Capítulo 27

7.3K 511 18
                                        

He despertado de buen humor, mi cabeza y todo mi cuerpo ya no duele como ayer. Mi estómago ruge, pidiendo que sea alimentado, me trato de estirar pero recuerdo justo a tiempo que al hacerlo puedo lastimarme aún más. Miro el reloj en la pared, son las 9 AM, he dormido muy bien, demasiado bien y eso es bueno para mí. Sonrió al recordar todo el día de ayer, aunque fue estresante por qué tuve que contarle todo a Jordan, fue también muy liberador. Después de que Jordan supiera todo, se quedo a cuidarme toda la tarde y la noche también, ha sido muy tierno y excesivamente cuidadoso conmigo.

— Buenos días, señorita Medina — La enfermera de nombre Iris, entra sonriente y con una bandeja de comida, la cual deja sobre la mesita de ruedas.

— Buenos días. Dime Dania — ella sonríe y me acerca la mesita.

— De acuerdo, Dania —

— Mucho mejor — veo la comida y mi estómago vuelve a rugir de hambre.

— ¿Cómo te sientes? — empieza a mover la bolsita del suero y a hacer anotaciones en la carpeta, mientras me pregunta.

— Bien, de hecho, mucho mejor que ayer — tomo un trozo del Hot Cake que me han traído y me lo llevo a la boca. ¡Está delicioso!

— Me parece bien — sigue en su labor, mientras yo como — Te dejare tus medicinas aquí — me las deja en la mesita.

— Mmm — murmuro.

— Ah! Y esto te lo dejo tú novio — me da una hojita doblada a la mitad — Vendré cuando hayas terminado, hay que hacerte un chequeo para saber si te damos el alta hoy mismo — asiento y ella sale de la habitación.

Abro la nota y sonrió al leerla..

"Tenia que irme a trabajar. Lo siento. William estará a tu cuidado, por favor cuídate mucho. No tardaré y regresaré a cuidarte.
Te amo.
J.J "

Exagera, pero me gusta sentirme cuidada por él.

Al terminar mi desayuno, la puerta es abierta por William. Anoche lo conocí así que, ya sé quién es.

— Buenos días, Señorita Medina — me dice sonriendo.

— Buenos días — empujo un poco la mesita — ¿Ya desayunaste? — asiente.

— Así es — le sonrió — ¿Se le ofrece algo? — asiento.

— Hace tiempo que no sé nada de mí hermano, ¿podrías prestarme tu teléfono? — asiente y me lo da rápidamente — Gracias—

— Estaré afuera — y sale sin decir algo más.

Marco el número de Álvaro y mientras espero, ruego que tenga el celular encendido. Después del segundo tono, veo que así es...

— Dania — suelto el aire que no sabía que estaba conteniendo.

— Hola Álvaro.

— ¿Cómo estás? Perdona que no te he llamado, pero he estado ocupado con la investigación de Padre y de Jefte.

— Pues se puede decir que estoy bien — Decido no contarle nada del atentado — Y no te preocupes, me imaginé que estabas ocupado, sin embargo, me preocupe mucho por tí —

— Yo estoy bien, Dania. Me sentí raro todo el día de ayer, no puedo explicarte a ciencia cierta que era lo que sentía, pero hoy ya estoy mejor.

— ¿Cuando te regresas? — Me preocupa que León cumpla su amenaza y más si él está solo y yo en malas condiciones.

— Posiblemente hoy. No sé todavía, lo de Padre y hermano, ya está cerrado y es otra pena que deberá pagar ese hijo de puta. ¿Que sucedió con tu juicio?

Mr.InsolenceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora