó rápido a sus amigos, se encontró a Natasha

-Thor, ¿En dónde está Bruce?, Necesito tu ayuda para separarlos antes de que se maten- salieron corriendo durante dos minutos y vieron a Tony y a Steve que estaban peleando a muerte.

Thor giró su martillo y voló hacia ellos, llevándose de repente a Stark, que estuvo a punto de matar a Steve con un rayo propulsor en la cabeza.
Después cayeron al suelo.

-¡Déjame! Voy a matar a ese imbécil- gritó Tony sin salir de la armadura.

Steve estaba en cuatro en el suelo tratando de pararse, su cara estaba gravemente herida, al igual que todo su cuerpo.

A la armadura de Tony le faltaba un brazo y la cabeza, ¿En dónde habían caído? Sólo Dios lo sabe.

-¡Ya basta!- sentenció Thor, cuando lo soltó.

Tony se paró de golpe y miró al rubio con barba. -¿La pudieron localizar?- Steve se acercó con ayuda de los hombros de Clint para saber de su amada.
Tony miró a su alrededor un segundo
-¿en dónde está Bruce?- pregunta otra vez.
-¿Está cuidando de ____?-
Esa suposición hizo que todos se emocionaran. Sintieron luces de esperanza en sus estómagos que subieron hasta la garganta y se hizo un nudo ahí.
Thor bajo la cabeza sintiendo ese mismo nudo, y su expresión contagió la tristeza a todos de inmediato.

-ocurrió un accidente y...- las lentas palabras del Dios del trueno eran acompañadas de los «No, por favor» de Natasha Romanoff. El llanto casi silencio de Tony. Clint tan solo veía a la nada para después simplemente llorar y por último Steve se dejó caer de sentón, sintiendo su costilla rota y la sangre en su nariz, al final solo tapó su cara y se dejó llevar por sus sentimientos.










¡Hay una Stark suelta! 2T | RagnarokDonde viven las historias. Descúbrelo ahora