Posesivo《KOOKMIN》

18.

Maratón 2/3

Jimin corría tan rápido como podía sin saber a dónde exactamente ir. Cuando tenía un problema generalmente iba con Taehyung pero ahora... No sabía qué hacer así que solo iba sin rumbo alguno.

Las palabras de Jungkook lo habían lastimado demasiado, sabía que el menor lo había dicho sin pensar pero aún así dolió que algo como eso pasará por la mente de su novio.

Bajó un poco la velocidad al aumentar el grande dolor que sentía en todo su cuerpo por los golpes que Jungkook le otorgó.

Choco contra algo y al levantar su vista era justo la persona por la que habían peleado hace unos minutos.

-¿Jimin? ¿Qué pasa? ¿Estás llorando?

El rubio notó que aún seguía soltando un par de lágrimas, se secó los ojos con la manga.

-N-No.

Después de unos segundos sin decir nada mientras miraba el piso MinHo lo abrazó.

-¿Seguro que estás bien?

-Si.- Jimin correspondió el abrazo y lo miro. Gracias.

Se alejaron pero MinHo no se separó tanto, tomó su mejilla de Jimin en sus manos y le sonrió.

-Eres hermoso... Te dejé un mensaje. ¿Lo leíste?

-No.- Mintió alejándose algo incómodo por la cercanía.

Pero MinHo se acercó una vez más.

-Quiero que salgamos pero esta vez como una cita oficial. Jimin, se que nos conocemos poco tiempo pero me gustas.

Antes de que el rubio pudiera contestar MinHo lo besó, movía sus labios sobre los de Jimin quien no correspondió y se alejó como pudo.

Dijo algo pero sus palabras quedaron en el aire ya que el chico cayó al piso tocando su labio de donde salía sangre, no pudo ver mejor el estado de MinHo ya que Jungkook se encontraba encima propinándole más golpes.

-¡¿Como te atreves a besar a mi novio?! ¡Maldito imbécil!

Cuando Jimin pudo reaccionar se acercó para detener a su novio jalandolo del brazo pero el pelinegro apenas se movía.

-¡Déjalo! ¡Jungkook, por favor!

Jungkook agarraba a MinHo de la camisa con fuerza mientras con su otra mano, hecha puño, lo golpeaba. MinHo estaba aturdido, no podía defenderse y todo su rostro estaba de sangre. Jungkook no parecía tener planes de detenerse lo que asustó y preocupó más a Jimin.

Unas personas vieron la escena y dos hombres se acercaron al pelinegro para detenerlo, cada uno lo tomó por un lado alejándolo del pobre chico que estaba apunto de quedar inconsciente por tantos golpes.

Jimin se acercó a ayudar a MinHo quien escupía sangre. Asustado lo ayudó a levantarse y miró a Jungkook con temor.

El pelinegro gritaba frustrado y se removía para salir del agarre de los hombres desconocidos pero eran dos contra uno y apesar de la gran fuerza que tenía Jungkook, no pudo hacer nada.

-¡Sueltenme! ¡Malditos entrometidos! ¡Y a ti te mataré, bastardo!- Le gritó a MinHo.

Jungkook parecía un tigre apunto de abalanzarse a su presa si fuera soltado en cualquier momento. Se sentía tan enfadado tan solo quería destrozarlo  hacerlo sufrir. Había corrido tan rápido para ver a Jimin y disculparse pero al ver como ese extraño chico besó a su novio sin pensarlo se abalanzó y comenzó a golpearlo, no iba a permitir que nadie tocará y mucho menos besara lo que es suyo.

Por otro lado Jimin ya se encontraba llevándose a MinHo lejos de Jungkook para que no le hiciera más daño. Cuando doblaron una esquina y caminaron muy lejos de donde se encontraba el pelinegro, se relajaron.

-Vamos a tu casa, ¡Estás sangrando mucho MinHo! Lo siento tanto, enserio.

