Prohibido Enamorarse©

Capítulo 28

Benjamín

Me encontraba sentado en la arena a lo lejos observaba como la princesita intentaba estar lo mas cerca posible del mar sola, era divertido verla parecía una niña pequeña huyendo de lo desconocido.

—¿De que te ríes?— pregunto Mauro mientras se sentaba a mi lado.

—Es divertido verla intentarlo—conteste sin despegar la mirada de la princesita.

—Oh hablas de Milene, es una linda niña pero realmente es una cabeza dura, cada dia creo mas que es mi hija —dijo entre risas Mauro.

—Y, ¿aun sigues sin querer regresar?— pregunte mientras lo miraba.

—La verdad es que siento cierta curiosidad, debo confesar que me gusta mi vida aqui, siempre pense en formar una familia pero nunca lo hacia, sentia que estaba bien solo porque mi corazón se sentia bien y ahora entiendo porque—dijo con una sonrisa mientras miraba a la princesita—yo ya tengo una familia.

—Entonces eso es un si o un no.

Mauro comenzó a reir, se levanto de la arena y tomo su red.

—Es un tal vez.

Dijo y se fue directamente hasta donde la princesita, la mire con atención una enorme sonrisa se dibujaba cuando estaba con su padre. Al parecer alguno de los dos dijo algo que les causo bastante gracia.
Cuando Mauro me apunto y la princesita me miro me senti un tanto nervioso, ¿que habia dicho?.
La princesita se  acerco y se sentó a mi lado.

—Estas mejorando— le comenté.

—Gracias, la verdad creo que es un gran avance.

—Lo es—me quede un momento callado mientras la miraba— y, ¿todo bien con tu padre?.

—Toda va bien, me dijo que quería ver una foto de mamá.

—¿Y que le dijiste?.

—Que mejor fuera a verla con sus propios ojos.

—Hablando de tu mamá, como crees que tome la noticia sobre que tu papá ya sabes, sigue con vida.

—Bueno solo espero que no se desmaye por el impacto pero quitando ese hecho, muy feliz

—¿Como tu?

Vi como la princesita me miro me regalo una sonrisa y volvió a dirigir su vista al mar.

—Si, estará muy feliz como yo... Sabes siempre pense que nunca lograríamos llevarnos bien, ya que bueno tenemos muchas difrencias, pero resulto ser que tenemos muchas mas cosas en común. Sabes Blaszczykowski eres un buen amigo.

**Asi es amigos míos fui enviado a la zona de amigos antes de poder hacer o decir algo.

*Oh perdóname, a penas y estaba dejando de detestarte.

**Excusas, excusas. Como sea continuemos.

—Opino lo mismo.

Dije mientras volvía mi vista al mar, mire como varios niños comenzaron a correr en dirección al mar, mire de reojo a la princesita quien tambien los estaba observando pero de pronto se levanto de golpe y corrió hacia el mar, yo fui detras de ella.

—¿Que sucede?— pregunte.

—¿Que no viste?—me pregunto algo molesta.

—Por algo te estoy preguntando.

Le conteste la oi bufar con molestia, tomo mi rostro y señaló a un niño que habia sido arrastrado por una ola.

—Yo ire por él.

Dije mientras me adentraba al mar.

Annabelle

Cuando Blaszczykowski entro al mar por los niños, le ordene a los demás esperar afuera, yo estaba con los nervios de punta. No lograba ver a Blaszczykowski.
Pero si observe a mi padre con el niño el brazos, le dijo algo en aquel idioma y el comenzó a llorar, yo mire el mar seguia sin observar a Blaszczykowski.

—¿Y Blaszczykowski? —le pregunte a papá.

—No lo e visto.

Dirigí mi vista al mar, ¡oh demonios!.
Sin pensarlo me adentre al mar.

—¡Blaszczykowski! — grite mientras nadaba— no es gracioso tonto.

Dije mientras me sumergida un poco, pero aquella imágenes venían de nuevo a mi, por lo que salí a superficie, gire la mirada ya no lograba observar la orilla.

—¿Blaszczykowski?— pregunte al no ver mi oir nada— ¡Blaszczykowski!

Grite con desesperación, me sumergi de nuevo al mar ignorando el hecho de que tal vez pudiera perderme mas.
Trate de abrir los ojos, pero a mi mente solo venían varios recuerdos vagos sobre lo ocurrido, senti un gran nudo en el estomago, trate de subir de nuevo a la superficie pero me sentia bastante cansada, abri los ojos y observe una silueta.
Un sentimiento cálido con un tacto sutil senti de la nada, habia salido a la superficie y di una gran bocada de aire, senti como alguien tomo mi mano, me estaban subiendo a un pequeño bote.

—¡¿En que estas pensando!?

Me grito mi padre, yo sentí mis ojos lloroso, estaba preocupada por Blaszczykowski.

—Realmente eres una princesita terca y tonta.

Oí decir a su voz , voltee la mirada y lo observe subir al bote. Un gran alivio comenzó a llenar mi alma, cuando estaba a apunto de echarme a llorar, oi los sollozos de mi padre, el me abrazo con fuerza.

—Oh mi pequeña señorita, no vuelvas a hacerlo dijo mi papá entre lagrimas—no vuelvas a irte asi Milene, no quiero perderte hija.

Aquella palabras llenaron de mi corazón de felicidad, una palabra tan corta pero tan significativa para mi.
Correspondi el abrazo de mi papá y comencé a llorar también.