"Haciendo que"
Después de una grandiosa cena y unas cuantas apuestas en el casino, los chicos y yo decidimos quedarnos en el parque, sentados en la grama para morir a consecuencia del intenso frio, pero supuse que era correcto comentarles sobre lo sucedido con Harry.
— ¿No suena algo fantasmagórico eso de la ropa extraviada al llover? Quizá era un chiste –Consideró Sophie.
— ¿Crees que lo sea? Es que no creo que ese sujeto sea de mentir, digo, no se notaba que lo fuese –Refuté.
— Pero Dave, tampoco el hombre parecía astuto, posiblemente alguien del personal le robe las prendas por hacerle gracia.
— Si, pero con el mito de la cabaña, sumado a que no sabemos que pasó exactamente y añadiendo lo de la cruz, puede ser posible que haya algo.
— ¡Patrañas! Aquí no hay nada, solo cinco chicos pensando idioteces –Añadió Natalia mientras frotaba sus manos.
Ciertamente quedé con algo de curiosidad, hay cosas que no encajan y quizá no lo noto, pero son... extrañas.
— Por cierto –Opinó Michelle observando a Kyle... ¿Por qué ya no usas tu móvil? Siempre te veo con él.
— Eh... bueno... pasa, que lo perdí.
Fue entonces cuando miramos directamente a Kyle impresionados.
— Pero, ¿Cómo dices? –Indiqué.
— ¡Sí! Es que... no lo encuentro desde que fuimos a la cabaña, pero no quise decirles nada, chicos.
— Ya era hora de que lo soltaras –Mencionó Natalia.
El resto de nosotros omitió su comentario y enseguida Sophie añadió algo que sentía que quería decir.
— ¿Y si lo dejaste en la cabaña?
— Eso lo he pensado, pero no estoy seguro de ello –Aportó Kyle.
— Es que es algo obvio –Respondió Sophie levantándose de la grama— si lo perdiste ese día, debe estar allí, debiste decirnos antes.
— ¡He! Alto allí, no pensaras ir de nuevo a esa cabaña, ¿o sí? –Mencioné levantándome.
— Por supuesto que sí –Expresó pateando la grama con emoción.
Yo estaba consciente de que ella quería regresar allí, pero ni loco volvería, con lo poco que conozco de ella, sé que sería capaz de ir allí en este instante. Cosa que yo no haré.
Insistió en que debíamos averiguar si el móvil estaba allí y así explorábamos la cabaña, pero entonces Natalia y Michelle se rehusaron a hacerlo, pero la intriga de Kyle era notoria, él quería ir allí. No podía dejar a las chicas solas, y estoy seguro de que Kele no intentará nada con Sophie, o eso creo.
— De acuerdo, si ustedes quieren ser unos locos suicidas, aventureros y sin sentido común, pues háganlo, yo... me quedaré con las chicas y aguardaremos por ustedes.
— De acuerdo David, como tú quieras –Expuso Sophie.
— No necesito que me cuides Dave, puedo ser muy independiente –Exhortó Natalia.
Michelle me observó y dejando salir una sonrisa, añadió; «por mi está bien, de igual manera tengo más frio que sueño».
Una vez que los chicos fueron a la cabaña y Natalia a la habitación para dormir, Michelle y yo decidimos caminar por las instalaciones. Me empieza a gustar aún más este lugar puesto que todo intenta ser casero, cómodo, sin lujos, pero con lo necesario. A medida que pasamos por cada uno de los pasillos, comenzamos a hablar de pequeños recuerdos juntos, era graciosa la manera de reír de Michelle, la típica chica cuya risa puede oírse a cuarenta yardas, no importa si tapa su boca. Decidimos luego de un buen rato, ir a por unos tragos, después de todo, apenas la noche estaba cobrando vida.
— Ellos son muy sociables, aunque bueno, te habrás dado cuenta lo insoportable que puede ser algunas veces Natalia –Indiqué refiriéndome a los chicos.
