Ethan... casualmente el narrador.Cuantas cosas han desaparecido de aquí... Él no podría contarlas con sus nubes.
¿Recuerda a cada una de ellas?
¿No puede olvidar a nadie?
¿No quería hablarle a esa torpe ave porque sabía que iba a desaparecer en cualquier momento como los demás?
No lo sabe...
Él no es feliz, es lo único que puede comprender.El invierno llega, las flores mueren, los árboles no tienen hojas, las aves se descomponen, los colores son fríos y las noches dan terror. Lo ha vivido mucho tiempo, pero ahora es libre de su pesadilla a lo efímero de la vida.
El sol se oculta...
Es una pequeña ave, que ha caído a pleno vuelo, pero él prometió no olvidarla...
—¿Crees qué...? —dejé la frase en el aire, esperando la respuesta de Matt el gruñón.
Se oía un completo silencio del otro lado de la línea, lo que me hizo estar más nervioso. Algo me decía que estaba inconforme, igual que yo, con los resultados del escrito. Deberíamos haber probado algo diferente en vez de una tercera persona con esa historia y la narrativa era pobre.
—Sí... no puedo sentirlo —lo imaginé haciendo un par de muecas desde su escritorio— . No me siento atrapado totalmente por el momento... Tal vez, si fuera en primera persona podríamos...
—Am... —No me dejó terminar.
Interrumpió tosiendo un poco y suspirando lentamente, de forma estresante. Siempre entraba en depresión cuando los escritos no salían como él quería o no eran recibidos por el público. Tenía mucha carga encima de él, y quería cargarla solo.
Me recargué en la nube, analizando la situación mientras escuchaba su respiración entre cortada. Apoyé mis tobillos en el árbol debajo de mí. Era relajante ver ese lugar a pesar de no poder sentir la brisa corriendo con fuerza. Aún así, podía oler los azahares haciéndole honor el nombre del protagonista con belleza. El brillante sol estaba allí, dedicando su iluminación a un lindo día como ese.
—No es tu culpa, es mía. Debo arreglar el guión, siento que se lee algo simple y confuso —suspiró nuevamente. Estaba agotado, no había dormido por un tiempo—. Dejémoslo aquí por hoy, tengo que arreglarlo y también debo editar unas portadas con Demian para ahorrarnos el dinero del diseñador. Me encargo de eso luego.
—Agh, de acuerdo... —removí la escena, retiré guiones y un par de escenarios con el control de botones que cargo. Mi nube desapareció como por arte de magia. –¿magia negra?– Me moví de inmediato a la oficina, apareciendo con una serie de movimientos perpendiculares y tomé mi brazo para evitar su desprendimiento como holograma. Este trabajo era extraño, pero me agradaba.
Llegué a la sala principal, en la cual estaba Matt ojeroso, serio como siempre, mirando sus escritos con decepción. Lucía mareado, estaba sudando y su rostro era colorado. Los albinos solían estar así por la intensidad del sol, pero Matt no salía por nada en el mundo ni si quiera para comprar comida, así que algo andaba mal.
Retiró sus lentes y me volteó a ver, esperando alguna opinión acerca de "No me olvides".
—Oye, creo que para esta historia necesitaremos un poco de ayuda de Silver y Percy. Silver es bueno con los escenarios tétricos, le daría ese toque fantasmagórico que falta, y Percy es bueno con las sensaciones vacías y tristezas de una forma muy dul... —me callé al ver su condición.
Matt cayó desmayado de su silla.
—¡Aún no te mueras, tienes mucho que pagarme! —corrí desesperado para levantarlo del suelo.
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El narrador que se enamoró de la protagonista. {FINALIZADO}
Teen Fiction"Supongo que de todas las ideas más locas que se le podrían imaginar a un retorcido escritor, la más demente eras tú." Yo siempre he sido un personaje secundario, con la personalidad del escritor, las expresiones del escritor, y el físico de él... L...