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--Dante, Dante, Dante, Dante- estaba entredormida y cogí mi móvil, intenté llamarlo pero no tenía su número de teléfono.

--¿Qué pasa Ames?- dijo una voz familiar.

--¿Puedes quedarte?- No sabía por que habia dicho eso pero lo necesitaba.

--Claro- respondió acomodándose al borde de la cama y apoyando su mano contra mi cobija y tapandome hasta el pecho.

--¿Puedo preguntarte algo Dante?- sonreí mientras preguntaba aquello y él sólo se limitaba a mirarme.

--¿ si te puedo dar un beso apasionado de buenas noches antes de que te duermas?- sonrió y bajó la mirada.-- entonces debo contestar que si me hace falta uno.

--¿De donde vengo?- pregunté soltando una carcajada.

--Del vientre de tu madre- se rió y siguió al ver mi cara seria-- es cuando una mujer y un hombre...- Lo corté rápidamente y le añadí.

--Eres un idiota- le espeté dándome vuelta para no mirarlo.

--Lo sé, es parte de mi- cerró los ojos y los volvió a abrir con arrogancia.

--¿Te quedarás ahí sentado o te acostarás? Contesté

-- Necesito dormir un poco, si no te molesta- dijo de buena manera, me levanté y saqué otro colchón que guardaba debajo de mi cama y lo dejé al costado de ésta, saqué un par de sábanas, cobija y una almohada. Le tendí la cama y me volví a acostar, sentí que se acostaba abajo y me quedé dormida.

Mejor dicho, " me desperté jadeando", todo había sido un sueño y para confirmarlo, miré hacia los costados de mi cama en busca de un colchón en el piso. Por supuesto que no había nada más que el short negro y una blusa ajustada color vino tinto.

Pasé todo el día en la biblioteca que está en el centro de la ciudad, haciendo deberes, buscando información... Luego a la tarde-noche decidí regresar a casa.

(..)

--Ames, hoolaa- Cassey sacudió una mano ante mis ojos para atraer su atención.--La profesora te está nombrando.- estábamos en clase de Literatura.

-- Si, ¿que sucede?- pestañeandi, volví a la realidad.

--Como les decía queridos alumnos, vamos a trabajar con el árbol genealógico, quiero todos los detalles. Cuenten su descendecia, no tengan miedo de saber e investigar sobre sus antepasados. Es por eso que he decidido formar grupos de a dos.
Dante parate por favor- Obediente, Dante se paró y se puso al lado de la profesora.-- Tú escogerás a tu compañero o compañera, Piénsalo bien, puedes descubrir todo el pasado de una persona si te lo propones.

--Escogo a Amélia- dijo guiñandome el ojo, no entendí que quiso decir.-- Prepárate Ames, pronto tú y yo conoceremos tus secretos más ocultos.

--Pues bien, este trabajo es para la otra semana que viene, los demás escojan a sus próximos compañeros de dos semanas-. Me levanté de mi asiento y me sitúe al lado de Dante. Vi que Cassey quería protestar.

--¡No es justo!, nunca puedo hacer mi trabajo con Ames- tenía razón, yo sabía que iba a quejarse, pero era verdad.

--Tal vez por que Amélia te ayuda con tu trabajo la mayoria del tiempo- replicó la profesora con veneno extra para matar cualquier cosa que se le opusiera.

--Maldita profesora- susurró para si misma furiosa. Pero no tan bajo por que la escuché.

--¿Que dijiste?- respondió la profesora abriendo los ojos y mirandola amenazante.-- Ve con el director ¡ahora!-

A and ADonde viven las historias. Descúbrelo ahora