— Sí... ella comienza a ser irritable, pero Kyle es lindo –Señaló.
— ¿Te parece lindo mi amigo?
— Bueno, puede ser competencia para ti.
Definitivamente no, era obvio que Michelle trataba de seducirme a través de sus indirectas, pero consideré muchas veces antes de venir, este tipo de situaciones, y aunque ella es todo un encanto, tengo que admitir que las mujeres como Sophie son mis favoritas.
— No estoy seguro, el... es mucho mejor que yo en cuanto a chicas se refiere, yo solo soy un buen secuaz.
— Yo no estaría tan segura de ello.
Me asombré por su comentario y para evitar sentirme incomodo, le dije a Michelle que aguardase aquí para dirigirme hacia el baño. Mientras estaba allí, unos sujetos entraron y comenzaron a dialogar sobre unas chicas y el buen cuerpo que tenían, algo común entre hombres, pero luego de ello comenzaron a preguntarse si ellas estaban listas.
— No lo sé, posiblemente...
— ¿Lo discutimos con Don Vicente?
— ¿Estás loco? Primero vamos a elegir nosotros y le dejamos la menos apta a él.
No tengo idea de lo que hablan, pero... ¿Quién demonios es Don Vicente?
Actué como si no les hubiese escuchado hablar y salí de allí actuando natural, aunque a decir verdad quedó en mí ese nombre, pudiese ser uno de los dueños, o parte de los empleados, pero era muy peculiar lo que hablaban.
— ¡Felicidades!... me hice vieja esperándote, David –Señaló Michelle.
— Lo siento, es que me quedé en el baño escuchando a unos sujetos que hablaban sobre unas chicas y un tal "Don Vicente".
— ¿Vicente Veranti? –Respondió rápidamente.
Así, que sabe quién es...
— Supongo, ¿Cómo sabes de él? –Acercándome hacia ella.
— Me he tomado la tarea de conocer a varias personas, y mientras que ustedes caminan, yo socializo.
— ¡Diablos! Quien diría que tú conocerías personas, y mucho menos en este lugar, te mereces un premio, Srta. "No le hablo a nadie" –Comenté divertido.
— ¡Ja, ja! Muy gracioso, pero si lo hago, y seguiré haciéndolo.
Luego de un rato, decidimos ir a bailar a una de las salas, era una especie de discoteca al aire libre, con buena música latina y esencial para bailar, claro, yo sabía bailar, pero, no de la misma manera en la que ella lo hacía. Mientras nos divertíamos, un chico me pidió bailar con ella, a lo cual accedí y regresé nuevamente a la mesa para observarlos. Pero al mirar al fondo, a la derecha de ellos, unos sujetos observaban de manera extraña a Michelle, comentaban acerca de algo que la involucraba, estoy seguro de ello por la manera en que el hombre de cabello largo y cola de caballo la señalaba.
— Que excelente canción –Resoplando—, me encanta como baila el chico, bueno, se llama Fernando y dijo que le gustó como bailé –Opinó divertida.
— ¡Genial! Ya tienes unos cuantos admiradores entonces...
— ¿Admiradores?
— Sí, aquellos sujetos te miraban... muy raro, Michelle –Mencioné señalando con mi botella de cerveza a los dos sujetos del fondo.
— Atraigo miradas entonces –Exhortó divertida.
— Tal parece que sí, oye, ¿te parece si vamos a la habitación y vemos si los chicos llegaron?
— No vamos a coger, Dave...
¿Pero qué diablos?
— ¿Qué?, no... no hablaba de...
— Descuida, estoy bromeando –Expuso golpeando mi brazo—, vamos a ver si ya llegaron.
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The Factory Behind The Forest © (La Fábrica Detrás Del Bosque)
Mystery / ThrillerDavid Montero es un joven graduado en la universidad de Gleendale en las afueras de Arizona, quien decide realizar un viaje para disfrutar de unas vacaciones en su país natal (Venezuela) en compañía de su amigo Kyle Escobar y la novia de éste; Natal...