Luego de hacer equipo para lavar los platos, fuimos a su habitación para que finalmente me devolviera la pulsera, que era la razón por la cual estaba ahí.
- Creo que no quiero entregártela - me dijo Evan sujetándola entre sus manos
Yo me había lanzado de espaldas sobre su cómoda cama
- ¿Por qué no?
- Temo no volver a verte después de hacerlo - admitió mirándome a los ojos pero con una expresión bromista
Entre que intenté tomarlo como una declaración a la ligera y entre que me dejo a qué pensar, zafé de la situación.
- Deberías sentirte feliz por eso, ya no tendrás que preocuparte por ir a buscarme a fiestas
Eso no lo sabemos aún.
- ¿Qué estabas pensando cuándo recibiste esa pastilla? - me preguntó al rato después
- Es que no estaba pensando, Evan
Me gustaba decir su nombre, con mi voz se escuchaba increíble, al igual que todo el resto de las palabras.
- Me gustaría que prometieras que no vas a aceptar una pastillas de nuevo, ya que no te voy a volver a ver
- Te lo prometo, y me lo prometo a mí misma - esa era una buena idea
Me entregó la pulsera y al instante me la coloqué en mi tobillo derecho. Me levanté y seguí explorando su curiosa habitación. Él se acercó al escritorio y tomó uno de sus cuadernos, sin que me lo ofreciera se lo quite de las manos
- Así que estudias diseño industrial - recordé en voz alta
Abrí el cuaderno y lo comencé a ojear, luego de una minuciosa inspección y un juicio al respecto de sus dibujos ya hecho, llegue a uno que me dejo sin aire. Era el mar, retratado de una forma excepcional con todas sus maravillosas tonalidades y con toda su característica furia que me encantaba.
- ¿Cris? - me llamó Evan sacándome de mis pensamientos - ¿Estás bien?
- Sí, es que... wow, la verdad, debo decirte que jamás había conocido a alguien que se hubiera equivocado tanto al elegir una carrera
Soltó una carcajada
- ¿No te gustan mis dibujo?
- No es eso, es que considero que esto debería estar en un museo, y no en un tonto empaque de alguna tonta marca de algún... no sé, tonto producto
Me observaba
- La verdad es que me gusta mucho - admití sin problemas - sobre todo este - susurré refiriéndome al paisaje marino
¿Te estás haciendo esto otra vez? Somos peor de lo que pensé.
Tomó el cuaderno y arrancó la hoja con el dibujo, luego me lo extendió
- Es tuyo
Lo recibí con mucha emoción (interna por supuesto). Lo observe aún con más amor e idolatría.
Ya en serio, para.
No puedo me respondí... me duele.
Tienes que volver. AHORA.
- Lo acepto, pero debes firmarlo - improvisé
Luego de que lo hice y lo guardé en mi bolsa decidí que era momento de irme. Evan no me retuvo y en cambio me fue a dejar hasta la puerta.
- Bueno, hasta nunca más si es que tienes suerte - le dije
- ¿Por qué crees que eso sería buena suerte?
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Quiero Salvarte (COMPLETA)
Teen FictionCris está en el peor momento de su vida, siente que su mundo se desmorona y busca refugio en las fiestas de desconocidos y todos los bares que se encuentren en su radar, lo que la lleva a ahogarse en alcohol y drogas. Pero no se confundan, esta his...