Segunda temporada :
El poder que contiene el cuerpo de ____ Stark Jackson resulta ser la maldición de todos los tiempos.
La desesperación por encontrar a ____ invade a los Vengadores, y se convierte en depresión cuando se enteran de su muerte. Todo...
Caminaba de la mano con Melisa, mi hermosa novia, la conocí en una Stark Expo hace dos años, la segunda Stark Expo sin Howard Stark.
Ella es reportera y científica, siempre ha dicho que son las dos cosas que la apasionan, y que gracias a su esfuerzo, hoy es todo lo que es, y yo estoy enamorado de ella.
-Tony- me llamó, mirándome con esos hermosos ojos verdes con café, brillantes como el sol y llenos de vida. La miré esperando a que prosiguiera, y ella empezó a notarse nerviosa, es simplemente perfecta.
-Tony tengo que decirte algo importante- me jaló a una banca. Estábamos en Central Park, en la zona donde había un caminito beige de piedra y al rededor muchos árboles y arbustos llenos de frutos y flores. Pasto cuidadosamente cortado y tan verde como esmeralda.
La banca de metal y pintura negra, nos dejó descansar un poco mientras Melisa, vestida con un overol de mezclilla con short y una playera amarillo pastel de manga corta debajo de este, me miraba ansiosa, tal vez asustada, y sus manos tecleando al aire reflejaban nerviosismo, se mordió un labio y me miró frunciendo el ceño.
-Eh, esque nisiquiera me salen las palabras- me dijo. Yo, siendo dulce, como con nadie y solo con ella, la tomé de las manos y las acaricié.
-sea lo que sea, no me iré de tu lado- le dije lentamente, para que le quedará bien claro.
-Tony, yo... te amo, lo sabes bien- me dijo, yo sonreí y besé su frente, poco a poco ella parecía recuperar la calma. Respiró y apretó manos viéndome de frente.
-quiero dejar en claro que estoy muy asustada y que para nada tenía esto en mis planes- me dijo lo más rápido que pudo, como si se tratara de una disculpa. -Tony estoy esperando un hijo- y..... Shock. -un hijo o hija, tuyo y mio- al decirlo, parecía más triste que alegre. Por mi parte, ningúna parte de mi cuerpo me respondía y probablemente había perdido el color en mi piel.
-Tony- me llamó, -¡Tony di algo!- se quejó.
Yo, estaba frío, pero en cuanto volví a mi mismo... me puse muy feliz.
-Melisa- dije viendola, empecé a celebrar, me paré y salté, y grité y la cargué. -¡Melisa!- decía eufórico
-Tony, ¿Qué te pasa?- me preguntó riendo en mis brazos.
-¡voy a ser papá!- grité.
Melisa tenía cara de confusión y felicidad. -Tony, pero... Yo no sé ser mamá- Me dijo, yo la miré y reí.
-¡Yo tampoco!-
En la actualidad...
Caminaba por la torre, viendo serio una foto de ____, en donde me abrazaba por los hombros detrás de mí, y yo reía sentado en mi escritorio. De fondo, Bruce sonriendo mientras nos miraba. Recuerdo que Natasha tomó la foto con su nueva cámara instantánea. Puse la fotografía en su marco y la acomodé boca abajo, enseguida mi teléfono sonó, y en la pantalla se leía Thor. Contesté de inmediato y llevé el móvil a mi oreja.
-Thor- dije mirando a mi alrededor, la torre ya estaba casi vacía, lista para venderse
-Tony, necesitamos hablar- me dijo del otro lado
-en mi casa, en dos horas, ¿Está bien?-
-perfecto, gracias, nos vemos ahí- y colgó.
Ví mi celular para colgar pero Thor lo hizo primero, por lo que se vi solo las llamadas perdidas de Steve. Abrí los mensajes y los leí:
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Después de eso, unas 5 llamadas perdidas de aquel día, y otras 8 de los siguientes cuatro días. Guardé mi celular y caminé a la salida, ahí en el auto me esperaba Natalia, metida en un video juego como acostumbraba, ahora yo la cuidaba y ayudaba, a ella y a Parker, y ahora, también a Adriana. Subí al auto y empecé a conducir hacia la nueva mansión secreta Stark, por que pasaría por Pepper y la llevaría al aeropuerto, y después regresaríamos a casa. Era todo.
[• • •]
-bienvenido a la mansión secreta Stark, Thor- le decía a mi amigo, quién apenas llegaba. Lo hice pasar, nos dimos un abrazo fraternal y fuimos al salón principal.
-¿Qué es tan importante?- le pregunté dandole una cerveza.
-Tony, hay algo muy importante que debes saber- me dijo, se sentó frente a mi y me miró serio.
-Existe un poder místico, que se traslada de humano en humano, cada siglo, ese poder, en tan hermoso como masivo, por lo que crea o grandes cambios para bien, o la gran destrucción de todo- me dijo
-¿eh... Bien, y quién tiene ese poder?- pregunté
-ese es el problema, no lo sabemos, pero la diosa de la muerte va a regresar y querrá apoderarse de ese poder, y si lo logra, estamos muertos... Todos, los nueve mundos- advirtió. Yo me quedé viéndolo con interés y miedo, ¿La diosa de la muerte? ¿Un poder infinito?
-Tengo que buscar a Loki, volver a Asgard y enfrentarla, pero para que tú me ayudes debes ir a esta dirección- me dió un papel -habla con el hombre de capa roja, dile que me conoces y ayúdalo, necesito a todos- se levantó y yo con el.
-pero ¿Quién es?- le pregunté antes de que mi jardín sea quemado por su portal de siempre
-un aliado- dijo sonriente y se fué en esa luz mágica.
Una visita fugaz, extraña y severa, ¿Qué le pasa al mundo?
A pesar de eso, preferí no hacerme más preguntas e ir a resolverlas a la dirección que Thor me dió.
