— Dani! — el grito de Lydia me asusto tanto que se me ha caído una de las pesas en el pie de alguien.
— Lo siento, perdón. De verdad que .. — el chico sin nombre me sonríe como si no sufriera dolor.
—Tranquila, ese grito a cualquiera lo asustaría — ambos reímos.
— Dania ¿Por que tardas? — Lydia entra y al ver al chico sin nombre, ella sonríe y lo abraza.
— Frank!! — lo toma por los hombros y lo examina — Tanto tiempo sin saber de ti. Mírate eres todo un galán —
— Ni se diga de ti, Lydia. Sigues igual de como te recuerdo — se vuelven a abrazar.
— Hola! — digo para que no me ignoren.
— Lo siento, se me olvidó presentarte a mi amiga — se disculpa Lydia — Frank ella es mi muy despistada amiga. Dania Medina — el me sonríe y yo ruedo los ojos.
— Ya tuve el placer de conocerla. Me llamo Franklin Gray, un gusto — me besa la mejilla.
— Mil perdones, de verdad que ... — y me volvió a interrumpir.
— No te preocupes —
— Oh! — Si Franklin no la mata, yo lo haré y no será muy grato.
— Deja de gritar mujer — dice él a lo que yo rio.
— ¿Porqué no vienes con nosotras? Así platicamos y nos divertimos ¿Les parece bien?— Niego con la cabeza.
— Me encantaría. Bueno sí no causo problemas ... —
— Por mi está bien — me encojo de hombros.
— Yei!!! — A estas alturas dudo mucho que Lydia sea una mujer hecha y derecha...
A veces es tan infantil!!
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— No lo puedo creer! ¿En serio ella era así? — le pregunto a Frank después de haber escuchado sus crónicas escolares.
— Es difícil de creer pero no cambia nada — Se burla él y Lydia lo golpea con una pala de cocina. — Auch! — se queja.
— Idiota! — me río con ganas.
— Lolo, ni siquiera se cómo le haces para aguantarla — Penélope se encoje de hombros y se ríe.
— Seguro que es por qué la amo y es la mejor en la ... — la callo poniendo una de mis manos en su boca.
— Ok, ok, ok. Ya nos quedó claro! — ambas locas se ríen.
— El chiste es que el y yo nos llevamos muy bien, aún cuando se mudó a Londres para estudiar leyes — Frank asiente.
— Siempre fue como mi hermana, y cuando yo supe sobre su preferencia sexual, la apoye aunque su familia no lo hiciera — ella niega.
— Hablemos de otra cosa ¿Sí? — A Lydia no le gusta hablar mucho de eso.
— Ok — dice Penélope y de pronto se escucha el timbre de la puerta.
— Yo iré a abrir — digo y salgo disparada hacia la puerta.
Abro la puerta y me encuentro con dos gratas sorpresas y una muy pésima. Eliot, Trevor y por desgracia, el "Princeso", están aquí. Les sonrío a los dos primeros y los dejo entrar, ambos me saludan con un beso en la mejilla y se adentran a la casa.
— ¿Dime?¿Que se te ofrece? — me cruzo de brazos y lo miro casi sin parpadear. Es divertido ver cómo se enfada de a poco, por que no lo he dejado entrar.
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Mr.Insolence
Romansa- Apostemos - ¿Apostar? - asiente - Me parece bien, ¿Que desea apostar la princesa? - cruzo mis brazos y escuchó la risa de Rocky detrás de mi. - Si yo gano y tú pierdes, tendrás sexo conmigo - Que idiotez! En mi vida tendría sexo con este wey! - ¿...