Capítulo 7

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Mis dedos temblaban mientras intentaba conseguir hacer una video llamada con Nico antes de que el ataque de pánico tomara el control de todos mis músculos. ¿Había suficiente aire aquí?


Me separé de las personas que se paseaban de un lugar a otro, algunas tranquilas, otras más alteradas que yo. No podía soportar a ninguna. Me sentía presionada, presionada contras las paredes que empezaban a estrecharse y todos estábamos quedando asfixiantemente juntos. Sin aire.


Caminé rápidamente hacia mi oficina y cerré la puerta con pasador. Intente convencerme que eso me mantendría a salvo del resto, con suficiente aire entrando por la ventana con rejas del 5to piso de una maldita oficina. ¡¿Quién demonios pone rejas en una ventana en un quinto piso?! Oh sí, claro, alguien podría entrar bajando por la azotea,muy inteligentes, ¿y porque no de paso le ponemos un sistema de seguridad computarizado a la puerta principal de cada piso?¡Perfecto! Hay generadores funcionando todo el tiempo, ¿que podría salir mal?


¡UN MALDITO HACKER LÚNATICO ES LO QUE PODRÍA SALIR MAL!


Intentérecobrar los nervios, juntar la poca cordura que me quedaba, e hicela video llamada. Quería verlo. Una última vez, al menos.


Élcontesto de inmediato, su rostro contraido con la duda, no era comúnque nos hicieramos video llamadas, creo que nunca habíamos hechouna.


-¿Todo va bien, Sarah?


Tomé una gran bocanada de aire antes de contestar.


-No. - Y entonces comenzó el ataque de pánico.


-¡Sarah!Dios, respira, estás bien, estoy aquí, escúchame. -Lo vi tomar el telefono con ambas manos. Yo a penas podía sostener el mio en alto enfocando mi cara. -Sarah, cariño, tienes que tranquilizarte. Tienes que respirar. Tienes que decirme que pasa.


El escucharlo llamarme cariño me distrajo un poco. Pero su voz autoritaria resonó en mi cabeza, respondí a la orden que me había dado sin siquiera notarlo.


Tomé aire, junte mis nervios y hablé.


-Pusieron una bomba, ellos lo hicieron, Nico, sé que fueron ellos. La instalaron en el quinto piso, solo aquí, pero piensan que el alcance podría afectar a toda la estructura del edificio, están evacuando.


Él me miró a los ojos sin entender.


-¿Y?¿Qué demonios haces todavía allí? ¡Sal del maldito edificio,Sarah!


-No puedo. Ninguno del quinto piso puede, cerraron la puerta principal,los hackers están intentando abrirla pero piensan que no tendrán tiempo suficiente. No pueden romperla porque es blindada. Quisieron que saltáramos por las ventanas pero tienen rejas, todas ellas, no hay tiempo suficiente como para romper los barrotes. Estamos atrapados. - Dije todo como un loro, solo repitiendo lo que había oído sin pensar realmente en ello.


-¿No pueden desactivar la bomba ustedes mismos?- Dijo luego de un momento de procesar la información. - ¡El escuadrón antibombas puede decirles que hacer!

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