-¿De verdad él es tu novio? ¿Porque n-no me lo dijiste?- Habló como pudo.

-Debí decírtelo, lo siento. No creí que yo te gustará. Pero ahora lo importante es sanar esas heridas así que vamos a tu casa te acompaño.

-No, no. Mis padres se preocuparan.

-Entonces te llevó a mi casa.

-No, tan solo vamos a una farmacia o algo. Hay una cerca de aquí.

MinHo lo guió hasta el lugar mencionado donde compraron unas curitas, agua oxigenada, algodón y otras cosas para curar heridas en sus labios, limpiar la sangre que había salido de su nariz por los puñetazos de Jungkook y aplicar algunas curitas en las heridas abiertas que tenia.

-Tu ojo se está poniendo morado.- Jimin acabó con su trabajo y observó el rostro de MinHo el cual había quedado magullado e hinchado por los golpes. Al menos las curitas tapaban los cortes.- De verdad lo siento tanto, debí contarte que estaba con Jungkook si lo hubiera hecho nada de esto habría pasado.

-No te preocupes ya pasó. Debería irme a casa.

-Te acompaño.

-No es necesario, adiós Jimin.- MinHo desapareció cruzando la puerta de la farmacia.

Parecía algo molesto y Jimin lo entendió, todo era su culpa por mentir. Tal vez ya nunca lo volvería a ver después de esto, quien se querría acercar a él después de tal incidente. Tenía que hablar con Jungkook. Estaba molesto por lo que le había dicho, sí, pero tenían que aclarar las cosas, Jungkook debía estar muy molesto. Jimin se preocupó mucho por eso y fue a buscarlo a su departamento.

Por otro lado Jungkook, al ser soltado del agarre de los hombres cuando los dos chicos se alejaron, fue a su departamento tan rápido como pudo, sacó un cuchillo y se dirigió a buscar a MinHo.

Caminó por el mismo caminó que había seguido cuando buscaba a Jimin y allí lo vió, caminando solo. Sin dudar lo tomó de un brazo y lo arrastró a un callejón donde lo tiró al piso.

-No debiste haber besado a Jimin, no debiste haberte acercado a él. Jimin es solo mío.- Jungkook tomó con fuerza el cuchillo en su mano mientras se acercaba al chico que se encontraba temblando y observando el filoso objeto.

-¿Q-Que piensas hacer?- MinHo aún en el piso retrocedía aterrado ante la situación.

-Te haré pagar.

Jungkook de acercó aún más cerca sonriendo por tener a ese chico tan asustado de él.

-¡Estás loco! ¡Aléjate!

Antes de que pudiera decir más Jungkook se abalanzó encima de MinHo y le clavó el cuchillo en su pecho, lo sacó con fuerza y lo acuchilló más veces mientras sentía como se deshacía de todo esa furia. Aún cuando el cuerpo del chico dejó de tener vida no paró su cometido, no hasta que estuvo satisfecho y se sintió conforme.

Sacó el cuchillo por última vez y miró al ya ser sin vida, sus ojos abiertos al igual que su boca, ligeramente, sus brazos estirados y todo su pecho de sangre al igual que sus manos cuando trató de alejar a Jungkook mientras era acuchillado.

Al ver esta escena Jungkook asustado se miró las manos llenas de sangre al igual que su polo el que solía ser blanco y pulcro, en una mano reposaba el cuchillo también lleno de sangre, traumatizado y aterrorizado con lo que él mismo había hecho hace un par de minutos se paró soltando el cuchillo retrocediendo y mirando a MinHo sin poder creer lo que había hecho. Por un instante todo se detuvo a su alrededor, estaba realmente asustado, su respiración aún estaba agitada y su pecho bajaba y subía por la fuerza que había empleado con los acuchillazos. ¿Que había hecho? Las lagrimas no tardaron en salir de su rostro al ver lo que hizo, lo mató.

Wtf