capitulo 12

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Aron.

--No puedo creerlo-- dije por lo bajo tras detener el auto por décima vez, apagar el motor y voltear hacia la persona que llevaba una tabla con hojas e hacia unas extrañas lineas.

--Perfecto, ya falta solo un poco-- espeto para dirigir la mirada hacía mi.

--Hagamoslo una vez más--  dijo antes de pasar la hoja. Encendí el motor nuevamente, coloque la primera velocidad conjunto al croché antes de arrancar.

Ya llevaba una semana desde que me había recuperado y estaba asistiendo a clases de manejo ya que todos los chicos me obligaron. Yo se manejar pero cuando me molesto tiendo a perder un poco el control, yo debería estar es en una clase de autocontrol no en clases de manejo.

Han pasado unos minutos desde que bajé del auto y siento que ya perdí todas mis horas de día acá, ya son mas de las 12pm y mi estómago ruge, aunque me gustaría ir a casa de Reichell, desde el accidente no me atrevo a ver a los chicos porque se que todo lo que pasó fue mi culpa y estoy seguro de que ellos no me querrán ni ver. Fui caminando hasta el local donde llevaba a Mía a almorzar algunas veces, me senté solo en una de las mesas del fondo el lugar era colorido, muy juvenil, me pedí un café grande. Lo tome  en silencio pensado que debería alejarme de ella, le causo daño cuando la rabia me ciega... Después de tomar todo el café hasta el fondo, decidí caminar a casa, estaba un poco lejos pero me vendría bien caminar ya que los días han sido muy duros y necesito encontrar una manera para que esto no me afecte tanto aunque es imposible.

Mientras caminaba, escuchaba algunas canciones que me recordaron mucho a los proyectos que tenia y cumpliría con ella a mi lado, eso me deprime muchísimo más, esto debía terminar si seguía así moriría por su culpa.

Apenas llegué a casa fui a darme una ducha fría, me podía ayudar un poco a relajarme, salí secandome y buscando ropa limpia, al abrir mi armario vi el suéter purpura de Mía, mis ojos se cristalizaron no había podido sacar de allí así que solo tome una camiseta y rápidamente me la puse cerrando el armario. No quería ver ni hablar con nadie, desde que me dieron de alta Brian estuvo conmigo hasta que me recuperé, el estaba ahí a pesar del silencio que me creé. Solo quería estar con mi guitarra y encontrar alguna manera de sacarme la culpa de mi pero después de dos horas de canciones me deprimi a niveles sobrenaturales y llore hasta dormir.

Ya son tres semanas y media desde el accidente, terminé las practicas de manejo y ya recibí el certificado. Tome una decisión, tengo que hacer lo mejor para el bien de los chicos, aunque ellos me crean loco. --Me alejaré de ella-- pensé en voz alta lo que hizo que Brian me mirara confuso

--¿Que harás que?--  vociferó Brian un poco confuso pero imaginándose a que me refería.

--Me alejaré de ella-- dije por fin mirando hacia el piso.

--No estas tomando una decisión un poco dura y algo impulsiva?-- dijo tratando de hacerme entrar en razón pero yo ya había tomado la decisión así que solo lo mire y seguí manejando de camino a casa.

Apenas entrar fui directo a mi habitación para preparar las maletas, tome la guitarra y las coloque en la sala mientras que dejaba una nota explicando cada cosa que debían hacer en mi ausencia. Me subí en el auto después de meter todo en el maletero y ver que Brian terminaba de hablar por teléfono antes de subir.

--Ya hable con una de mis empleadas, le dejare una copia de la llave y yo me quedare con la otra-- me dijo mientras encendía el motor, asenti en silencio antes de sacar una hoja que traía en el bolsillo de la mochila, tras verlo recordé algo que necesitaba hacer antes de partir por lo que toque el hombro de mi amigo antes de que arrancara.

--llevame a la clínica donde esta-- dije y aunque bufo al principio accedió y puso rumbo.

En el camino iba peleando internamente conmigo mismo, una vez llegar aparcó el auto tome mi guitarra y fuimos hasta su habitación pero antes de entrar una enfermera se nos acerco.

--Disculpen pero no es hora de visitas así que no pueden pasar, por favor deben retirarse-- dijo amablemente antes de acompañarnos hasta la sala principal, nos vimos la cara por lo que sabíamos que teníamos que entrar si o si a esa habitación. Pasamos unos minutos pensando lo que haríamos hasta que nos pusimos de acuerdo.

Lentamente fuimos acercándonos a una habitación de empleados, al entrar vimos que había una un conjunto de enfermera junto a una cartera, mire a Brian suplicándole que lo hiciera y tras unos minutos acepto. Se coloco el conjunto de enfermera el cual le quedaba a la medida por la cintura moldeada que tenia, revisamos en la cartera y había maquillaje el cual utilizo de manera fácil por lo que lo mire confuso.

--Amigo, realmente no eres gay?-- le dije en manera de susurro para que no escucharan por lo que me miro feo y siguió en lo suyo, una vez termino me sorprendí al ver que estaba delante de una mujer sin senos así que tome unos trapos y algodón para hacerle unos implantes. Por un momento se negó pero después se vio al espejo y acepto. Usamos una mesa de utensilios con ruedas donde me metí a empujones junto con la guitarra.

Salio disimuladamente caminando por el pasillo y solo escuche un par de siseos que supuse eran de ancianos por lo que me guarde una risa, hubo alguien que dijo "que chica tan hermosa" por lo que no pude evitar escapar una mini risa así que brian tuvo que toser con tono de mujer lo que hizo que mas riera aunque lo pude guardar.

Entramos en la habitación donde se encontraba Mía, salí de esa mesa con mi guitarra y la observe allí acostada por lo que sentí un nudo en mi garganta, mire a brian y el entendió lo que quería así que tomo la mesa y salio.

Me acerque colocandome en la orilla de la camilla y puse la guitarra en mi regazo, la afine y comenze:

Corrí detrás de sueños rotos
Sin pensar en que podría pasar
Me deje llevar por mis impulsos
Sin ver el daño que te hacia
Espere a que todo empeorara
Para poder darme de cuenta
Del daño que causaba.

Me dedique a herir
Me dedique a lastimar
Me dedique a dañar
A la única que quería a mi lado
Me deje llevar
Me deje llenar
Dejando que mis impulsos te lastimarán
Y ahora la culpa me afecta alejándome...

Sentí un fuerte golpe lo que evito que continuara, una de las cuerdas de la guitarra se había roto justo antes de que mis lágrimas empezaran a salir pero después de verla nuevamente sentí que algo dentro de mi que estaba desasiéndose así que antes de romper en llanto me levante guardando mi guitarra y colocandome a un lado, la mire por ultima vez, le deje un beso en la frente justo cuando sentí una lágrima recorrer mi mejilla, fue entonces cuando supe que estaba muriendo, camine hasta la puerta y antes de salir voltee una vez mas aunque mi vista nublada no me dejo ver nada, al colocar mi mano en el pomo de la puerta para abrir y salir sentí una fuerte punzada en mi pecho.

Tuyo & MíoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora