Si Kuroko tuviera que elegir con qué ropa ir a ese tipo de situaciones, iría con lo de siempre. Una camiseta o sudadera y directo para el lugar. Pero parece ser que no es la opción más correcta, socialmente hablando.
Fue hacia el estudio de Akashi, tocando la puerta antes de entrar. El pelirrojo se gira al instante cuando oye que él entra, dejando la faena que tiene entre manos, para después, dirigirse sonriendo a Kuroko:
—¿Necesitas algo, Tetsuya? —Cada vez que el pelirrojo hace de sus actos tan natural, Kuroko nota un cosquilleo recorrer por todo el cuerpo. De otra persona no se esperaría algo así, dejando cualquier cosa por él, aunque si hubiera, ninguno sería estaría tan capacitado como su pelirrojo. Aunque en este caso posiblemente esté exagerando un poco, igual no estaba haciendo algo importante.
—Hoy tenemos que ir a la boda de mi primo, y... Después de ver mi armario, no hay nada adecuado. ¿Me dejarías llevar algo tuyo?
—Claro, puedes hacerlo incluso sin pedir permiso. —Kuroko asintió para dirigirse de nuevo a la habitación. No es como que nunca haya llevado algo de su pareja, al contrario, en varias ocasiones ha tenido que usar ese método para no lucir siempre con el mismo traje. Primero porque no le gusta ese tipo de ropa y por la misma razón no compraría tropecientas que no se diferenciarían a larga distancia. En cambio Akashi es diferente, por cada cosa parece tener la ropa más indicada, quizá incluso tiene para ir al baño y para salir del baño.
Pensando en eso llegó delante del armario sin darse cuenta, dentro había lo habitual de Akashi, camisas; alguna camiseta que luciría incluso formal puesto en el pelirrojo; sudaderas, cómo no; pantalones, jeans... básicamente todo tipo de ropa. Igual tampoco estaba buscando un traje, la ropa de su novio era adecuada para casi todo tipo de ocasiones, así que con cualquier camisa blanca bastaría.
Cogió uno al azar, sea por suerte o por instinto, en poco tiempo ya se había desvestido y se puso la afortunada camisa. También afortunado él que Akashi fuera de casi las mismas tallas, le iba algo ancha, pero tampoco lucía como si se hubiera puesto una camiseta de Murasakibara.
De repente se le cruzó algo que, normalmente, considera como enfermo.
Levantó un poco aquella pieza, llegando hasta cubrir medio rostro. Lentamente el olor a Akashi le comenzó a inundar, como cuando se despierta por las mañanas entre los brazos del pelirrojo, como cuando están lo suficientemente cerca, como cuando van en busca del uno al otro pidiendo cariño. En resumen, ese olor le era familiar, pero aunque lo tuviera siempre cerca, nunca le sería suficiente.
Al tener esa idea dejó el acto, se estaba considerando realmente un pervertido mental. Por otra parte también está avergonzado, si Akashi lo pillara haciendo eso, seguramente se reiría y a la mañana siguiente, si se despierta entre su aroma, diría lo más vergonzoso que se le cruzara por la mente.
Igual, si Kuroko tiene una atracción hacia el olor del pelirrojo, Akashi tiene también algo con ver al peliceleste rojo como un tomate.
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Yareyare, vamos a ver.
Llevo desde el año pasado con esto sin actualizar :)
Mis más sinceras disculpas
c: Grazie por leer ahre, aunque sea uno bastante corto, pero algo es algo (?)
PD: KUSUO TE AMO, ERES PERFECTO
PD2: ¿Nadie de aquí ha visto Saiki Kusuo no Psi-nan? :')
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30 Días OTP Challenge - Akakuro
FanfictionLo que dice el título, serán 30 relatos sobre el ship de Akakuro. ADVENTENCIA: Los primeros 30 dan cringe, lean los últimos ;;