The Factory Behind The Forest © (La Fábrica Detrás Del Bosque)

Encuentro 13 "El Ligero Contacto" (Primera Parte)

"Palabras"

— Es muy delicado el tema, ustedes dos me han caído muy bien –Indicó Harry mientras dejaba las herramientas en el establo—, y por eso merecen saberlo ya que parece interesarles las situaciones ajenas, esas que nunca fueron explicadas.

¿Entonces significa que hay algo detrás de toda esta historia?

— Adelante, si no te importa, tomaré esta manzana y me sentaré por aquí –Añadió Kyle mientras se postraba cerca de un caucho de tractor.

— Esa familia era muy trabajadora, de verdad que sí, ellos fueron una de las primeras familias en habitar el sendero. Vivían de la venta de los granos de café y les iba tan bien, que incluso construyeron una cabaña por aquí mismo, colina arriba.

— ¿Y qué ocurrió? –Indagué recogiendo una vara de paja del suelo.

— Ellos tenían conflicto con los dueños de este lugar, con los Veranti, uno quería las tierras del otro, o algo así, y una vez ocurrió un fuerte conflicto entre familias que llegaron a los golpes.

— ¿Y luego qué? –Refutó Kyle.

— Luego de eso...

— Harry, ¿Por qué te detienes? –Mirándole extraño comenté.

Estaba sin habla, cerró su boca como si alguien lo ordenase, no entendía el motivo por el cual lo hizo, pero definitivamente, algo le atemorizó.

— Buenas noches, lindo clima, ¿eh? –Indicó el sujeto al llegar a nosotros.

— ¿Cómo está, Don Vicente? Buenas noches, ya estaba terminando, oyó –Exhortó Harry un tanto nervioso.

— Tranquilo, aunque creo que te están esperando en el caney, por eso vine a notificarte.

No me parecía que haya venido solo a eso.

— Ustedes deben ser nuevos huéspedes...

— Así es, soy Kyle y él es David, un placer señor...

— Encantado, soy Humberto Vicente Veranti, el dueño de éste precioso lugar llamado "El Jardín", algunos trabajadores me dicen Vicente –Respondió con un fuerte apretón de manos y una sonrisa cordial.

No acostumbraba a ver tanta cordialidad, y para ser el dueño de todo esto, era joven –Esperaba que fuese un anciano—, y robusto, lleva unos jeans negros y una franela blanca, combinado con unos zapatos blancos, un poco a la moda diría yo. Dimos un breve recorrido con Humberto por buena parte del establo, el sujeto nos comentó que a pesar de que Antonio Veranti fuese su medio hermano, él, está a cargo de todas las tierras en El Jardín. Comentó que muy poca gente venía aquí por lo lejos que queda, pero que, sin embargo, se sentía a gusto con las personas que visitaban el lugar.

— Entonces si usted es el dueño, usted debe saber –Comentó Kyle.

— ¿Saber qué cosa? –Expresó Humberto.

— No es nada –Añadí divertido—, no se preocupe.

Rápidamente Kyle entendió por qué respondí de esa manera y me siguió la corriente. Pero Humberto, también lo notó, de eso estaba seguro.

— Y díganme, ¿Cuánto tiempo suponen quedarse? No es para saber cuánto será la cuenta, sino... por curiosidad –Dejando salir una risa.

— Aún no lo sabemos, pero nos gusta mucho el lugar –Señalé.