Locked ; Rocksan || ASTRO

Lesión.

⚠TRIGGER WARNING⚠

Este capítulo tendrá escenas explícitas que pueden llegar a herir la sensibilidad de las personas. Por favor no leas este episodio si crees que te puede generar algún trauma y/o tener una recaída, si eres una persona que pasó por algún hecho traumático o simplemente eres muy sensible.

Nota: No le hagan mucho caso a la advertencia de arriba 😂 No va a ser algo taaan fuerte como aparenta, pero me veo en la obligación de dar esta advertencia por si las dudas. Ahora sí, los dejo con la lectura.

(***)

— ¡Se me ocurrió un paso nuevo para nuestra coreografía! —Rocky habló con emoción— Pero ahora tengo cita con Dongmin. Luego de ello te lo enseñaré.

Sanha asintió sonriente y saludó a Rocky con la mano antes de que este se marchara a su sesión con su psicólogo.

Aquellos cuarenta minutos en los que Rocky desaparecía en el consultorio de Dongmin, eran los más largos y aburridos para Sanha, quien se quedaba solo durante ese tiempo.

Decidió ir al hall a ver la televisión. A esa hora nadie más iba además de una viejecilla que también miraba la televisión para no aburrirse, pero esta nunca entabló conversación con Sanha, así que él podía ir cómodamente sabiendo que no tendría que interactuar con nadie.

Era la hora indicada para ver la televisión, pues a esa hora pasaban Bob esponja, y Sanha adoraba esa caricatura.

Caminó por el pasillo de las habitaciones y desde lejos notó que el hall estaba vacío, perfecto para él. Con emoción apuró el paso mirando con amor al sofá rojo que allí había, el cual era incluso más cómodo que su propia cama.

Pero su distracción hizo que no se percatara de una audaz So Eun, quien había puesto su pie en el camino de Sanha, haciendo que este se tropezara y cayera.

El sonido que produjo su cuerpo al estamparse en el suelo, captó la atención de todos los pacientes que allí pasaban. La multitud clavó sus ojos en el pelinaranjo, haciéndole sentir a este como si fueran filosas dagas incrustándose en su corazón.

Todos lo estaban mirando, So Eun reía levemente y se oyó algún que otro susurro inentendible para el oído de Sanha.

Rápidamente Sanha se levantó con dificultad, ya que nadie, para la suerte del menor, se acercó a ayudarlo.

Miró de reojo a So Eun, quien tenía una expresión divertida en su rostro. No esperó más para salir lo más rápido de allí, con su corazón corriendo una carrera, sus mejillas sonrojadas y sus ojos aguados.

Lo único que deseaba en ese momento era que la tierra lo tragase y todo el mundo se olvidara de que alguna vez Yoon Sanha existió.

Olvidó por completo su destino hacia el hall de entrada, y desvió su camino hacia el patio trasero, donde no había nadie, y eso era lo más parecido que había a que la tierra se lo tragara. Allí por fin liberó sus lágrimas, las cuales cubría con las mangas de su sweater.

Caminó con su vista nublada por sus lágrimas aproximándose a la piscina, y gracias a esto, tropezó nuevamente pero ahora debido a una roca que había en el césped. Por suerte las clases de baile que tuvo con Rocky ayudaban a su equilibrio y no cayó al suelo, mas su corazón se dio un fuerte susto, haciéndolo latir el doble de rápido.

Con furia, el adolescente estaba por patear aquella roca lo más lejos posible pero al verla sus ojos se iluminaron de cierta manera.

Se agachó para recogerla, tenía la forma perfecta.