Capítulo 28

746 91 19
                                    

Yang Mi apareció en la sala donde nos encontrábamos ChanYeol y yo, pues JiMin dijo que debía hacer unas cuántas cosas y le pareció que hacerlas cuándo yo estaba en una situación tan incómoda era lo ideal. Luego le reprocharé. Ella miró primero a Chanyeol y luego a mi. Ambos nos pusimos de pie, pero Chanyeol se acercó primero a ella. Yo metí las manos en los bolsillos de mis jeans, observandoles. Él le entregó las flores y ella dudosa las tomó y sonrió algo incómoda en agradecimiento. Caminó pasado por su lado, se acercó a mi y me dio una mirada de "¿qué demonios hace aquí?" a lo que yo solo me encogí de hombros.

- Creo que mejor les dejo solos, ¿no? - sonreí falsamente, - tienen mucho de qué hablar. -

- No tienes por que irte. - habló Yang Mi, mis ojos encontrándose con los suyos.

- Si debería. Yang Mi... Debo hablar contigo y no quiero que nos molesten. - dijo ChanYeol, acercándose a ella, puso su mano en el hombro de Yang Mi pero sus ojos estaban clavados en los míos con expresión seria. Yo bufé.

- Siéntanse como en su casa. Hablen todo lo que quieran. Tengo cosas que hacer de todas formas. - mentí. Las cosas que iba hacer ya no tenían importancia si él estaba aquí. Sé que ha venido a tratar de llevarse nuevamente a Yang Mi, solo espero que Yang Mi no acepte. La necesito conmigo.

- Tae Hyung.. - la escuché llamarme. Yo solo me giré y le brinde una falsa sonrisa. Sé lo que pasará. Me dejará nuevamente. Se irá con él. Me había vuelto hacer ilusiones, que tonto fui. No soy bueno para ella, y lo sabe. ChanYeol es el hombre que necesita. No yo, un asesino que no tiene compasión por quitar la vida de chicas... Que aunque no merecen la vida, para el mundo está mal asesinarlas.

Subí a mi habitación y me senté en el borde de mi cama. Escondí mi rostro en mis manos. Unos cuántos segundos después estas comenzaron a mojarse. Estoy llorando. Miré mis manos, no sentía ganas de llorar, y ellas sin previo aviso salieron. Chasquee la lengua. Nunca pensé que estaría llorando por una chica. Tanto odio que creció dentro de mi, tanto desprecio hacia las mujeres y llegó ella para cambiar eso. La única que realmente me hizo saber que es el 'amor.' La primera mujer que amo. La única que necesito para estar bien.

La puerta fue abierta. Yang Mi encendió la luz, entró y cerró la puerta detrás de sí. Mis ojos la escanearon por completo.

- Yang Mi, ¿qu-..? - sus labios chocaron con los míos. Mis ojos se abrieron como platos. Cuanto extrañé sus labios. Respondí a su beso. Nuestros labios moviendose despacio, disfrutando de beso. Le agarré de la cintura, y puse sobre mí, sus rodillas a cada lado de mi cuerpo. Mis manos acariciaban la piel de su espalda bajo la tela de su camisa. No sé que demonios pasó abajo, o que hizo con ChanYeol pero no iba a llenarla de preguntas y desperdiciar sus deliciosos labios sobre los míos. Ella comenzó a moverse, de atrás a adelante, haciendo que mi erección creciera.

- Dime que me amas. - ordenó entre beso y beso.

- Yang Mi.. - ella bajó sus besos a mi cuello, parecía desesperada. Mordía, lamía y succionaba el area. Tiré mi cabeza hacia atrás, dándole más espacio, - Te amo, Yang Mi. - y no mentía. Aunque escondí mis sentimientos hacia ella, jamás deje de amarle. Solo no quería seguir teniendo sentimientos por alguien que ya había re-hecho su vida. Pero aquí está, el amor de mi vida, sobre mí mientras me besa.

Ella se alejó y miró directo a mis ojos, - ¿De verdad me amas? - yo asentí.

- Nunca dejé de hacerlo. Siempre serás la única mujer que ame. - sonreí, coloqué un mechón de su cabello tras su oreja y ella acarició mi mejilla. - ¿Qué pasó con ChanYeol? - no pude evitar preguntar. La curiosidad me ganó.

- Le dije que no quería nada con él. - soltó un suspiro - me rogó, incluso lloró, pero no puedo volver con él. - hizo una mueca. Yo fruncí el ceño.

- ¿Por qué no? Pensé que le amabas. Me dijiste que eras feliz con él y toda esa mier-... Cosa.- me corregí y ella rió.

- No era cierto. O sea, si le quiero, ha sido increíble, y si era feliz. Pero a quien verdaderamente amo es a ti. No puedo engañarme más. Sé que estoy mal de la mente. ¿Quién se enamora de un asesino? - rodó los ojos divertida - pero aquí estoy. Tal vez estoy enferma de la mente, pero no me importa, estoy perdidamente enamorada de tí, Kim Tae Hyung. Y por que te amo, quiero ayudarte. - sus ojos se cristalizaron, igual que los míos.

- Yo no quiero asesinar más. - admití, evitando su mirada - Quiero cambiar. Quiero ser bueno, para tí. Pero creo que no puedo. Intento pero siempre termino haciéndolo de nuevo. - limpié unas cuantas lágrimas de mi cara. 

- ¿Has asesinado a alguien recientemente? - suspiré, solo puedo ser sincero con ella.

- Cuatro.. -

- ¿Cuatro chicas? - asentí.

- No pude evitarlo. Es como si no tuviera control. - ella tomó mi rostro en sus manos.

- ¿JiMin lo sabe? - negué con la cabeza - Vale... Wow... Humm, nunca he lidiado con una confesión como esta. - parecía pensar demasiado.

- Él estará muy decepcionado. Me echará.  No puedo perderlo a él también... - dije refiriéndome a Jung Kook. No quiero tener que lidiar con perder otro amigo, aunque son casos totalmente diferentes. Jung Kook me traicionó, pero no deja de ser importante psra mi, y Jimin ha sido demasiado bueno, no quiero que sienta que me he aprovechado.

- Te ayudaré a que ya no sientas necesidad de hacerlo. Haré todo a mi alcance. Pero debemos decirle a Jimin. Sé que nos ayudará. Él te quiere muchísimo y solo quiere verte bien. Sé que nos ayudará. - sonrió dulcemente. - No puedes salir de esto solo y yo no puedo ayudarte por mi cuenta, necesitamos a Jimin.

Sin resistir más, nos encontrábamos en la puerta frente a la habitación de Jimin. Yang Mi había logrado convencerme. Yo solo quiero salir de esto.

Me siento como un adicto buscando ayuda para dejar las drogas, solo que mis drogas es sacarle los órganos vitales a zorras de la calle.

Rescue me. | TaeHyungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora