Capítulo 11

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Despierto de golpe a causa de un sonido y por el fuerte dolor de cabeza que siento, miro por todos lados y estoy en mi cuarto. Me levanto y me mareo por el esfuerzo, me siento de nuevo en la cama y trato de calmar el dolor de cabeza y las ganas de vomitar. Miro mis piernas y traigo el pantalón de pijama, me revisó toda y no recuerdo haber llegado hasta la cama y mucho menos haberme cambiado.

Las ganas de vomitar regresan y ya no puedo disiparlas y corro hasta el baño para terminar el trabajo, cuando terminó me lavo los dientes y me amarró el cabello con una liga. La puerta se abre y es Greta.

— ¿Que haces levantada? — me río.

— Estoy bien — camino hasta salir de mi habitación y tumbarme en el sillón.

— No, no lo estás! — se va a la cocina y cuando vuelve me trae un vaso con jugo de naranja y me tiende unas pastillas — Tomatelas! — la obedezco — Te desmayaste y me asusté mucho que le marqué a Rocky para que viniera. La doctora Sullivan vino y nos dijo que sólo fue una impresión, nada de qué preocuparse — me sonríe.

— Gracias, mamá Greta — está niega — ¿Dormí mucho?

— Algo... Toda la noche — casi escupo el jugo — Nada raro en ti  — le arrojó un cojín — Por cierto, al parecer, Álvaro consiguió un vuelo para acá ayer por la noche y ya acaba de llegar. Rocky fue por él — asiento.

— Todo esto me impresionó —

— Lo sé. Se muy poco por que tu hermano no me quiso decir, estoy preocupada por ambos — se acerca y me abraza — Últimamente, todo lo estás recordando y no la estás pasando bien. Y luego está ese maldito juicio que tienes que afrontar — miro hacia un punto no especificó.

— Es horrible, no sé cómo de pronto todo mi pasado llega como recuerdos tormentosos y no se van. Ni en mis sueños, ni despierta, me salvó de ellos — en eso la puerta se abre y Rocky pasa y detrás de él viene Álvaro. Me levanto y lo abrazo con todas mis fuerzas, estoy llorando en su hombro por todo lo que lo he extrañado.

— Mi niña! — siento que el también está llorando y lo aferró más a mi. — Dani, Mi pequeña morena! — no quiero separarme.

— Te extrañé mucho! — sollozó aún más.

— Lo sé, pero vamos déjame sentar y saludar a Gret — asiento y bajo de él.
Greta se acerca y lo abraza también y llora al igual que nosotros.

— ¿Quieres café? — Greta le ofrece pausando las palabras por el llanto.

Álvaro asiente — Por favor — ella sonríe y se va a la cocina mientras que yo me tumbó en el sofá a un lado suyo.

— Y Jefte? — pregunto y el simplemente niega.

— Dania, León mató a Padre y a Jefte

— No! — grito y Rocky se acerca a abrazarme.

— El llegó preguntando por ti, hace unas cuantas semanas. Nadie le dió tu paradero, sin embargo, el prometió volver y acabar con nuestras vidas por no haberle dado tu paradero. Yo lo amenacé con denunciarlo con la FBI y el me golpeó — toma su taza en mano — Hace un par de días... Fue a la casa, yo no estaba había ido a depositar un dinero al banco y cuando volví, padre y hermano estaban muertos — se rompe y veo sus nudillos blancos por la fuerza con la que aprieta la taza.

— Ese maldito! — me levanto y empiezo a gritar — Esto no puede estar pasando! Esto no! — Greta está sentada y callada, Rocky solo abraza a mi hermano.

Camino a mi cuarto, tomo mi cazadora, mis tenis y mis llaves de la moto. Salgo de la casa sin dar señales a nadie y al bajar monto mi moto y salgo disparada hacia donde sea. Me siento rota, mi hermano Jefte no debía pagar por lo que yo cometí en el pasado. Como desearía no haber conocido a León y mucho menos haberme enamorado de él. Álvaro y Jefte no debían haber pagado por algo que fue mi error y mucho menos mi padre.

Mr.InsolenceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora