Capítulo 23

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Brian.

Ha pasado un día desde que no fui a casa de las chicas, la sospecha de Reichell me ha puesto a pensar mucho, no quisiera que fuera cierto así que preferí tomar distancia quizás no fue por tanto tiempo ya que hoy tenia que llevar a Mía con la docto para que le hicieran su última terapia, estaba muy contenta cuando me habló recordandome que debo acompañarla. Con lo de los mensajes con canciones pues ya había recibido 3 más, incluso la noche que estuve por última vez en lo de Mía y Reich me llegó uno de ellos y fue algo de mucha coincidencia que en alguna parte de la canción decía algo parecido a lo que Mía me dijo esa noche mientras cenábamos, que era importante para ella. Al final de la misma terminaba igual que la primera con mi nombre y un emoji de rosa, ya me estaba haciendo ideas pero las descarte ya que parecía algo estúpido, ella es muy directa y si pasara algo lo diría personalmente.

Ya era hora de ir a buscarla, así terminé por ponerme un poco de perfume que era nuevo, olía muy bien, tome mis llaves y salí como siempre sin despedirme de nadie, en el camino me tope con un semáforo así que mientras daba el tiempo tomé mi celular y en ese instante un mensaje llegó, era la chica misteriosa con otra parte de una canción o más bien este era un poema que decía:

--"Y yo sigo aquí esperando tu respuesta y aunque tu no lo sepas te dedique días lluviosos porque para mi son los mas maravillosos".--Eso si no lo esperaba así que me pareció tan tierno que respondí:

--"Tenemos ya algo en común, es un buen comienzo".--

Comencé a escuchar que los otros autos tras de mí daban pitazos para que me moviera, había olvidado así que rápidamente solté el celular y avance siguiendo el camino hasta el edificio de las chicas.

Mía.

Ya casi era hora, me coloque mis zapatos, hoy era el día esperado, ser libre de esto. Tomé mis cosas para salir y recordé que tenia que pasar por unas cosas a lo de Lucas, cosas que quería que le llevara a su familia.

Baje hasta la entrada del edificio y rápidamente divisé a Brian apenas llegando, subí de una vez al auto, nos saludamos y condujo, no hablamos mucho en el camino solo una que otras preguntas que yo le hacia mientras el respondía secamente por lo que fue poco inusual ya que siempre salia con sus bromas. Deje pasar su estado y al llegar bajamos los dos, el ayudandome, me dijo que esta vez esperaría afuera, ya no le interesaba la doctora supuse, algo normal de él.

Entré tranquilamente al consultorio, me hicieron nuevamente los ejercicios y esta vez me encontraba perfectamente. Me sentía realmente feliz y seguro que a los chicos también les encantará la noticia. Terminando todo la doctora me felicitó y se despidió de mí, también me preguntó por Brian así que tuve que decirle que él tenia asuntos importantes y me pidió que viniera en taxi, ella pareció creer lo ya que veía a Brian como un chico responsable y de gran corazón por ayudarme en mi estado, la tenia comiendo de su mano. Salí de allí buscando a Brian que estaba con una chica muy conversador, me acerqué y lo miré arqueando una ceja y ceño fruncido.

--Brian...-- Me miro con una expresión de ayudame y entendí que la chica lo tenia fastidiado. Le sonreí y entre en papel para sacarlo de esta.

--Natti, ella es mi novia, Mía te presento a Natti es una chica muy agradable..-- dijo, su cara dio un cambio súper drástico, dejo de hacerse la bonita.

--Un gusto soy Mía, la novia de Brian.-- Le di una falta sonrisa, la chica se veía como una total plástica, alta, rubia, cuerpo bien definido y una sonrisa hipócrita.

--Entonces, que estés bien, nos vemos pronto-- le dijo a Brian ella ignorandome.

--Aja sí... Amor...ya eres libre, mirate-- soltó el dejando de prestarle atención y mirándome, paso su brazo encima de mi hombro en forma de abrazo y me llevo hasta la puerta del auto y abriendome la puerta para subir.

--Ésta me la debes--

--Pasamos por un helado de regreso a casa, esta vez va por mi cuenta, gracias--

Cerró la puerta seguido de esto, la chica seguía allí así que el se despidió de ella rápidamente y entró en el auto, nos quedamos mirando por unos 3 segundos en silencio para luego soltar las carcajadas por lo ocurrido. Pase todo el camino a la heladería riendo y adulando mi gran actuación, el solo se limitaba a reír y mirarme.

Nos sentamos en una de las mesas de afuera ya que el día estaba fresco, mientras bromeabamos y comíamos nuestros helados, recordé que tenia que leer un email de mi padre, así que tome mi bolso y saque la tablet, Brian estaba teniendo una conversación por llamada la cual supongo que no era muy de su agrado ya que parecía algo molesto, yo no lograba escuchar lo que el decía pues cuando su celular sonó y miro la pantalla el se excuso levantándose de la mesa y alejándose un poco.

Yo me concentre en ver el email que no era mas que solo cosas del trabajo, para ponerme al tanto de todo y completar mis conocimientos y así asumir el cargo. Unos minutos después volvió Brian muy serio, me miro fijamente en lo que yo desvíe mi mirada hacia el y en lo que hizo una expresión de fastidio.

--Parece que no te cayó bien la llamada--

--Algunas personas no controlan su nivel de drama...--dice él recargado en la silla

--¿Conozco a esa persona?- le pregunté por curiosidad

--No, y no te caería bien...¿Qué haces ahí?--Pregunto para dar por cerrado el tema.

--Cosas de trabajo, pero ya terminé, iré al baño para luego irnos-- Me levanté dejando mis cosas a su cuidado, el tomó la tablet con tranquilidad y confianza ya que yo se la prestaba muchas veces.

Entre nuevamente en la heladería, había mas personas así que tuve que luchar entre ellas para pasar hasta donde se encuentran los baños, salí rápidamente de el tanto que cuando iba decidida a irme del local, choqué con un cuerpo masculino que antes de caer al piso me tomó por los brazos no era de extrañarme que mi torpeza se hiciera presente, el chico alto de cuerpo fornido me miro y luego me dio una sonrisa.

--Disculpame, soy muy distraída-- le dije en lo que me soltó del agarre.

--No hay problema, yo tampoco estaba muy concentrado--

--Gracias por no dejarme caer por cierto-- Le mire dando media sonrisa.

-- Fue un placer bonita... Oye tu eres Mía no?--

--Si, nos conocemos? Si es así disculpame de verdad pero tuve un accidente y pues no recuerdo mucho-- dije y su expresión se volvió seria, iba a contestarme pero Brian entró interrumpiéndolo.

--Mía ya vamos--Dijo éste que no tenía buena cara.

--Si claro vamos, hasta luego...-- Le dije al chico saliendo rápido para no hacer esperar a Brian que se veía algo agitado.

El tomó mis cosas ayudandome y caminando rápido al auto, subimos y emprendimos camino. Yo no entendia su extraño y repentino cambio de humor, por un momento pasó por mis pensamientos que estaba celoso por la escena de la heladería pero la descarte instantáneamente, seria estúpido que fuera cierto aunque era una pequeña duda.

Tuyo & MíoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora