30 Días OTP Challenge - Akakuro

♥ Día 17: Acurrucados en la cama ♥

-Akashi-kun, por favor llevame los platos que ahora los lavo.

-Vale ya vooooy.

Escuchando como Akashi llevaba los platos, Kuroko abrió el grifo y poco a poco fue lavando los platos de la cena.

-¿Y que tal estuvo hoy la cena?-Pregunta.

-Como siempre, deliciosa.

-Algun dia tendrás que aprender a cocinar, Sei.

-¿Para que si te tengo a ti?

-Ay...

-Venga Tetsuya, sabes que tanto nuestros hijos como yo adoramos tu comida.

-Eso es porque nadie de vosotros sabe cocinar.

-No digas eso... Y necesitas reconocer que cocinas bien.

-Ya paremos de hablar de este tema...¿Me ayudas a limpiar los platos y cubiertos que quedan?

Akashi no dijó nada y se puso a hacer la tarea, los dos juntos terminaron de limpiar y lavar los platos, cubiertos y vasos. Fueron a darse un baño juntos, y después de ponerse un pijama, Kuroko se dirije hacia la habitacion de sus pequeños diablos.

-Kane, Hitoshi, es hora de dormir.

-Mamá, ¿nos lees un cuento?

-Claro..¿Cual queréis que os lo lea?

-Quiero que nos leas tu historia!-Gritaron emocionados los dos.

-Pero no es para vuestra edad...Además, el genero de romance tampoco es algo para vosotros, o al menos por el momento...

-Mamáaaaaa...

-Vale vale...Os lo leo. Pero os adelanto una cosa, aun no tengo hecho ni siquiera el primer capitulo.

-Nos da igual, queremos solo escucharlo.

-Entonces comienzo ya: ''Ultimos 365 dias a tu lado. Prólogo: Los dos se amaban demasiado como para decir la verdad sobre una de las mas dolorosas realidades, el menor de los dos, sufría en secreto por una enfermedad mortal, que tenia como tiempo 1 año en ese entonces. Todos sabemos que el mundo no es de color rosa, todos sabemos lo doloroso que es ver al amor de tu vida morir lentamente, aun sin saberlo. Exacto, él le mintió. Le mintió a su amado, le dijó que no tenia nada, era algo pasajero...''.-Kuroko sorprendido, mira a sus hijos, los cuales estaban profundamente dormidos. Era increible que pudieran dormir con ese prólogo.

Al final, les dio unas buenas noches con un beso en la frente a los dos.

Luego fue a su habitacion, esperando ver a su pareja dormido. Al entrar, ve a Akashi despierto leyendo un libro, levantando la vista hacia él cuando entra y cierra la puerta.

-Pensaba que estabas dormido,Sei.

-¿Como dormir si no te tengo al lado?

-El azucar no es bueno por las noches.

-Pues el picante esta bien.

-Hoy no.

-Me lo esperaba.

Nuestro Lord se estiró en la cama, cerrando la luz.

-Buenas noches.-Le deseó a su pareja.

-Buenas noches.

Despertó en una camilla blanca, y se vió a si mismo por el reflejo de la ventana. Habia pajaros en el cielo y la luz del sol dañaba los ojos. Sentía su cabeza caliente y se llevó la mano a la frente, y al notarlo, tenía fiebre.

Escucha a alguien entrar, ve que es su amado pelirojo. Ve como abre la boca y comienza a hablar, pero él no consigue entender ni siquiera una letra de lo que decia.

Poco a poco ve como el negro comenzaba a inundar sus ojos, viendo como su pelirojo le tomaba de la mano y le suplicaba algo, algo que no logró entender tampoco.

Abrió los ojos, la habitacion seguia como antes, y escuchaba la respiracion tranquila de su Seijuuro.

Una pesadilla, pensó.

Notaba pequeñs lagrimas bajar de sus ojos, tenia miedo de que eso realmente ocurriera, tenia miedo de perder todo, perder sus hijos, perder sus amigos y sobretodo, perder a su pelirojo.

Este escuchó pequeños sollozos provenientes a su lado, abrió lentamente los ojos, encontrándose a su peliceleste llorando.

-Cariño..¿Que sucede..?-Le pregunta.

Este no contesta, pero el pelirojo lo intrepeta como si hubiera tenido una pesadilla, eso le sucedia siempre cuando lloraba en plena madrugada.

-Ya ya..Estoy aqui contigo.-Dijó, calmandolo dando un dulce beso en la nariz.

-Tengo miedo..Sei..-Dijó al final.

-¿Miedo a que?

-A perderte...

-Sigo aqui..Y seguiré aqui hasta que tu me abandones.

-Sabes que nunca te abandonaré...

-Por eso.

El pequeño sonrió levemente, aunque seguia teniando miedo de que este desapareciera de un momento para el otro como en el sueño. Hasta que sintió los brazos de su amado rodearle, se acurrucó en su pecho. 

-Dulces sueños...

El peliceleste notaba el aliento de su pareja bufar levemente en su pelo, eso de alguna manera le tranquilizaba. Esta vez, cerró los ojos como siempre, sin soñar ninguna pesadilla.

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Sigo sin entender como puedo escribir cosas crueles y cosas dulces a la vez :v

Seguramente es debido a mi bipolaridad... Nah, no soy bipolar, para nada :D

Vale, paro de hacerme la tonta.

Este dia de momento para mi tiene una gran importancia, ya sabréis el porque en el futro :v

El libro de Kurokochi se me ocurrió mientras iba escribiendo, asi que lo introducí..

¿Que les pareció :D?

Gracias por leer,

¡sayonaraaa!