Kōki se reencuentra con su viejo amor.
Ese reencuentro traerá más de un problema, y saldrá a la luz un par de secretos.
10-05-2018 #4 en AkaFuri
20-05-02018 #8 en Akafuri #1 en Akashi
Seiki Gold esperaba impaciente la llegada de su padre. Al fin lo conocería.
Kōki miró a su hijo. Seiki se miraba tan tierno mientras esperaba a Akashi.
—Cariño. Ve a tomar un baño. Ellos no tardan en llegar.
—Sí, Papi.
Kōki sonrió al verlo correr a su habitación.
—No tardan. ¿Quieres que te acompañe?
—Claro. No quiero que algo se salga de control.
—Entiendo.
Kōki sonrió al sentir su cabello siendo revuelto. Nash siempre le hacía eso.
—¿Papá y Kaori ya saben que vienen?
—Si. Ninguno está feliz por mi decisión.
—Yo tampoco lo estoy. Pero quiero ver feliz a Seiki.
Kōki asintió y siguió preparando el postre favorito de su hijo.
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Masaomi y Seijūrō se dirigieron a la dirección que Kōki había enviado.
El chofer se detuvo frente a una hermosa casa de fachada clásica y terraza en la parte superior.
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—Es preciosa.
Seijūrō asintió dándole la razón a su padre. Descendió del auto y tocó el timbre. Por la ventana Nash Gold se asomó, y pronto salió a abrirle la puerta.
—Pasen.
Cruzaron la pequeña puerta y esperaron a que Nash los guiará.
Entraron a la casa y miraron la decoración, sencilla pero elegante.
—Bienvenidos. Siéntense, Seiki no tarda en bajar— dijo Kōki antes de guiarlos a la sala.
Entraron a la sala. Algunos libros estaban en el piso.
Kōki levantó los libros y los dejo en una esquina.
—Toma. Es un cheesecake de fresa.
Los ojos de Koki brillaron —Gracias.
Observaron al castaño alejarse, detrás de él iba Nash.
Seijūrō miraba a todos lados buscando un indicio de su hijo, y nada.
Kōki regreso y se sentó frente los Akashi.
—¿Cómo fue el embarazo?— preguntó Seijūrō.
—Fuera de la amenaza de aborto, bien. No tuve mareos ni náuseas. Fue un embarazo tranquilo— acarició su vientre —. Su primer movimiento fue a los 5 meses exactamente. Me asusté.
A Seijūrō se le estrujó el corazón. Le hubiera encantado estar presente. Vivir cada momento.
—Nació el 22 de Enero, a las 6:32 AM.
—Papi.
Miraron y una mano blanquecina hacia señas para que se acercara.
El corazón de Seijūrō comenzó a latir más rápido al ver esa mano.
Kōki se levantó y se dirigió hacia su hijo. —¿Qué pasa amor?
—¿Quién es ese señor? — preguntó, tímido.
Kōki sonrió y le acarició el cabello —Es tu abuelo.
El niño asintió y miró nuevamente a las persona.
Ambos Akashi miraron asombrados al niño. Era muy parecido a Seijūrō pero en vez de pelirrojo era castaño y tenía un pequeño mechón rojo. Sus ojos era rojos y de bordes dorados, dándole una mirada única.
—H-Hola... — susurró a ambos adultos.
—Hola— Seijūrō se levantó rápidamente y se acercó al niño. Los ojos rojos lo miraban de forma curiosa —Soy Akashi Seijūrō. Soy...
—¡Papá!— sonrió, y se abrazó al pelirrojo; sus pequeñas manos se aferraron a la cintura del mayor.
Seijūrō se soltó de su agarre para poder ponerse a su nivel y abrazarlo. Sollozó mientras su pequeño se aferraba él.
Kōki limpió sus lágrimas. Lágrimas que no pasaron desapercibidas para Masaomi.
—¡Al fin!— Seiki sonrió —. Deseaba conocerte.
Seijūrō se conmovió y abrazo nuevamente a su hijo.
Seiki era su hijo. Jamás lo dejaría ir.
Seiki se separó —¡Tengo mucho que contarte papá!
Masaomi observó la interacción. No se sorprendió cuando su nieto paso del japonés al inglés sin darse cuenta. Estaba hablando con Seijūrō con bastante fluides.
Sus ojos brillaban con tanta emoción como si llevará año esperando el momento de conocer a Seijūrō.
Entonces miró a Kōki... ¿Desde cuándo Kōki le había dicho la verdad a Seiki?
