Ya era la salida de la escuela. No hable con nadie el día entero, solo me quede mirando a la nada todo el tiempo.
Camino hacia al parque para caminar y olvidarme de todo. En el camino veo como los árboles a mi alrededor. Niños saltando y jugando acompañados de sus padres.
Me siento en la sombra que da un árbol y me pongo a leer un libro. Mientras leo veo cómo van personas pasando.
Veo varias parejas y comienzo a llorar. Se que Leo y yo no éramos nada. Solo fue una noche, pero fue la mejor noche de mi vida.
No puedo evitar que mis ojos se cristalicen y salgan lágrimas de ellos. Enrollo mis piernas con mis brazos y coloco mi cabeza allí. Me quedo llorando y siento una mano sobándome la espalda.
-Si quieres ver el arcoíris, tienes que soportar la lluvia —me dice y ahora me doy cuenta que es un chico—
Levanto la vista y ahí lo veo, es un chico alto de cabello castaño oscuro, piel trigueña y ojos color miel. Wow que lindos. Su voz era grave y dulce.
-No lo sé...
-Hey, eres una chica muy, muy linda para estar llorando —me dice con una sonrisa y es tan linda que me la contagia y sonrío también—
-Gracias —se que estoy sonrojada pero no pasa nada, trato de actuar lo más normal—
-¿Puedo sentarme? —asiento—
El pasa su pulgar por mis mejillas quitando Lemus lagrimas. Su tacto hace que me estremezca.
-Wow de verdad eres muy bonita —siento como el calor sube a mis mejillas haciéndolas rojas —y más cuando te sonrojas —suelta una risita—
-emm... Yoo.. —no se que decir— me llamo Ally.
-Hasta tu nombre es lindo —este chico me va a matar con tanta lindura— Me llamo Ángel.
-Lindo nombre.
-No tanto como tú.
-Ay, que lindo, gracias... —digo con una sonrisa—
Seguimos hablando y conociéndonos. Perdí la noción del tiempo. Le di mi teléfono y el me dio el suyo, nos tiramos varias selfies y luego nos acostamos en la grama. Poso mis manos en la grama y por alguna razón toca la de el. Siento como gotas comienzan a caer sobre mi cama.
-Creo que va a llover —le digo y eso fue suficiente para que el cielo explotara en llanto y comenzara a llover—
-Te acompañaré a tu casa.
Comenzamos a correr y paramos en café. El me da su abrigo y volvemos a correr. Mi casa no quedaba tan lejos así que llegaríamos "rápido". Al llegar entramos los dos.
-Traeré un toalla —el asiente—
Voy a closet y busco dos toallas. Vuelvo a la sala y le doy una a el. Le digo que subiré a cambiarme y él asiente. Subo y me quito toda la ropa mojada. Me pongo un pantalón de algodón que me queda pegado y una franela blanca pegada.
Bajo las escaleras y el está sentado donde lo dejé y envuelto en la toalla, pero estaba sin su camiseta. ¡Ay Dios! Ayúdame a controlarme.
-Ehh, lo siento —dice cuando nota mi presencia—
Abro la boca para decir algo pero la cierro al escuchar que estaban tocando la puerta. ¿Quién puede ser a esta hora? Dudo que sea Diana. La abro y es Carlos.
-Hola —dice cabizbajo—
-¿Qué haces ahí? Entra te va a dar un resfriado. —el entra—
-Vine a disculparme por como te traté y... —al parecer nota a Ángel— ¿Quién es el? —envuelve sus manos en puños—
-Es un amigo... Ángel... —Ángel nos mira—
Carlos y yo nos sentamos en el sofá del frente. Veo que se está poniendo un poco rojo. ¿Está enojado?
-¿Quién es él Ally? —me pregunta Ángel refiriéndose a Carlos—
Abro la boca pero Carlos me va a y habla primero —su novio— Yo Abe los ojos como platos.
-¡¿Qué?! Emm... ¡Ay por Dios! —digo—
-Esta bien... Al parecer todo lo que viene de ti es súper lindo, tu casa es muy linda igual que tú.
-Sí, MI novia es muy linda —dice Carlos pegándome a él de un tirón poniéndome entre sus piernas—
Me muevo un poco y creo que hice mal porque pude sentir su erección.
-Ally, creo que hablaremos otro día —dice Ángel levantándose—
Yo asiento y lo guío hacia la puerta. Se pone su camiseta, me devuelve la toalla y se va. Vuelvo a la sala echa furia. ¿Quién se cree Carlos para hacer eso?
-Te ves linda roja —dice Carlos y me enfurezco más—
-¿QUIÉN DEMONIOS TE CREES QUE ERES PARA HACER ESO? ¿QUÉ DEMONIOS TE PASA? ¿ERES LOCO O QUÉ? —le gritó—
- primero —enumera con sus manos— Carlos; Segundo, nada; tercero, Estoy loco pero, por ti...
Me quedo estupefacta al escuchar la última respuesta.
-¿Qué quieres decir?
El se levanta y se me acerca intimidante. El es más alto que yo y me hace ver súper pequeña. Yo retrocedo varios pasos pero la pared no me deja avanzar más.
-Me traes loco, Ally —me dice y pone una mano a mi costado—
Me agarra de la cintura apegándome a él. Nuestras caras están muy cerca.
-Carlos deberías irte...
Puedo salir de su agarre y subo corriendo a mi habitación entro pero el me agarra de la cintura pegándome a él. Me siento en la cama.
-Ally, de verdad me encantas, me traes loco. Solo imaginarme de que estás con otro. Ahg me hierve la sangre. No puedo soportarlo. Yo... yo te amo, Ally. Te amo como nunca he amado a nadie.
-Yo también Carlos. Pero...
-¿Por que siempre tiene que haber un pero? Yo te amo, Ally... Mucho
El se me acerca y hace que me acueste en la cama. El se posa encima de mi. El recuerdo de Leo encima de mi invade mi mente. No quiero terminar haciéndolo con Carlos.
Mi corazón va muy rápido, no se por qué demonios no puedo moverme. Todo esto me va dando vueltas en la cabeza. Yo de verdad quiero mucho a Carlos, pero nunca me lo he imaginado como algo más.
-¿Qué es lo que quieres, Carlos? —digo con la voz calmada—
Suspira —Quiero que seas mía, Ally. Mia y de nadie más...
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NOTA DE AUTORA:
Primero lo primero, chicos este es el último cap del maratón. Hay nuevo horario. Voy a actualizar los miércoles y domingos, solamente.Ahora, ¿A quien más le dio un ataque al corazón con lo que le dijo Carlos a Ally? A mi si🙂😂
Los amo, gracias por su apoyo❤️
-Mairelys
ESTÁS LEYENDO
Amor Bipolar.
RomanceEn el transcurso de nuestras vidas, siempre habrá alguien de quien nos enamoramos perdidamente. Dicha persona no siempre es la indicada. Este es el caso de Ally, una chica de 17 años que se enamora perdidamente de Leo, un chico de su nueva escuela...