The Factory Behind The Forest © (La Fábrica Detrás Del Bosque)

Encuentro 11 "Dos De Los Tres"

"Cada una"

— Sé que esto es una locura –Deteniendo la conversación mientras que el mesonero recogía los platos de nuestra mesa.

— ¡Gracias! Muy amable –Respondí al sujeto que luego devolvió mi cortesía como si estuviese intrigado por lo que estábamos hablando porque miró de una forma muy extraña a Sophie.

— Me miró algo extraño, ¿no? –Indicó Sophie.

— El amor, preciosa, el amor –Consideró Kyle divertido.

— ¡Seguro!, en fin, sé que esto es una locura, pero según he leído; cuando entras a un lugar y empiezas ver cosas inexplicables, o de alguna manera, algo que no todo el mundo ve, y que no es considerado "normal", pues, se dice que una cosa de otro plano, quiere decir algo, o alguien –Explicó en voz baja, mirándonos como si se tratase de un secreto.

— Hablas entonces, ¿de qué hay fantasmas allí que quieren que hablemos con ellos y esas cosas? –Señalé.

— No lo sé –Rascando su nariz, respondió Sophie—, solo sé que debemos averiguar que sucedió con ellos, y descubrir si lo que dicen es cierto.

— Bueno... si eso ha de ser así, entonces, vamos a la cabaña y averigüemos de donde proviene aquel teléfono del que habla Dave –Añadió Kyle, levantándose de la silla.

Me siento algo incómodo regresando a esa jodida cabaña, es extraño todo esto, no entiendo cómo diablos acepté la propuesta de alguien a quien conozco poco, pero mi suspicacia es algo que no podré eliminar nunca. Llamé a Michelle para mencionarle lo de los chicos, pero no contestó, y entonces deduje que podría estar en la piscina, aunque con lo frio que está el ambiente, lo dudo. A medida que nos acercábamos nuevamente a la cabaña, el viento era más fuerte, las hojas de los árboles se estremecían causando esa típica sensación de incomodidad e incertidumbre donde pareciese que algo va a pasar.

— De acuerdo Dave, ¿Dónde colocaste el teléfono? –Exhortó Sophie abriendo la puerta principal de la cabaña.

— No lo coloqué, lo encontré allí –Señalando cerca de la chimenea.

Esto tenía que ser una broma, ya no estaba.

— ¿Qué sucede?, ¿Dónde está? –Sostuvo Sophie.

— ¡Joder!, estaba allí...

— Yo no veo nada amigo –Sumándose a la conversación, dijo Kyle.

— ¡Vamos chicos! No estoy loco, vengan, busquemos en la cocina.

Pero al llegar tampoco estaba allí. Los chicos opinaban que estaba loco, no me creían en lo absoluto; «yo estoy consciente de lo que vi». Repetía una, y otra y otra vez, pero seguían sin creerme.

— Pero aquí no hay nadie, esto tiene años abandonado, cariño –Explicó Sophie, dirigiéndose a la puerta.

— ¡Lo sé!, pero estoy muy seguro de que había un teléfono y que zona...

De pronto un ruido se escuchó en la segunda planta, como si un cuerpo hubiese sido tirado al suelo.

— Eh... ¿okey? –Expresó Kyle.

— ¿Qué fue eso? –Comentó Sophie.

Yo quería que sucediese algo para que ellos me creyesen, y ciertamente aquel ruido podía ser la variable que necesito, así que fuimos a la segunda planta para investigar.

— Quizá fue algún animal que cayó, porque aquí no hay nada –Expuso Kyle.

— Yo también creo lo mismo –Indicó volteando hacia la puerta, lugar donde yo me encontraba parado.

Pero, de pronto, sentí que alguien estaba detrás de mí.

— Eh... Dave, hay alguien detrás de ti –Señaló Sophie.

— ¿Quién? –Asustado ante el comentario y volteando lentamente.

— ¡Oh mierda! –Añadió Kyle al ver al sujeto detrás de mí.

Volteé, pero no había nada.

— Señores, creo que será mejor si nos vamos de aquí –Opinó Sophie.

Rápidamente los chicos salieron de allí como si hubiesen visto a un fantasma, pero no quisieron decirme nada en todo el camino de regreso a El Jardín, me sentí algo extraño porque no sé qué pudo estar detrás de mí, pero lo que fuese, no le gustó mucho a Kyle, ni mucho menos, a Sophie, los cuales estaban totalmente empalidecidos durante el camino, sin mencionar una palabra, inertes, solo caminando hasta El Jardín.

— ¡Ya basta! ¿Pueden decirme que rayos sucedió allí? –Exclamé al notar que no me querían explicar aun estando en la habitación.

— ¡Relájate David!, nosotros tampoco entendemos lo que sucedió –Dijo Kyle tomando asiento en la pequeña sala de la habitación.

— ¿Pero joder, que fue lo que vieron? –Insistí.

— Un niño... oculto detrás de ti... eso fue lo que vimos –Respondió Sophie con la mirada pérdida.

— Un... ¿Un niño dices?

— Si amigo, un niño.

— ¡Ja!, qué maravilla, dijeron que era un sujeto, pensé que era eso.

— No, no lo era, era un niño, y tomaba tu mano con miedo, como si no quisiera apartarse de ti... fue aterrador, jamás he visto algo así –Suspiró, dejando una leve sonrisa, estaba totalmente impresionada.

Mi piel estaba erizada, nada más imaginarlo me causaba miedo, ¿en qué diablos nos metimos?

— ¿De acuerdo, por qué todos están perplejos? –Dijo Michelle al entrar a la habitación—, ¿Qué ocurre?

— Eh... a ver hermosa, como te lo explico, eh... resulta que algo pasa en la cabaña, lo quisimos averiguar y nos hemos llevado el susto de nuestras vidas, porque nuestro gran amigo David –Apuntando hacia mí con su mano izquierda—, tuvo una especie de encuentro paranormal.

Luego de que Kyle dijo aquello, miré a Michelle y levanté mi mano irónicamente fingiendo un saludo, para intentar alivianar el ambiente.

— ¡Rayos! Tétrico, ¿no es así? Aunque me hubiese gustado estar allí, eso me llama mucho la atención –A lo cual Sophie me miró con cara de "Te lo dije".

Buscamos a Natalia para explicarle todo, pero ella es del tipo de personas que no cree absolutamente en nada que tenga que ver con situaciones de "otro plano", quizá sea por su carrera —Estudia medicina—, por lo tanto, al contarle, se negó a que fuese algo lógico lo que planteaban los chicos.

— ¿Quieres ir a averiguarlo amiga mía? –Indicó Sophie extendiendo su mano hacia ella.

— Está bien, pero solo para demostrar que se equivocan, eso tiene que ser falso, los fantasmas no existen.

— Tengo una idea –Levantándome del sofá—, averiguar de qué trata todo esto, preguntémosle a Veranti, seguro él sabe de esto.

— ¿Estás loco?, no podemos, va a saber que estamos tramando algo, no podemos hacer eso –Refutó Sophie.

— Pero podemos intentarlo, yo lo haría para intentar –Sostuvo Michelle.

— O podemos preguntarle a "Harry El Gordo" –Sumó Kyle bebiendo un vaso con agua.

— Es "El Gordo Harry", bueno, entonces hagamos lo siguiente; ustedes –Dije señalando a las chicas— le preguntan a Veranti, y nosotros le preguntamos a Harry si sabe algo de esa cabaña, ¿de acuerdo?

Vayan ustedes, solo avísenme cuando tengamos que ira la cabaña, chicos ¿está bien? –Comentó Natalia dirigiéndose al baño.