06. disrespect.

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Jongdae fue el primero en reaccionar y tomar su mentón, observó a sus ya inundados ojos de lágrimas esperando una respuesta.

-¿Quién era, Minnie?

No contestó, miró el teléfono de Sehun que aún retenía entre sus manos y lo dejó frente a él cuando se levantó dispuesta a irse, Jongdae no se opuso y la dejó alejarse de la mesa; no se dió la vuelta para comprobar como estarían sus reacciones por vergüenza a sí misma. Había llorado frente a ellos y se sentía ridícula por lo que pudieran pensar, a excepción de Chanyeol y Sehun, los otros tres chicos restantes eran los únicos que no le habían visto "débil" o en una situación similar.

Debería darle igual.

Sorbió su nariz por última vez una vez que tocó la alfombra de su hogar al llegar, recorrió el corto camino desde la cafetería hasta su hogar con un ligero malestar, con unas persistentes ganas de seguir llorando y su ansiedad al mil. Puso la estufa mientras se daba un baño, cuando salió se sirvió té y se sentó en el sofá viendo un punto fijo en una esquina, con la taza humeante y la chaqueta de Henry todavía puesta. Tomó su teléfono de la mesa y lo encendió, tenía varias notificaciones y mensajes de Kyungsoo. Él le había necesitado urgentemente pero en ningún mensaje decía por qué o para qué.

¿Qué había sucedido con él?

Hana reconocía que había sido en parte su error aún sin entender del todo la situación. Él casi nunca la necesitaba con desespero y cuando lo hacía terminaban siendo cosas tontas, no debía preocuparse, seguramente se había enojado más por el hecho de que estuviese con Jongdae y no le dijese nada, que por tener su teléfono apagado, pero ahora, ¿cómo sabía que ella estaba con Jongdae?

Y, ¿cómo él tenía el teléfono de Sehun y no se lo pudo haber dado cuando lo necesitó? Pudo ser mejor declararse anónimamente por un mensaje, ella se lo pidió pero alegó que no lo tenía.

Suspiró, aún con su mejor amigo enojado, sólo pensaba en sí misma.

Debía llamarlo, pero sabía que no le contestaría, Kyungsoo no disfrutaba de estar alejado de ella, él mismo lo había dicho en ocasiones; sin embargo, creía que estaba mejor dejar las cosas así para mañana hablar con él en persona, le explicaría, él lo entendería de mala gana, pero la abrazaría después de amenazarla. Ése en el mejor de los casos.

Y en el peor de los casos, simplemente no había un buen futuro para ella o Jongdae.

Se quemó la lengua con el té y arrugó el ceño, dejándolo en la mesa, levantándose del sofá y caminando hasta mi habitación donde se encerró para dormir. Se acomodó en posición fetal y abrazó la chaqueta contra su cuerpo quedándose dormida.

📑📑📑

Generalmente, no le agradaba usar el auto que tenía en el estacionamiento, primeramente porque no tenía licencia y aunque el camino de su casa a la escuela no fuese para nada largo, prefería evitar tener problemas. Ésa mañana no tuvo mucha opción, se había despertado tarde, tuvo que arreglar su mochila en tres segundos y dudaba de si tenía todo, no desayunó y por error, se había llevado la chaqueta de Henry en lugar de la del equipo, e incluso su cabello seguía goteando una mezcla de agua y acondicionador cuando salió. Una vez que estacionó el elegante auto negro que no le pertenecía del todo, dejó escapar un suspiro. Encendió su teléfono y observó la hora.

7:55 AM.

Inesperadamente, le sobraban cinco minutos que estaba dispuesta a aprovechar en la cafetería con Cherry. Se liberó del cinturón de seguridad, tomó la mochila en un hombro, su teléfono en una mano y caminó por los largos pasillos directo a la cafetería.

REJECT ME ー OH SEHUN. [en edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora