Broken [Niall Horan FanFiction] *Español*

Capítulo Doce.

Ariella's POV

Me desperté con el glorioso olor a tortitas. Qué maravillosa manera de despertarse por las mañanas. Me levanté y fui a la cocina para encontrar a mi novio cocinando tortitas y tarareando una melodía familiar.

-Buenos días.- Dije.

-Buenos días bebé.- Dijo Niall antes de besarme.

-Gracias por hacerme tortitas.- Dije mientras me ponía detrás de él y le abrazaba por la cintura.

-Es por tu cumpleaños, bebé. Feliz decimoctavo cumpleaños, Ariella.- Dijo Niall.

-Gracias.- Le dije.

-No te quiero meter prisa, pero deberías comer. Tengo que llevarte a casa para que los chicos y yo podamos terminar de planear algo por tu cumpleaños...- Dijo Niall.

-¡A sus órdenes, capitán!- Dije mientras le saludaba.

Me comí mis tortitas y después Niall me llevó a casa rápidamente. Me dio un beso en los labios y después se fue tan rápido como llegó. Cuando entré en la casa de Anne, ella hizo un gesto y Gemma me vio y me llevó escaleras arriba.

-¡Feliz cumpleaños Ariella!- Dijo ella.

-Gracias Gemma.- Dije.

-En realidad se supone que tengo que mantenerte fuera de casa, así que quizá deberías ir de compras o algo. Puedes coger mi coche.- Dijo Gemma.

-Oh, vale. Antes me ducharé y esas cosas.

-De acuerdo, ¡pero date prisa!- Dijo Gemma dejando mi habitación.

Tomé la ducha más rápida de mi vida y decidí que me dejaría el pelo suelto para que se secase con el aire. Rápidamente me puse unos vaqueros ajustados, unas sandalias y un top de flores. Me aparté el pelo mojado y me puse un poco de lápiz de labios. Gemma me apresuró para que saliera de casa y me dio sus llaves. Bueno, ¡supongo que hoy no me quería nadie cerca! Conduje hasta que descubrí un centro comercial. Aparqué el coche y decidí ir a ver algunas tiendas.

Entré en el centro comercial y descubrí una tienda de música a la cual entré inmediatamente. Estaba deambulando por los pasillos mirando los CDs hasta que tropecé con alguien y un montón de CDs cayeron al suelo.

-¡Lo siento mucho!- Dije, poniéndome de rodillas para recogerlos.

-¡No pasa nada!- Dijo la chica cuando los recogió también.

Cuando ya recogí algunos, se los devolví y ella me dio las gracias. La chica era de una estatura media, con un pelo castaño, ondulado y largo. Tenía los ojos de color marrón claro y llevaba un vestido azul muy bonito, simple con un cinturón marrón y unas sandalias.

-¡Me encanta tu vestido!- Le dije.

-¡Gracias! A mí me gusta tu camiseta.- Dijo ella.

-¡Gracias! ¿Trabajas aquí?- Le pregunté.

-Eh, sí, trabajo aquí. Ahora mismo estoy a punto de irme.- Dijo ella.

-¿Cómo te llamas?- Le pregunté.

-Sally Parker. Es un placer conocerte eh..-

-Ariella Rayne.- Le dije mi nombre.

-Encantada de conocerte, Ariella. Eres de América, ¿puede ser?- Preguntó Sally.

-Sí, soy de allí. Lo sé, mi acento lo indica.- Le dije.

Después de que Sally saliera del trabajo, dimos una vuelta y fuimos a una tienda de dulces unas cuantas tiendas abajo de la tienda de música donde ella trabajaba. Hablamos sobre una gran variedad de cosas, y descubrí que su personalidad era muy valiente.